Insistí un poco más pero recibía la misma respuesta: "El teléfono al que llama no está disponible en este momento..." así que me rendí y decidí esperar a que fuera Maverick quien me llamara.
Justo en el momento en que nos íbamos a sentar todos a cenar la puerta de entrada sonó y mi madre fue a abrir, segundos después un niño rubito vino corriendo a mis brazos.
-¡Tataaaaaaa, me alegro que estés ya buena!
Me contagió su sonrisa y le empecé a dar muchos besos.
-¡Cuanto te eché de menos Danielito!-Dije con una gran sonrisa.
-¡Qué no me llames así!-Se quejó.
-Anda, si sé que te encanta en el fondo y que echabas de menos ese apodo.
Él negó con la cabeza.
-¿Eso es tortilla de patata?-Preguntó con los ojos bien abiertos y con baba que le salía de la boca.
-Sí, pero para ti no hay.-Le saqué el pico.
-¡Claro que sí, cariño!-Me llevó la contraria mi madre.-¡Deja en paz a tu hermano!-Me regañó.
Mi padre entonces apareció en el salón.
-¡Oriana, hija mía!
-Hola papá.-Me levanté a saludarlo por cortesía, pues después de saber la verdad de todo mi relación con él se había enfriado aún más.
-¿Qué tal te encuentras?
-Sana y salva.
-Me alegro mucho, a ver si vienes más por casa y salimos a pasear juntos.
-Bueno...-dije mordiéndome la lengua por respeto a los invitados y a mi hermano.
-Yo me voy a casa, ¡qué aproveche!
-Gracias.
Cuando mi padre se fue empezamos todos a cenar.
(***)
Llevaba dos semanas sin tener noticias de Maverick, dos semanas en los que no quería salir de casa a pesar de que todos me intentaban convencer, dos semanas en los que ni Fran ni nadie lograba contactar con él y mi madre me prohibió hablar con Rose pues sabía que ella no me iba a decir nada y lo pasaría peor.
-¡Oriana, como me llamo Justin te juro que si me abres voy a tirar la puerta abajo, te agarraré de las orejas y te vendrás conmigo a dar una vuelta!
Suspiré, le abrí, pues sabía que él era capaz de hacerlo, y me eché de nuevo en la cama echándome por encima la manta hasta taparme la cara para poder llorar.
-Bebe un poco de agua y come algo, por favor, no puedes seguir así.
-No.
-¿Quieres volver al hospital?
-Si es la única manera que tengo de contactar con él sí, parece que solo vuelve cuando estoy en una situación grave.
-Mira cielo, la vida continúa y si no se ha puesto en contacto contigo será por alguna razón lógica, él te ama pero la situación es difícil.
-¡Él mismo me dijo que tenía miedo de perderme! ¿y ahora desaparece sin más?
-Quizá haya comprendido que por más que luchéis, vuestras familias nunca van a estar de acuerdo y que lo mejor es que os olvidéis mutuamente y sigáis con vuestras vidas de manera separada.
-¡No, él no es así, sé que no se rendiría tan fácilmente!
-No te fíes ni de tu propia sombra...
-¿Has venido para animarme o para destrozarme aún más?
-Oriana.-Dijo serio.-Te has convertido en una gran amiga para mí y la realidad es así de dura, solo te digo las cosas como son, o al menos como las veo.
-Pues si tan amiga soy para ti deberías apoyarme.
-Y lo hago, pero yo creo que de verdad lo mejor es que no insistas, en que empieces a olvidarlo y centrarte en ti misma.
Lo único que se oía en ese momento eran mis sollozos.
Justin me quitó la manta, hizo que me sentara y me abrazó con fuerza.
-Solo quiero lo mejor para ti, créeme.
-Lo sé, y lo siento por ponerme así.-Le miré a los ojos.-Pero es que ya no sé que pensar, no sé si preocuparme por si le ha pasado algo, enfadarme porque no me dice nada o que...
-¿Sabes que tienes que hacer? Salir de la cama, darte una buena ducha, relajarte y nos vamos a donde tú quieras, al cine, a dar un paseo, a por un helado o lo que sea. Vive el presente sin preocuparte, tarde o temprano vamos a saber qué ha pasado, hasta entonces disfruta con nosotros, tus seres queridos.
-No tengo ganas de nada...
-Ya lo sé, pero ya verás como cuando salgas a la calle después de tanto tiempo te vas a sentir algo mejor.
Resoplé y terminé haciéndole caso.
(***)
-Oye cielo.-Me susurró Paola-¿esa no es Rose la madre de Maverick?-Señaló con la mirada a una señora.
-Sí, y parece que viene hacia aquí, parece nerviosa.
Cinco segundos después Rose me miró enfadada.
-¿Dónde está Maverick? ¿Está contigo verdad?-Parecía sofocada-¡MAVERICK COMO NO SALGAS DE TU ESCONDITE TE JURO QUE...!
-Señora, se equivoca, su hijo no está aquí.-La interrumpí.
-Llevamos dos semanas sin saber de él.-Continuó mi amiga.
-¡NO ME MINTÁIS, SÉ LO QUE INTENTÁIS HACER PERO NO OS VAIS A SALIR CON LA VUESTRA!-Si estuviésemos en unos dibujos animados su cara aparecería roja y le saldría humo por la nariz.
-¿De qué estás hablando?
Su expresión cambió, ya no estaba enfadada sino preocupada, parecía que me creía.
-¿Seguro que no sabéis nada de él desde entonces? ¡Lo último que sé es que se fue de casa hace tres semanas!-Hizo una breve pausa.-Espera, ¿cuándo fue la última vez que lo viste?
-Ya te lo hemos dicho, hace dos semanas.-Dijo un poco histérica Paola.
-¿Dos? Imposible si...se fue de aquí hace 3.
-Vino a verme al hospital, estuve en coma.-La expliqué.-Y cuando me dieron el alta continuaba aquí, pero a partir de por la noche no supe nada de él, ni llamadas, ni mensajes, ni encuentros.
Las 3 comenzamos a preocuparnos, no sabíamos que hacer y permanecimos en silencio pensando en mil situaciones que podrían haber sucedido.
-¡Ya estamos!-Aparecieron Justin y Ángela sonriendo, pero al ver a Rose y nuestras caras se preocuparon-¿qué sucede?
Les explicamos la situación y ellos en seguida pensaron que la mejor solución era recurrir a la policía, pero teníamos miedo y decidimos esperar un poco más.
Todos intentamos localizarlo desde el móvil, pero a ninguno nos respondía las llamadas.
-No quería hacerlo pero creo que lo mejor es que la policía nos ayude, ellos tendrán más idea.

ESTÁS LEYENDO
Mi Mejor Error
Teen Fiction¿Habéis sentido alguna vez un flechazo?¿Os ha pasado que caminando os habéis fijado en una persona y os habéis"enamorado" a primera vista?Pero,casi siempre es de una persona que sabes que nunca vas a volver a ver. Eso justamente le pasó a esta unive...