La tentación del diablo

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-No-. Dijo presionando fuertemente sus dientes-. ¡No!-. Se dio vuelta y le dio un golpe en la barbilla a Jack.

-¡Agh!-. Este se encontraba elevado en el cielo tras recibir el golpe.

Jeremías no dejo caer a Jack, le empezó a pegar mientras él se mantenía en el aire, alrededor solo se podía escuchar los diminutos quejidos de Jack, estaba siendo golpeado muy fuerte en el abdomen y en el rostro, sentía como los nudillos de los guantes se le clavaban en la piel. Jeremías dejo de golpear, dejando caer el moribundo cuerpo de Jack, este vio sus nudillos que estaban con sangre de su propio hermano.

-Ya acabé contigo-. Se dio media vuelto para retirarse.

-Ja...Jajaja-. Se levanto a pesar de que estaba sangrando-. ¡Jajajaja!-. Soltó una fuerte carcajada y al a vez desplegó una fuerte presión demoníaca, Amon había tomado el control.

Salía vapor de las heridas de Jack, repentinamente se encontraban curadas, era la regeneración de Amon, Jack dejo de sangrar y materializo su escudo y espada, este solo miraba a Jeremías con una macabra sonrisa.

Jeremías estaba sorprendido al ver el increíble poder del demonio, no podía moverse estaba paralizado, el ojo derecho de Jack estaba de color rojo, en tan solo un parpadeo Jack se encontraba detrás de su hermano.

-Eres débil-. Pego con el escudo en la cara de Jeremías, al recibir el golpe salió disparado, Jack se teletransporto debajo de él y le dio una patada hacia arriba, cuando Jeremías se encontraba cayendo al suelo, Jack se teletransporto nuevamente, pero esta vez arriba de Jeremías, lo pateo hacia abajo haciéndolo caer con más fuerza.

-Maldito fenómeno-. Se levanto del suelo, estaba mal herido, elevo la mirada y se dio cuenta de que Jack se encontraba volando-. Esto lo decidirá todo-. Cargo una fuerte presión espiritual, tanto que hizo que se creara un puño gigante, formado por su presión espiritual.

-Bien, que así sea-. Jack levanto su espada y cargo una fuerte presión demoníaca, una especie de fuego de color negro envolvía su arma, era demasiado grande el tamaño de las llamas.

Jeremías salto hacia Jack y Jack bajo hacia él, ambos iban a gran velocidad para dar a cada uno con su ataque, a punto de que llegaran el mentor Samuel, le tiro una patada en la cara a Jack, que lo dejo tirado en el suelo, lo dejo noqueado, la anciana Gemima dio un puñetazo en la cara de Jeremías, haciéndolo caer al suelo, pero este no lo dejo noqueado. Habían evitado que se mataran entre sí.

-Jeremías, ven conmigo. Sami, llévate a Jack a una sala-. Ordeno a su hermano.

Se llevo a Jeremías a la oficina de los pastores, el mentor Samuel se llevó a Jack a una de las salas, los hermanos de la iglesia vieron que Jeremías entro con una furiosa mirada y vieron como el mentor Samuel traía a Jack en brazos, Sacmis y Bianca fueron a la sala de Jack para que le explicara que ocurrió.

-Jeremías, ¿Por qué estabas peleando con tu hermano? -. Le pregunto frunciendo el ceño.

-Es un tema personal-. Volteo la mirada hacia otro lado.

-Un tema personal con el simple hecho de que no aceptas que se volvió más fuerte que tu-. Le saco en cara lo que estaba ocultando Jeremías-. En vez de dejarte llevar por la envidia pudiste estar entrenando, tratando de superarlo de otra manera-. Regaño a su discípulo.

-De todas formas, hubiera sido en vano, Jack tiene el poder de un demonio y no es cualquier demonio-. Miro fijamente a la anciana.

-Es verdad, pero estoy preparando la liberación para que le quitemos al demonio que lleva en su interior-. No le quitaba la mirada de encima-. Por haber actuado de esta manera, te bajare del entrenamiento, no podrás venir a entrenar.

EquilibrioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora