CAPITULO 21

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Tocaron a la puerta de repente, me pregunto si eso tenía que ver con el regalo de Ariel...

-¿Porque no abres nena? -Me dijo Ariel con una gran sonrisa
-De acuerdo

Me dirigí a la puerta, me paré frente a ella, acomodé un poco mi pelo y sacudí mi ropa, después abrí la puerta y....

-Hola cariño

Mis ojos se tornaron en llanto al ver esa silueta que tanto había anhelado ver desde hace tiempo

-¡Mamá!

Solté en llanto aún más, pero sólo me quedé parada sin decir más pues la silueta que ahora observaba no era la misma que yo recordaba, se había cortado el pelo, se notaba mucho más delgada, estaba pálida y ojerosa, podía notar cómo se le miraban los huesos de las muñecas en la piel, se veía bastante cambiada, estaba tan delgada que hasta daba miedo.

-Jenny yo pensé que tú...
-¿Que estaba muerta? -Respondí
-Si, vi en las noticias lo que había pasado y no supe cómo reaccionar, te busqué un tiempo pero
-Ya no digas nada mamá -Interrumpí sus palabras y la abracé inmediatamente-No sabes cuánto soñaba y necesitaba esto mami
-Perdóname por abandonarte hija
-No hay nada que perdonar mamá
-Señora, pase está en su humilde casa -Dijo Ariel acercándose a la puerta donde estábamos paradas ambas
-Gracias hijo y a ti también quiero pedirte una disculpa por juzgarte, tú has ayudado mucho a mi hija y te agradezco tanto por dejarme verla
-¿Tú la llamaste Ariel?
-Si amor, Sé que ella es muy importante en tu vida y que la extrañabas mucho, así que decidí traerla en este día tan especial para ti
-¡Gracias! Eres el mejor -Lo abracé y lo besé muchas veces
-¡Vaya! creo que haré esto más seguido si este es el premio -Dijo riendo
-Eres un tonto Ariel -Respondí
-Pero así me quieres
-Pues no queda de otra -Le guiñe el ojo y sonreí-Mamá ¿ya comiste? -Pregunté
-No hija, aún no
-Bueno, te serviré un poco, nosotros ya comimos pero te acompañaremos de igual forma
-De acuerdo hija, y dime, ¿todos ellos son tus amigos?
-Si mamá, a Renata y Sofía ya las conoces, el guapo de lentes es Santiago, el de cabello rizado es Jeffrey y aquel es Erick
-Hola mamá de Jenny -Sonrieron los tres al mismo tiempo
-Mucho gusto muchachos -Devolvió la sonrisa

Mi madre se sentó a comer y nosotros la acompañamos mientras comíamos botanas en la sala, estaba tan emocionada de que ella estuviera aquí y a la vez preocupada por su aspecto, no entendía porque estaba así, sin más, decidí preguntarle directamente

-Oye mami
-Dime Jenny
-Has cambiado tanto... ¿estás enferma?
-No hija, es solo que con mi trabajo no como ni duermo bien y eso me está afectando, pero estoy bien mi amor
-¿Segura?
-Sí hija -Sonrío
-¿Le dijiste sobre el bebé? -Le susurre en el oído a Ariel
-No -Negó con la cabeza
-Tu padre regresó Jenny -Soltó de golpe-No quiero que te asustes pero tienes que estar pendiente
-Ll sé mamá -Respondí-Y no tienes que preocuparte por eso
-¿Lo sabes? -Casi se atragantaba con la comida
-Es una larga historia que no quiero contarte ahora, pero me estoy escondiendo de él, estamos viendo a dónde ir para no encontrarme con el asi que por favor, no le digas nada sobre mí, no le digas que estoy viva
-No lo haré mi niña, pero ¿porque no me dijiste que lo habías visto? ¿te hizo algo? -Su cara había cambiado, tenía gesto de preocupación
-No mami, tranquila, no te preocupes -Traté de sonar segura- Te contaré otro día ¿De acuerdo?
-Sí está bien hija lo que tú digas, pero porfavor promete que vas a cuidarte mucho
-Lo prometo mamá, ¿Terminaste de comer?
-Si hija muchas gracias
-¿Necesitas algo más?
-No mi niña y discúlpame pero tengo que irme
-Antes que te vayas, tenemos algo que decirte -Le dije tranquilamente
-¿Que pasa? ¿Es algo malo? No me asustes Jennifer
-Pues no es tan malo -Sonreí apenada
-Bueno, dime -Me miró fijamente
-Bien, es que yo... -Me quedé callada y agaché la mirada
-¿Tu? -Preguntó
-Yo...
-¡Usted va a ser abuela señora, Felicidades! -Gritó Jeffrey
-!Jeffrey! -Nos volteamos todos a mirarlo y comenzamos a reír
-Lo siento es que me desesperé -Sonrío
-¿Es verdad Jenny? -Su mirada volvió a mí algo seria
-Sí mamá
-¿Tú eres el padre? -Se dirigió a Ariel
-Asi es señora y quiero decirle que no se preocupe por nada, yo la cuidaré bien, de echo la semana entrante tenemos cita con el doctor para que cheque si todo está bien con ella y el bebé
-Bien, pues ¡felicidades hijos! les deseo lo mejor y Ojalá todo salga bien
-Gracias mamá
-Gracias señora
-Dime Catherine -Sonrío con amabilidad
-Bien Catherine -Ariel devolvió la sonrisa
-Bueno chicos, me tengo que ir solo puede venir un momento, tengo varias cosas que hacer
-De acuerdo mami, te llamaré pronto y recuerda no digas a nadie que me viste, ni siquiera a Alberto
-No te preocupes cariño, cuídate mucho mi niña y sigue pasándolo bien, suerte en tu cita con el doctor. Antes que te marches espero verte
-Trataré mamá, y tú también cuídate mucho, gracias por venir

Me despedí de mi madre con un fuerte abrazo y un enorme beso, estaba feliz de haberla visto, la extrañaba tanto

-¿Te gustó tu sorpresa nena?
-Por supuesto que si Ariel, muchas gracias- Besé su mejilla
-Todo por ti mi nena- Me abrazó y besó mi frente

Ya estaba a punto de oscurecer pero los chicos aún no querían marcharse así que decidimos ver una película de las que había comprado Ariel

-¿Te gustó tu fiesta Jenny? -Preguntó Sofi
-¡Me encantó! gracias a todos -Les sonreí -Dejen ver la película -Dijo Jeffrey
-Tú cállate -Renata le aventó un cojín del sofá a Jeffrey
-Oye qué te pasa renacuaja -Le gritó
-No me digas así idiota
-Re Na Cua Ja -Repitió burlandose
-Cállate!! -Renata se levantó y fue hacia el para golpearlo
-Pégame pero no me dejes -Decía mientras se cubría
-Eres un estúpido -Respondió ella
-Así te gustó nena -Le sonrió con picardía
-Esto huele a amor
-Esto huele a que te partire el hocico -Respondió
-Oye tranquilo, ya no lo niegues más
-Esa renacuaja no es mi tipo
-Ní tú el mío -Respondió Renata
-Ya niños tranquilos, Jenny y yo estamos viendo la película
-Si ya callence -Menciono Santi

Terminó la película y pusimos otra, terminamos de verlas todas esa noche y cuando acabo los chicos me pidieron que abriera mis regalos; Sofía y Renata me dieron cosméticos, Erick un hermoso reloj con piedras, Santi un vestido negro super elegante, Luisa un par de zapatos y Jeffrey un baby doll

-Jefrey que te pasa -sonrei apenada
-Es tu regalo muñeca -Respondió sonriente
-Eres un tonto Jeff
-Estrenalo hoy después que nos vayamos para que Ariel pueda darte tu regalote
-Cállate engendro -Sonrío Ariel
-Solo digo la verdad
-Pues gracias a todos por venir, y por los lindos obsequios chicos, me la pasé excelente -Dije con alegría
-Qué bueno que lo disfrutaste -Respondió Santi
-Bueno, nosotras ya tenemos que irnos -Dijeron Renata y Sofía
-Esta bien, chicas les agradezco haber venido
-No agradezcas nos la pasamos muy bien nena, feliz cumple
-Nosotros también nos vamos de una vez, llevaremos a las chicas a sus casas porque ya es muy tarde
-Si Santi, gracias

Me despedí de todos y les agradecí nuevamente por estar conmigo, abrí la puerta y de repente vi que había un enorme hombre parado frente a ella.

-¿Quién eres? -Dijo rápidamente Ariel haciéndome a un lado
-No se preocupe joven, vengo de parte de Cristian, sólo vine a entregar esto a la señorita -Decía mientras me señalaba con la caja entre sus manos
-Bien, dile que gracias

Ariel le arrebató la caja y cerró la puerta en la cara del pobre hombre

-¿Que es? -Pregunté
-Toma es tuyo, ¡ábrelo tú! -Dijo en tono molesto
-No te pongas así Ariel
-¿Acaso no te dejará en paz ese idiota?
-El me ayudó Ariel y no está haciendo nada malo sólo es mi amigo
-Bien, Ya deja de defenderlo y abre tu regalo

Abrí la pequeña caja, era de color vino con un moño dorado, cuando vi lo que había dentro hasta los ojos me brillaron y no sólo a mí sino a las chicas que estaban a mi lado esperando a que lo abriera; era un hermoso y fino collar con incrustaciones de diamante y oro blanco ¡era hermoso! Sobre el venía una nota que decía :
"Te deseo un feliz cumpleaños mi niña hermosa, espero te guste tu regalo..."

Con cariño. Cristian, "Tu ángel"

-¡Wow! es hermoso Jenny -Gritaba Renata entusiasmada
-Si es bellísimo, pero no entiendo cuando piensa que lo usaré si no salgo a nada importante o sofisticado, no es algo que pueda ponerme cuando salimos de fiesta
-Pues quizás quiere que lo uses cuando salgas con él -Dijo Ariel
-No empieces por favor Ariel, sabes que eso no pasará -Respondí molesta
-Si tú lo dices... -Se dio la vuelta y se metió al cuarto
-Bien nosotros mejor nos vamos nena, Nos vemos luego -Dijo Santi
-Gracias chicos, vayan con cuidado -Cerré la puerta y fui a la habitación donde se encontraba Ariel
-¿Porque te pones así?
-Odio que ese imbécil te dé regalos y se preocupe por ti
-Ariel, él sólo es mi amigo, se preocupa así cómo Erik, Santi, Sofi o Renata
-El tiene otras intenciones y lo sabes
-Pero yo no, yo sólo lo veo como amigo y yo estoy contigo ahora y ¿sabes por qué?
-¿Porque no te queda de otra?
-No tontito, porque te amo
-Tú dijiste que ¿me amas?
-Sí Ariel, Te amo y quiero ser feliz sólo contigo ¿no lo entiendes?
-Perdóname nena, soy un estúpido
-Te perdono, y sí, sí lo eres pero te acepto tal cual -Sonreí
-Ven acá muñecota, yo también te amo -Me besó
-Bien, ahora déjame agradecerte lo que hiciste por mí hoy
-No tienes que que hacerlo
-No tengo que, pero yo quiero hacerlo -Sonreí

Me dirigí al baño, me puse el regalo de Jeffrey, le modele un rato a Ariel y de beso en beso terminamos haciendo mucho más hasta quedar dormidos...

"REBECA" Una historia jamas contada...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora