Aventuras con Nash Grier.

4. TAL VEZ... ¿ESTO?

MARTES 🎈FIESTA🎈

Nos devolvimos a la casa de las chicas. Ya eran las 4:50 am. Ahí mismo en la sala de cine pusimos unos colchones y nos acostamos a dormir.

*

Eran las 10:20 am. Me desperté, subí a la cocina, ya que olía a huevos tostados con tocino.

-Hola -saludé a Peyton.

-¿cómo dormiste? -me preguntó.

-Bien gracias ¿y tu?

-Bien. Bien hasta que empezaste a hablar -rió.

-¿De veras? -pregunté avergonzada -ay, perdón.

-Jajaja no te preocupes, a todos nos pasa. En especial a mi. -las dos reímos. -¿quieres? Huevo y tocino...

-No estoy bien. -respondí -comeré leche y cereales.

-Esta bien.

Pasamos alrededor de media hora desayunando y conversando. Las demás chicas subieron a desayunar con nosotras. Fuimos a la pieza de Mandy, nos duchamos y nos vestimos.

Kiki me prestó una blusa azul y unos shorts blancos con unos tacones negros me maquillé y me deje el pelo suelto lizo con unos pequeños rulos en las puntas. Agradezco que todas las mañanas baño mi cuerpo en mi perfume de algodón de azúcar, es tanto lo que me echo que aún huelo así.

-Me alegro de no haber tenido clases hoy. -dije.

-Si. ¿Quien iría? -dijo Mandy.

-Nadie -dije y todas rieron.

-¿Hoy uno elegía si ir verdad? -preguntó Peyton.

-Si -respondió Kiki -No entiendo porque hacen estos días.

-Yo tampoco -dije -¿quieren ir a mi casa? La quiero conocer bien.

-Claro. -dijeron unísono.

Entramos a mi casa, saludé a mi papá y hermana. Subimos a ver mi pieza, estaba lista. Mi papá contrato a un diseñador para la casa, entonces no se demoró nada en decorar y hacer las piezas. La casa es verdaderamente enorme, de hecho, más grande que la de las chicas y eso es casi imposible. Todas estábamos boquiabierta. La casa tiene un subterráneo donde hay un gimnasio, una sala de cine, un bar y una sala de juegos. En el primer piso hay dos piezas, una para mi papá y otra que es su oficina. Esta la cocina, el living, una sala de estar con televisión y salida al patio. Por último en el segundo piso esta mi pieza, enorme, que tiene una sala de estar muy grande. Esta también la pieza de Jess, es muy grande, también con una sala de estar. Cada pieza tiene su baño enorme con sauna y un walking closet atrás. Queda la pieza de invitados de el mismo porte que mi pieza. En el patio está la piscina con un bar al medio, una terraza enorme y al fondo del patio hay una zona fiestera.

-¡Esta casa es enorme! -exclamó Kiki.

-¿te parece hacer una fiesta de bienvenida en la noche? -preguntó Mandy.

-Me encantaría pero no conozco a mucha gente aquí. -dije.

-Nosotras a todo el colegio. Podemos avisar y vendrán -dijo Peyton.

-Avisa entonces...¡PORQUÉ HAY FIESTA ESTA NOCHE! -grité

-¿Harán una fiesta? -interrumpió mi papá.

-Sí. ¿Puedo?

-Claro, pero más te vale que venga harta gente -rió papá.

-Gracias.

Mi papá se fue y las chicas comenzaron a avisar que había fiesta. Mandy trajo su nueva colección de vestidos fiesteros para prestarnos y pasaban las horas. Me puse un peto negro con una falda mini ajustada plateada y un collar de diamantes, deje mi pelo suelto lizo y me maquillé, pinté mis labios rojos, delineé mis ojos, use un poco de sombra, puse rímel en mis pestañas y me eché base, nunca olvidó mi delicioso perfume de algodón de azúcar. Preparamos todo, la comida, la música, las luces, las bebidas y a nosotras.