~ Las horas se hicieron segundos mientras caminaba junto a ti, no era la primera vez que te veía; tampoco fue la última, pero siempre reaccionaba de la misma manera. Eres especial, no cabe duda de eso, pero porque ocurría cada vez que te veía?...
Fuimos a casa para descansar un poco, eran horas de solo estar caminando y el sol estaba fuerte; te note deshidratada y con ansias de refrescarte.
Tomaste con tus dos manos la parte baja de tu blusa y sin más la subiste, te desprendiste de ella como si nada importase. Con un poco de nervios disimule mirar a otro lado, evadiendo tu belleza que penetraba mis ojos, pero en un vistazo de reojo divisaste mi mirada y reíste haciendo salir de tu boca de la manera más dulce y tierna la palabra 'tonto'. No pude resistirme y te mire, mire cada detalle de ti, tus imperfecciones me estaban controlando hasta el punto en que deseaba detallarte porque cada centímetro de tu cuerpo no me dejaba de parecer sexy.
Usabas un bralette muy bonito era negro con transparencias, (veo que recordaste que me gustan mucho y que me matan las chicas que lo usan) pude notar como ligeramente se veía la areola de tus pechos (bueno es lo que mi mente asimilaba, creo que esa prenda solo jugaba con mis fantasías) y por lo más tu pezón parado queriendo destacar. Yo ya me estaba poniendo nervioso y sentía como mis labios se resecaban; por lo que empecé a delinearlos con la lengua con mucho tacto para humedecerlos (mi mente jugaba conmigo, me hacía pensar en solo saborearlos).
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Podía ver en tu rostro... como tus gotas de sudor brillaban como perlas
FantasyBasado en un hecho real alternativo con una chica que me gusto, pero que de la nada nació un deseo sobre los cuerpos de cada uno y nuestras almas desgarran nuestros pechos para conectarse mediante el sexo.
