Hurts Like Hell [TomTord]

Capítulo 1

Sentado en el marco de mi ventana, con una pierna fuera y otra dentro de la casa, bebí el último trago de la botella.

Suspiro pesadamente, dejo la botella en el suelo y vuelvo mi cabeza nuevamente hacia las vistas de la ciudad. Recordaba una y otra vez las locuras que hice, y pienso en como pude ser tan estúpido.

Perdí todo en segundos. Mi trabajo, mis amigos, y la oportunidad de ser amado por la persona más importante en mi vida. No puedo caer más bajo, porque e tocado fondo.

Y sin embargo, aún queriendo poner la boca de fuego en mi cabeza, no lo hice. Puede sonar estúpido para alguien que ha perdido todo, incluso un ojo y un brazo, pero aún queda esperanza en mí. Aún sueño todos los días, sueño que me perdona, que regreso en el tiempo y que detengo aquella locura. Sueño que aún no arruine mi vida por una meta difícil de conseguir.

Pero sueños son y sueño serán.

Tengo miedo de decir lo que pienso, tengo miedo de acercarme a ellos.
¿Qué pensarían de mí después de todo eso?

Toda la fuerza que tenía, esa voluntad de fuego y la determinación que alimentaba a mi alma...
Desapareció.
Se esfumó.

Cuando Tom atravesó el robot gigante con su arpón, también destruyó mi ser. Y entonces me di cuenta de lo que estaba haciendo, estaba cometiendo el mayor error en mi vida.

Ahora vivo en una casa de alquiler, en la cual debo mucho dinero.
Ahora estoy sin trabajo, yo no soy más "el líder", mis heridas no me lo permite.
Ya no soy el de antes, me volví un bastardo sin dinero y sin algún tipo de calor humano.

Completamente solo.
Completamente abandonado.

Pero después de todo, puedo afrontar esas cosas perfectamente.

El pensamiento que hace que acorten mis días lenta y dolorosamente es saber que nunca más veré a Tom. Saber que perdí todo oportunidad con él, y darme cuenta de lo profundamente enamorado que estaba cuando cometía mi pecado más temible.

Son días oscuros para mi.

Odio la oscuridad.

Me levanto del marco de la ventana y la cierro, el día acabó.
Despido a la noche dando zancadas hasta mi cama, me meto en ella y me arropo.

Otra noche sería.
Otra noche soñaría.

Buenas noches querido mundo, espero que hoy no muestres piedad y termines mi vida al dormir.