Mi Mejor Error

Capítulo XVIII

-¿Me lo estás diciendo en serio?-Le pregunté con los ojos como platos.
-Sí,¿quieres salir conmigo?
-Pues...no lo sé...-hice como pensaba pero al ver la cara de tristeza que estaba poniendo me acerqué a él y le di un beso corto.-Claro que quiero,idiota.
Los dos sonreímos y tras una sesión de besos volvimos al interior del hospital.

(Maverick)
Si los días sin mi niña de ojos bonitos estaban siendo difíciles y pesados...imaginaos convivir con mi madre,aquella que me traicionó de la peor manera posible.
Todo el rato estaba detrás mío chillando que lo mejor era olvidarla.
Pero yo no quería olvidarla,quería estar con ella,mimarla y cuidarla el resto de mi vida.
-¡CÓMO VUELVAS A DECIR ALGO DE TODO ESTO ME MARCHO DE ESTA CASA PARA NO VOLVER,LO JURO!-La grité sin ni siquiera mirarla.
-¡Por favor hijo,no seas así!-Dijo con lágrimas en los ojos.
-¡Tú tienes la culpa de que ahora esté así!¡Por ser tan irresponsable y tan...!
-¡NO DIGAS COSAS DE LAS QUE LUEGO  TE PUEDAS ARREPENTIR!-Me gritó antes de darme una bofetada.
Me llevé la mano a mi mejilla derecha,ardía por el tortazo,pero lo que más ardía era mi corazón por no poder hacer nada por el amor de mi vida.
-¡ESTOY HARTO!¡VOY A HACER LA MALETA Y ME IRÉ! ¡NO QUIERO VOLVER A VERTE!-Cerré de un portazo y me dirigí a mi habitación.
(***)
Después de recorrer toda la ciudad de Madrid buscando algún apartamento o incluso alguna habitación en alquiler regresé al hotel donde me hospedaba.
Llevaba ya 4 días en la capital de España,y aunque no sabía hablar de forma fluida podía comprender lo que las personas de mi al rededor decían.
Cuando llegué a mi habitación cogí el móvil y me di cuenta que estaba apagado,así que rebusqué en la maleta hasta encontrar el cargador y lo enchufé.
Una vez que la pantalla se encendió y puse el PIN empezaron a llegarme un montón de mensajes y llamadas.
La mayoría eran de mi madre,hasta que en mis notificaciones me di cuenta de algo:
<<¿10 llamadas de Fran? Algo grave debía haber pasado para que mi amigo me hubiera llamado tanto>>.

Al tercer bip una voz me contestó.
-¡MAVERICK!¿Dónde te has metido para que no quieras saber nada de mí?
-Lo siento...he viajado a España y acabo de llegar al hotel después de buscar...
-¿España?¿Estás loco?
Antes de contestar escuché la voz de su hermana ¿ansiosa y preocupada?
-Maverick,Oriana está en el hospital,¡Debes volver a Italia,tu amor te necesita!
-¿QUÉ?-Abrí los ojos como platos.-¿Por qué?¿Qué le ha pasado?
-Cuando vengas te cuento con detalles,ella te necesita así que coge el primer vuelo que puedas...
-¿Pero está grave?
-Está en...coma.
-¡Jod***! Ahora mismo voy para allá.
-No nos moveremos de aquí,si pasa algo te avisamos.
-Está bien,gracias por avisar.

(***)
<<¡Un vuelo acaba de salir!¿Por qué tengo tan mala suerte?>>
Resoplé enfadado,pero solo de pensar que Oriana,mi Oriana, estaba inconsciente me dio fuerzas para no rendirme y buscar el vuelo más temprano disponible.
No importaba si tenía que pagar de más,pero quería regresar a Italia,verla y animarla para que despertara cuanto antes.
Fui a la ventanilla correspondiente y tras una larga charla con la chica morena de gafas negras conseguí un billete para dentro de media hora.
(***)
-¡Maverick!-Gritó Paola con lágrimas en los ojos nada más verme.
Me dio un fuerte abrazo y tras saludar a todos me dispuse a llamar a la habitación.
Sabía que solo Verónica podía entrar de momento,pero quería intentarlo,quería verla,necesitaba verla.
Verónica abrió la puerta y al ver que era yo se quedó pálida y con la boca abierta.
Antes de que me cerrara la puerta en las narices avancé rápido para pasar al interior.
-¿Qué haces aquí?¡Sal ahora mismo!
-Verónica,por favor,necesito verla y ella necesita verme.
-No te puede ver,¿no ves que está en coma?
-Pero sí me puede oír,y es todo lo que necesitamos para que vuelva a abrir los ojos.
Verónica se quedó callada.
-Si el doctor entra y te ve aquí nos podemos meter en un lío.-Dijo después de unos segundos.
-Por favor...hazlo por ella.
Asintió de mala gana,pero asintió.
-Te espero fuera,no tardes.
-Vale.
Una vez que la madre de Oriana me dejara a solas con ella me acerqué hasta la cama.
Oriana estaba tan pálida que casi no podía ver dónde empezaba la cama y dónde empezaba su cuerpo.
Sus ojos estaban cerrados y no se movían para ningún lado,ni nada de ella.
Sin embargo,la máquina conectada a ella indicaba que seguía con vida.
Tragué mi saliva y tras un breve suspiro cogí una de sus manos entre las mías.
Su tacto era suave,pero estaba algo fría.
-Hola mi amor.-Intenté sonreír.-Ya estoy contigo.-Acerqué su mano a mis labios para darle un dulce beso.
No recibí respuesta,pero sabía que ella me estaría escuchando.
-Perdón por haber llegado tan tarde...me fui a...España...no aguantaba estar con mi madre ni un día más,y si me quedaba aquí sé que todos me iban a juzgar.No te avisé porque...no quería preocuparte,además no sabía cómo contactar contigo sin decírselo a nadie más.Tenía todo planeado,no creas que te iba a dejar sola...quería encontrar un trabajo y un apartamento y después pensaba comprar un vuelo para ti,para que te vinieras conmigo a ese país,para que comenzáramos de cero y que nada ni nadie nos lo impidiera...pero...-Intentaba parar las lágrimas que comenzaban a salir de mis ojos.-no me dio tiempo a estar ni siquiera cuatro días,bueno tres si quitamos el de ida...en cuanto vi las llamadas de Fran no dudé en coger el primer vuelo para venir a verte.
Suspiré y tomé aire.
-Mi niña,por favor,si me estás escuchando...quiero decirte que te amo y nadie me va a separar de ti...despierta,te necesito aquí conmigo,abre los ojitos tan bonitos que tienes y huyamos de aquí,si no te gusta España podemos ir a cualquier otro sitio,solo con tenerte a mi lado sin ningún impedimento me vale.

El sonido de unos dedos golpeando la puerta me callaron,me levanté tras darle un beso en su mano y salí de la habitación.