Consentido • ʰᵒᵖᵉᵐⁱⁿ

Dieciséis

Acariciaba su espalda suavemente, los sollozos de Jimin se habían apaciguado cuando las grandes manos de Hoseok empezaron a subir y bajar por su espalda con delicadeza.

Ambos se levantaron del piso, Jimin lavó su boca, Hoseok lo rodeó con su brazo sus hombros mientras Jimin le rodeaba la cintura. Se dirigieron al cuarto, Hoseok sentó a Jimin al borde de la cama y luego salió de la habitación, el menor sentía sus ojos hinchados de tanto llorar, sentia que se veía patético en esa situación.

Hoseok regreso con un vaso de agua, se sentó a su lado y se lo tendió, Jimin aún sin mirarle lo tomó y bebió del vaso su garganta le dolia, consecuencia del vómito. Cuando acabó el agua le tendió el vaso a Hoseok en silencio.

Ninguno de los dos dijo nada hasta que Hoseok pocisionó una de sus manos encima de una de las de Jimin.

-¿Te sientes bien?

Jimin no sabía que responderle, no sabía si el mayor le preguntaba el motivo por el cual vomitó o si se sentía mejor después del abrazo. Se limitó a asentir

-¿Estás seguro? Conmigo no hace falta mentir.

-Si Hyung, estoy seguro. - respondió Jimin en voz baja, Hoseok tomó su barbilla y lo obligó a mirarlo.

-Jimin...

-Enserio Hyung -jimin lo miró directamente a los ojos para que le creyera -estoy bien, me siento mejor.

Y asi era.

-Tú... -empezó a decir Hoseok hasta que oyó unos pequeños golpes en la puerta.

-profesor Jung, ¿Va a darnos clases? -se escuchaban voces infantiles afuera.

Jimin notó que Hoseok aún quería preguntarle algo pero los gritos de los pequeños se lo impedían.

-Vaya, tiene un compromiso con los niños. - murmuró Jimin apartando su rostro.

-Puedo cancelarlo. -respondió el mayor mirándolo fijamente.

-No, en serio, me siento bien. -Jimin le dió una leve sonrisa -si pasa algo yo te llamo ¿Si?

-¡Profesor Jung!

-¿Seguro?

-Seguro Seok. - dió una corta risa.

-Bien. -suspiró el mayor con la situación se levanto de la cama y salió de la habitación al menor escucho como el pelinegro abría la puerta de la casa.

-¡Pensamos que ya no iba a darnos clases!

-Salió un imprevisto -escuchó la voz de Hoseok -adelantense yo los seguiré detrás

Jimin se levantó y salió de la habitación, se dirigió a la cocina y sirvió un jugo de naranja tomó una manzana y salió a la sala.

-Toma, ya que no pudiste desayunar. -Jimin le tendió el vaso de naranja y la manzana.

-¿Tú qué vas a desayunar?

-No lo sé. Ya veré qué preparo.

Hoseok le dió el vaso ya vacío.

-No tardaré mucho ¿Si? Recortare las clases, si te sientes mal llámame.

-Estaré bien -dijo Jimin -nos vemos.

Hoseok asintió y salió de la casa,

Jimin suspiró y se sentó en el sofá de la casa, cerró los ojos. Su mente viajo por distintos recuerdos y pensamientos, recuerdos alegres y agradables 0ero a medida que iba recordando más, estos se tornaban lóbregos y sombríos.