II. Tarde pero seguro

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Tomoyo caminaba apresuradamente por los pasillos del instituto, la amatista sentían su corazón latir a mil por hora y juraba que sus mejillas estaban de un tono rojo intenso. Su mirada recorría rápidamente el lugar, había algo en  específico que buscaba. Mejor dicho, alguien.

-¡Tomoyo!- gritó una voz que hizo que su corazón dejará de palpitar por un segundo. -¡Te he estado buscando por todo el lugar!. La profesora del coro me dijo que habías salido de clase hacía tan solo unos minutos.

-Lan...me tomaste por sorpresa. No sabía que me buscabas…- trataba de decir recuperando su usual calma pero el joven ante ella le causaba de todo menos tranquilidad.- ¿Me buscabas por un motivo en particular? - preguntó.

-Yo…pues...si...en realidad me preguntaba si querías que te acompañará  a tu casa - contestó con su típica sonrisa.

“¿Cómo le digo que no con esa sonrisa?” pensó  mientras le dedicaba el mismo gesto al chico.

Mientras iban caminando, ambos jóvenes conversaban de temas triviales como de sus clases, profesores o vida cotidiana. En un momento de silencio, la amatista le dedicó una mirada furtiva a su acompañante. Lan era un muchacho alto, delgado de cabello azul y ojos negros. El chico  tenía una terrible tendencia  a coquetear pero como era apuesto, las jovencitas respondían gustosas ante la atención.

Tomoyo  seguía preguntándose  cómo y cuándo llegaron estos sentimientos a su vida si hacía tan solo un año eran solamente los mejores amigos,  pero en eso se percató que Lan también la estaba observando. Desvío la mirada rápidamente y trató de ocultar su muy obvio sonrojo.

-Si no te conociera diría que estás enamorada - dijo mientras Tomoyo sentía que el alma se le caía a los pies. Trató de refutar pero el chico continuó. -…estos días has estado muy callada…¿pasa algo malo?-

-Cómo se te ocurre...yo...estoy bien Lan...no...no...me pasa nada-

-Tomoyo…-

La chica giró con sorpresa para encontrarse con la mirada del chico fija en su rostro. Lan la había tomado de la mano y se había acercado hasta estar a unos cuantos centímetros del rostro de la chica.

-Tomoyo...eres...no….sabes que eres una de las personas más importantes para mí...no me puedes mentir…¿Acaso hay alguien que te está haciendo sufrir?-

“Tú,  idiota al no darte cuenta de que estoy enamorada de ti”

-No...nadie me molesta o me hace sufrir…-respondió quedamente.

El chico la siguió  mirando fijamente mientras sostenía la mano de la chica.- Si no te están molestando...acaso...quizás…¿estás enamorada?-

-Lan que cosas dices...es la segunda vez que mencionas eso…¿Enamorada yo? En lo absoluto..además sabes muy bien que ningún chico se animaría a invitarme a salir...gracias a la tonta de Izumi  que me declaró como la “muñeca de porcelana inalcanzable”- dijo mientras hacía una seña de comillas con su mano.

-Si bien odio que te moleste...debo admitir que una parte de mi se siente aliviado al saber que los chicos tienen miedo de invitarte a salir-

-¿Puedo preguntar por qué? - cuestionó dejando de lado su nerviosismo y dando paso a la molestia.

-Tomoyo...no me digas que eres tan despistada...la respuesta es sencilla...no podría vivir sabiendo  que otro tiene tú atención - dijo mientras se acercaba más al rostro de la chica.

El corazón de Tomoyo latía a mil por hora. La chica no sabía qué decir o pensar de la actitud repentina del chico, pero antes de que pudiera replicar el sonido de su celular los interrumpió.

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Los días pasaron desde aquella conversación con el peliazul. Al día siguiente,  Lan había estado un poco más callado de lo usual pero poco a poco regresó a su alegre y coqueto ser. Tomoyo por su parte no sabía qué decir o pensar ante ese momento pero tenía una pequeña esperanza de que ella no le fuera tan indiferente al joven.

Decidida a probar su nueva teoría, empezó a tratar de ser más amigable con sus compañeros. No coqueteaba pero les saludaba con una gran sonrisa o les hacía conversación lo cual dejaba a sus compañeros embobados.

Lan por su parte había notado lo amistosa que estaba su amiga con sus compañeros  pero trataba de no dejar que su molestia fuera obvia.
“Al fin y al cabo eres un cobarde Lan...esa conversación era el momento perfecto para decirle lo que siento...pero...tenía que dudar…” pensaba amargamente mientras veía como  la joven  saludaba amablemente al presidente de la clase.

Una vez que el presidente  se marchó,  Lan se acercó, aprovechando que habían quedado solos en el salón,   hasta que sus labios quedaron a milímetros del oído de la chica.

-Parece que el presidente quiere ser más que un amigo…- murmuró

Tomoyo sentía como su corazón latía con más fuerza, el cálido aliento de Lan le hacía cosquillas con cada palabra que pronunciaba. Dudando de su autocontrol, ya que sentía que podía besarle en ese mismo momento,  se apartó  lentamente y le dedicó una de sus típicas sonrisas.

-El presidente es un joven muy amable...no me molestaría considerarlo como algo más que un amigo- contestó pero dentro de ella se regocijaba al ver como Lan fruncía  el ceño y murmuraba  unas palabras de descontento.

-Lan…-

-Dime-

-Acaso…¿estás celoso?-

El joven sólo se limitó a observar  a la joven mientras volvía a acortar la distancia entre ellos. -Tomoyo...yo…¿Estaría mal si te digo que solo quiero besarte en este momento? - murmuró ya a centímetros de los labios de la joven

-Me parece mal que tardarás tanto en preguntarlo- respondió la amatista mientras empezaba a  besar al peliazul.

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N/A:

Volvimos con otro one shot loco  xD  esta vez dejando que uno de nuestros ships locos vean la luz  xD 

Espero disfrutarán  de esta loquera de ship  7u7  que ya más adelante dejaremos que vean otros de nuestros ships locos jejeje.

Para los nuev@s lectores,  Lan  es uno de nuestros OCs  de Los poderes de la oscuridad :)

¡Todo es Culpa de Clow! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora