Lo que pienso y lo que siento

Capítulo 28

- Te seré sincera, y pues la verdad es que te veo como amigo, porque eso es lo que siempre hemos sido, y ___ es mi mejor amiga, la quiero ayudar, por eso le dije para que venga a decirte la verdad; ella te ama, estuvo pendiente de ti cada día que estuviste sin despertar, dale una oportunidad Harry, no te arrepentiras.

- Me cuesta Estefany, me cuesta; pero aún así lo haré, hablaré con ___ Payne ahora mismo.

- Siento que todo esto haya ocurrido y no hice nada para pararlo.

- Tú no tienes la culpa de nada.

No creo que ___ ya se halla ido, posiblemente esté afuera con Louis esperando a Estefany. Camine hasta llegar a la puerta, gire el pestillo y vaya como la esperaban.

- Excelente - dije - la chica que vino por mí - la miré - a contarmelo todo, que estaba conmigo y cuando vengo a tratar de recuperar lo perdido ... sorpresa la que me encuentro.

Casi lo grite. Estaba frustrado, y mucho; es una gran actriz, me ha mentido.

No me esperé encontrarlos besándose, y al ver aquella escena algo sentí. Los observaba desde el marco de mi puerta, ellos seguían agarrados de las manos, mirando al suelo, escuché unos pasos detrás mío, era Estefany.

- ¿Qué pasa aquí? - me pregunta.

- He cambiado de opinión - le dije - no tengo nada que hablar con ___.

Y mientras decía eso, ella miraba a Louis, con mucha rabia e impotencia, sus ojos se aguaron; ¿Acaso Estefany sentía algo por él? Parecía que sí.

- Con permiso Harry.

Dio unos pasos hacia ___, la miró con desprecio y finalmente se marchó.

- Harry, escuch...

- No ___, no - la interrumpí - no tienes nada que decirme, está todo claro.

Ella no dijo otra palabra y se marchó, detrás suyo iba Louis, gritando que le esperara. Entré a mi casa y di un fuerte portazo, no tenía con quien hablar sobre el tema, me sentía más confundido que nunca. Esperaría a Gemma, ojalá no demore demasiado.

___

Soy una idiota. Sí, lo jodi todo.

No fui consciente de lo que hice. Me dejé llevar; en ese momento estaba destrozada y vino Louis, comenzó a hablar conmigo, me consolo. Extrañaba eso, cuando él estaba junto a mí, abrazándome y diciendo que todo iba a estar bien, fue por eso que no me resisti a besarlo.

Caminaba sin rumbo alguno. Las lágrimas me salían seguidas y no podía pararlas; sólo pensaba en lo mal que actué, no debí hacerlo, no debí.

No tenía ganas de ir a casa en estos momentos, y peor sería encontrarme con mi hermano, pues desde la última vez que nos peleamos no hemos vuelto a hablarnos, mi madre lo notó y ha hablado con él; sin embargo, no le da ganas de hacer las paces con su hermana y prefiere a la mierda de su novia.

Iba tan despistada que no me percate que una persona venía en mi misma dirección, nos dimos un leve golpe, mientras me disculpaba de lo torpe que soy.

- Lo siento, en verdad.

- No te preocupes, yo también tuve la culpa - me dice - ¿Cuál es tu nombre?

Tenía la cabeza agachada, no quería que me vea los ojos rojos e hinchados que llevaba.

- ___, ¿tú?

- Fernanda - sentí su mirada en mí - Hey ... ¿estás bien?

No me atrevía a mirarla. ¿Por qué le interesaba si estaba bien? Al fin y al cabo, seguro quería ser una persona amable.

- No, no lo estoy - levanté mi mirada hacia ella, parecía de mi edad - ¿Por qué me lo preguntas?

- Sólo quería ayudarte, ¿puedo? - me dedica una gran sonrisa.

- Gracias.

- No hay de qué, te parece sí vamos a un lugar más cómodo.

- Claro, pero llevame tú, porque no conozco este lugar.

Se ríe mientras mueve la cabeza de un lado a otro; ella me contagia la alegría por lo que yo también río. Seguíamos caminando hasta que llegamos a un pequeño parque, en donde habían muchas bancas alrededor.

- Ven, sentemonos - le hago caso y me siento al lado suyo - Adelante, puedes confiar en mí.

Confíe en ella, se lo conté absolutamente todo, me desahoge muchas veces; había hecho una nueva amiga, no me había pasado lo mismo con otras personas, pero con ella fue especial.

Me la pasé algo de dos horas, me entendía perfectamente con ella, la sentía como una hermana, la que nunca tuve, con eso no quiero menospreciar a mi mejor amiga, aunque no sabía si después de lo ocurrido volveriamos a serlo.

- Lamento la situación en la que estás, no es nada fácil, pero no te preocupes te ayudare.

- Gracias, encerio muchas gracias, no me imaginé encontrar a una persona como tú.

La abraze muy fuerte, había resultado ser una gran persona. Se me pasó por la cabeza invitarla a casa, así la conoceria mejor.

- ¿Estás libre mañana? - le pregunto, se pone pensativa y asiente - Que te parece si vienes a mi casa para charlar un rato.

- Encantada, ¿me darias tú número?

Tenía que llegar lo más pronto posible a casa, si no mi madre comenzaría a preocuparse, me despedí de ella y quedamos en que iría mañana a mi casa. Después de todo éste día me resultó para hacer una nueva amiga, de las pocas que tenía.

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Nuevo personaje *-*

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Un abrazo, las quiero<3