Severus aún sentado en el sofá con los ojos cerrados y agotado de no haber dormido en toda la noche esbozaba una sonrisa. Le daba igual que los demás le vieran, lo había conseguido. Había logrado lo que muchos habían intentado y fracasado, la maestría de pociones estaba prácticamente al alcance de su mano. Y aunque quisiera tampoco podría dormir, no con la adrenalina y satisfacción que corrían por sus venas y hacían que su cerebro estuviese más activo que nunca.
Había sido perfecta, tenía la receta grabada a fuego en su mente, nunca la olvidaría. Podría ganar mucho dinero con ella, sería estúpido sino lo hiciera, tenía ganas de escribir a su madre como un niño pequeño para decirle que ha sacado buenas notas en el colegio.
Si las caras cuando lo vieron bajar al sótano ya eran algo incluso en su forma animaga, habría dado lo que fuera por verlas en su forma humana. La confusión estaba escrita en la cara de todos ellos independientemente de su forma, sin atreverse a cambiar al inicio ante la situación desconocida a la que se enfrentaban. Severus era el que lo había hecho posible, ninguno de ellos había podido.
Remus y Sirius le habían agradecido cuando la luna ya no era visible en el cielo y habían vuelto a su forma humana. Había podido ver el agradecimiento en los ojos de Potter pero no había sido capaz de decírselo, siendo tan orgulloso como siempre, pero no le importaba, ambos lo sabían. Y Pettigrew quien había desaparecido junto con la luna, también había mostrado su agradecimiento a su manera, abriendo y cerrando la boca a unos metros de él como un pez para finalmente no decir nada y simplemente dedicarle una mirada significativa antes de salir prácticamente corriendo. Snape seguía pensando que su comportamiento era extraño pero nadie más parecía notarlo.
Se permitió una vez más caer en ese instante en el que había bajado al sótano, siendo arrastrado escaleras abajo por la forma animaga de Sirius, momento en el que había visto a Remus en su forma de hombre lobo con una mezcla de temor y esperanza.
Lo primero que le llamó la atención a Snape fue el enorme cuerpo encorvado en el suelo que miraba a la pared, dándole la espalda a todo y a todos. En un rápido vistazo a la habitación vio al resto de los animagos. Ya había sospechado que lo eran cuando vio a Black aquella vez que lo ayudó en el bosque, siempre lo hacían todo juntos, no había sido algo difícil de intuir. Lo que no sabía hasta ahora era la forma que tendrían, pero todos sus apodos tenían más significado que nunca.
-Un chucho, un cornudo y una rata-hizo una pausa y añadió con una sonrisa-muy ... representativo.
Los sonidos de protesta no se hicieron esperar, hasta ahora ni siquiera sabía que sonido hacia un ciervo. Sin duda le pareció muy interesante. Y si bien el ciervo adoptó una postura de ataque, Sirius se interpuso, por lo que ni siquiera se molestó en hacerle caso y dirigió su atención a Remus.
Se acercó con pasos aún cautelosos hacia Remus que en toda la discusión aún no se había movido. Pasó de largo una mesa que había en uno de los extremos del sótano con una nota encima en la que se podía leer claramente: Avisa a Severus. Debían haber estado tan sorprendidos por eso pensó Severus al leerla. Pero ahora solo había preocupación y confusión en sus caras. Sirius seguía los pasos de Snape hasta Remus ligeramente adelantado. La situación era demasiado irónica, años atrás había sido conducido a una trampa mortal por la persona que tenía a su lado y ahora permanecía cauto por su seguridad.
Snape llamó a Remus por su nombre y por su apellido pero lo único que consiguió es que el hombre lobo que tenía delante se tensara. Le puso una mano en lo que sería su hombro y lo volvió a llamar sin resultado. Al tacto era igual que tocar a un perro, no había mucha diferencia.
-Solo eres un chucho más grande, déjame verte la cara, tengo que saber si funcionó del todo o hay efectos secundarios-dijo Snape, sabiendo muy bien que había salido a la perfección. El único problema es que tenía a un lobo tímido.
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Un nuevo lado tuyo
RomanceSeverus siempre se ha llevado mal con los merodeadores, especialmente con Sirius Black. ¿Pero que pasará cuando Sirius conozca mejor a Severus? ¿Habrá una tregua o.. algo más? Sirius se esforzará por entender a alguien que no se deja comprender...