Abrí lentamente la puerta de la habitación en donde estaba ella. Fue cuando mi corazón se detuvo al instante. Su cuerpo estaba conectado a esos horribles cables, la pequeña mesa en donde ella comía esta a su lado, aún tenía pequeños moretones ya casi no visibles, sus ojos estaban mirando directamente hacia la ventana mirando parte de la ciudad, aún se veía increíblemente hermosa.
Su mirada fue volteada hacia la mía, las cuales chocaron inesperadamente. Sus ojos comenzaron a cristalizarse mientras que me miraba con dolor, cerré la puerta detrás de mí y me acerqué a ella con rapidez ateyéndola a mis brazos recibiendo un abrazo fuerte. Sus sollozos salían por encima de mi hombro mientras que sus brazos rodeaban mi cuello, los míos abrazaban ligeramente su cintura completa mientras que mi mandíbula se escondía entre su cabello oliendo su dulce aroma permanente.
Suponía que sus ojos estaban completamente cerrados tratando de tranquilizarse, pero no funcionaba, sus sollozos aún no se detenían y eso no me cansaba, al contrario, ella tenía que sacar todo lo que sufrió en aquella casa.
-Ya bebé, tranquila mi amor, ya estoy aquí.-comencé a acariciarle el cabello con suavidad tratando de tranquilizarla, sus sollozos iban disminuyendo poco a poco.-
-No puedo Harry. Quiero sacarme este dolor que estoy sufriendo en este momento.-su voz estaba quebrada al igual que su alma. Joder, jamás la había visto de esa manera ni mucho menos llorar así, ella jamás había llorado desde que murió su mejor amigo, Luke...hasta ahora.-
-Sí cariño, saca todo lo que aquel idiota te hizo, saca el dolor y sufrimiento. Pero no por mucho...Bebé, me rompe el alma al verte de esta manera.-mi voz comenzaba a tornarse más dolorosa y con dificultad de hablar. Iba a soltar en lágrimas si no se detenía, en realidad me rompía en dos al verla así, tan necesitada y dolorosa.-
-Lo sé Harry, pero no puedo evitarlo.-aún sollozaba, pero aquellos sollozos se iban disminuyendo de acuerdo al silencio que comenzaba a inundar el cuarto. Su respiración comenzaba a entrecortarse por la fuerza que hacía al tratar de controlar sus sollozos, mis brazos aún la rodeaban consiguiendo consolación. Sentí como sus brazos se iban deslizando por mis hombros separándose un poco.
Su nariz estaba roja al igual que sus ojos entre unas ojeras tristes, su rostro reflejaba dolor y un vacío dentro de ella. Aquellos ojos marrones claros estaban sin alma, sin alguna alegría en ella, lo único que mostraba era un pequeño brillo sintillante al verme, lo cuál hizo hacerme feliz....muy poco.
-¿Tienes hambre?-pregunté sentándome a su lado, ésta me abrazo por la cintura colocando su cabeza en mi cuello, suspiró y negó.-
-No, ya comí. Solo te necesito a ti y a tu amor.-murmuró cerrando los ojos por un momento disfrutando aquel tiempo que estabamos presentes. Esto era difícil de ver, ella estaba sin alguna emoción en su cuerpo, al menos de que tiene salud. Pero no, no por mi puta culpa. Aún no podría perdonarme por lo que ocasioné.-
-Me siento tan mal al verte así...Lo siento.-susurré acostándome un poco recargando parte de mi cabeza con la suya ocultándome en su cabello de nuevo, mis brazos la abrazaron, aunque de lado, toda su cintura, ella comenzó a acariciar mi cabello aún con los ojos cerrados sintiendo su respiración chocar con mi frente moviendo un poco mis rizos.-
-Te amo.-susurró, yo cerré los ojos aún más.-
-Yo te amo más.-le devolví el susurro acomodándome en su cuello aún abrazándola, ella se acomodó en mi cabeza colocando su mano en mi brazo acariciándolo con suavidad. Al menos estábamos juntos, sin nadie con quien nos moleste o nos interrumpía.
De nuevo estábamos en nuestro mundo.
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Nos vemos mañana!! Voten y comenten si les gustó estos capítulos!! Bye!! xxx
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Ruthless
Teen FictionLa historia se basa en dos jóvenes que convierten su vida en algo...complicado. Personajes intentan separar aquel amor, pero su relación es tan intensa que es inseparable. Por momentos complicados ellos siguen su camino de amor juntos. Y a pesar de...