"James, necesito que vengas. Trae a los chicos".
Ese había sido el mensaje que Lily le había enviado con su patronus cuando estaba en el apartamento con Sirius y Remus. Cuando vieron entrar a la cierva los presentes se habían puesto nerviosos, no era habitual que ella le contactase. De hecho, siempre era James el que la seguía a todas partes y que incluso había comprado un teléfono muggle. Aunque aún necesitaba aprender a usarlo.
Remus quería esperar a que llegase Peter, habían quedado para trazar un nuevo plan de conquista, en el que James conseguía que Lily le hiciese caso por fin y en el que alejaban a Snivellus. Pero James estaba impaciente, el hecho de que le enviase un patronus y la voz apresurada de su pelirroja le habían puesto en alerta. Remus ofreció dejarle una nota en la que le contaran lo que había pasado, indicándole que lo esperaban en casa de Lily. Todos sabían de sobra gracias a James donde vivía. Al final, el asunto se les fue un poco de las manos, duplicaron la nota cientos de veces por que según Sirius, Peter era un despistado e igual no la veía. Después de empapelar las paredes y el suelo de notas gracias a la magia, se fueron.
Tardaron más tiempo del que querían porque sabía que a Lily no le gustaba que se aparecieran directamente en su casa, por lo que se habían aparecido en un callejón a dos manzanas, era el que habitualmente utilizaban y sabían que nadie lo frecuentaba, estaba bien escondido en unas callejuelas poco transitadas.
Cuando llegaron Lily estaba esperándolos fuera de casa y les hizo entrar al salón de estar dónde estaban sus padres. James estaba algo incómodo por la presencia de sus padres al igual que sus amigos pero ya se habían visto más de una vez, así que simplemente se saludaron rutinariamente mientras la señora Evans les convidaba a unas pastas con te o café.
Hablaron de cosas sin importancia hasta que sus padres se fueron a trabajar.-Lily, ¿Ha pasado algo?- Preguntó James.
-Necesito vuestra ayuda.
-Lo que necesites- respondió apresuradamente James pero ésta solo le devolvió una sonrisa incómoda.
-Se que lo que os voy a pedir no os va a hacer gracia pero no lo haría sino estuviese tan preocupada.
Los chicos la miraron confundidos.
-No hay nada que no podamos solucionar, déjanoslo- añadió Sirius son orgullo.
-Se trata de Severus...- y al decirlo vio como los chicos la miraban entre asqueados y sorprendidos. Aunque la mirada de James estaba cargada de recelo.
-¡No puedes estar hablando en serio! ¿Nos has llamado por Quejicus?- saltó James a lo que Lily le respondió con una mirada de reproche y angustia.
-James tiene razón. Las palabras ayudar y Snivellus juntas no están en nuestro vocabulario.
-No os lo pediría si no fuese...
-Pelirroja, sabes que haría cualquier cosa por ti pero esto se me escapa de las manos.
-Vamos a escucharla. Si nos ha llamado debe ser por algo- intercedió Remus por primera vez desde que habían llegado.
Sus amigos le miraron indecisos y contemplando probablemente los pros y los contras. Obviamente los dos llegaron a la conclusión de que por escuchar no pasaba nada, eso no significaba que tuviesen que ayudarle. James además pensó que el fingir que le interesaba lo que tenía que decir sobre Snivellus le daría puntos.
-Está bien- dijeron con resignación después de mirarse Sirius y James.
-Gracias chicos- lo dijo en general pero a quien más agradecía era a Remus, sin él no la hubiesen escuchado. Era como esa voz de la conciencia que parecía que aquellos otros dos habían perdido.- Le he mandado varias cartas a Severus desde que dejamos el colegio y apenas me ha contestado. De hecho ha dejado de hacerlo, han pasado dos semanas y no se nada de él.
ESTÁS LEYENDO
Un nuevo lado tuyo
RomanceSeverus siempre se ha llevado mal con los merodeadores, especialmente con Sirius Black. ¿Pero que pasará cuando Sirius conozca mejor a Severus? ¿Habrá una tregua o.. algo más? Sirius se esforzará por entender a alguien que no se deja comprender...