𝐎𝐔𝐓

cincuenta y nueve (final)

Han Jisung

Cuando despierto a la mañana siguiente, me encuentro con que tengo uno de esos papeles adhesivos pegado en la frente. No recuerdo habérmelo pegado a mí mismo, así que supongo que habré estado en alguna fiesta bebiendo tanto hasta acabar ebrio, por lo tanto no soy capaz de recordar cómo hab llegado a ese papel ahí. Sin embargo, ¿cómo puedo haber estado tan ebrio y no tener resaca? Algo no me cuadra, así que quito el papel de mi frente y utilizando la poca claridad que la pantalla de mi teléfono me brinda leo con dificultad su contenido.

"¡Hey, Jisung! ¿Estás teniendo un buen día?", dice la nota. Me rasco la cabeza con algo de confusión; no hay ningún nombre detrás ni al frente del papel, solo esa simple frase.

Aunque intento hurgar en mi memoria para saber de dónde viene esa frase tan familiar, el hecho de aún encontrarme medio dormido me dificulta pensar.

Escucho golpes en la puerta. Quejándome me incorporo en mi cama, acomodándome con las manos mi pijama —el cual se encuentra todo arrugado— mientras me encamino hacia la puerta, y cuando la abro, descubro que no hay nadie en el pasillo, sino algo más.

Otro post-it.

Felix sale caminando de la cocina viendo atentamente su teléfono. Se detiene frente a mi cuarto cuando se da cuenta de que estoy despierto, y me sonríe.

— Good morning, Jisunggie. —Saluda, con esa característica voz grave que tiene.

— Ah, hola... —Sin pensarlo mucho le señalo el post-it que hay en el suelo, y él lo mira con curiosidad—. ¿Tú pusiste eso ahí? —Pregunto, pero él niega con la cabeza.

— No, tampoco lo vi cuando me desperté esta mañana. Alguien debe haberlo puesto hace unos minutos. —Su respuesta solo consigue dejarme más confundido, y mientras se despide sacudiendo su mano, comienza a caminar hacia la puerta de salida—. Jisung, i'm going to see Changbinnie-hyung and Hyunjinnie in a Coffee Shop. Do you want to come with us?

El acento de Felix es lindo cuando habla en inglés.

Me apresuré a negar con la cabeza, aún pensando en las notas adhesivas que estaba recibiendo.

— No, but thank you, Felix. Espero que tú y los chicos disfruten de la salida.

El chico me dio una última sonrisa antes de dirigirse hacia la puerta y desaparecer detrás de ésta. Nuevamente, mi vista se vio fija en el papel que aún se encontraba en el suelo. Lo tomé entre mis dedos y observé lo que esta vez decía.

"Hola, hyung. Así es, ¿y usted?".

Cierro los ojos intentando recordar. ¿Por qué esto me es tan conocido? Siento que ya he visto esta conversación en alguna parte, pero mi memoria no va más allá de hace unos pocos meses. Debo haberla visto hace bastante tiempo como para apenas recordarla.

Cuando abro los ojos, veo que a lo lejos, pegado en la puerta, se encuentra otro post-it de un color verde chillón. Acomodándome mejor las pantuflas sobre mis pies, empiezo a caminar hacia allí, agudizando la vista para poder leer desde la lejanía su contenido.

"Esta es la primera vez en la que usted me envía un mensaje, ¿ocurrió algo? ¿Necesita que lo ayude a cocinar?", cada vez siento que el recuerdo se acerca más a mí, pero aún me veo incapaz de recordar qué sigue más allá de este mensaje o con quién estaba manteniendo está conversación.