Steve no sabe por qué, pero las cosas entre Tony y él ya no son como antes.
No es nada particular, o significativo para el caso, pero al verlo llegar al café cada mañana ya no se siente tan incómodo... Se siente, en verdad, bastante a gusto.De cualquier forma, si lo piensa objetivamente, tiene sentido que así sea. Anthony es un hombre bien parecido, agradable a pesar de su distintiva petulancia, y muy ocurrente...
—... Y saber que un hombre así tiene interés en uno, a cualquiera lo haría sentir halagado, ¿cierto? No significa nada... —Steve se repite a si mismo en un quedo murmullo, mientras repasa el mostrador de la cafetería con más ímpetu que el necesario.
A su lado, Sam arquea sus cejas y se le acerca, extrañado.
—¿Me hablaste...?
—¿Qué? Oh, no, no... Sólo estaba cantando. —Steve se disculpa con una sonrisa nerviosa. Su amigo asiente, suspicaz.
—Veo que Míster Dinero te tiene contra las cuerdas, ¿eh...? —Lo provoca. Las orejas del rubio se tornan inmediatamente rojas, pero su expresión se endurece.
—¿Por qué, según tú, todo lo que pienso últimamente tiene que tener algo que ver con él?
Sam lanza una pequeña risotada llena de ironía.
—¡Niégame que así sea! —Exclama divertido.
Steve sólo decide ignorarlo, poniendo los ojos en blanco mientras vuelve a sus tareas. Pero, se admite con un suspiro, aunque le pese sí es cierto que pasa más tiempo del que le resulta cómodo pensando en Tony... Especialmente cuando está en el trabajo. El excéntrico empresario ya es casi parte del paisaje allí.
Lo cual le hace notar, sorprendido, que ya es el mediodía y Tony aún no ha aparecido. Algo muy poco digno de él...
Para su desgracia, Sam nota exactamente lo mismo:
—Oye, hablando de eso... —Le dice mientras pone a andar una cafetera —Tiene que ser la primera vez en meses que no viene a acosarte, ¿cierto? ¿Le habrá pasado algo?
Steve se encoge de hombros y procura disimular su propia intriga con una pizca de humor.
—No tengo idea, pero te importa tanto que comienzo a pensar que te interesa incluso más que a mi, Sam. Si quieres los presento...
El otro ríe entre dientes, sarcástico, y justo cuando Steve cree que ganó la batalla verbal, le contesta:
—¿Presentarnos? ¿Ahora que por fin admitiste que te interesa? ¡Ni por todo el oro del mundo!
Y con un guiño malicioso de ojos se retira rumbo al mostrador, dejando a Steve a solas con su derrota, y ruborizado de pies a cabeza.
El resto del día pasa lento y cansador como siempre, pero de Tony ni noticias. Steve comienza a preguntarse a qué se deberá el cambio, pero enseguida se reprende a si mismo por perder el tiempo con ello: No es su problema lo que sea que haga Tony con su tiempo. Él sólo es su barista, no su amigo.
De pronto, esa idea lo sorprende gratamente: Su amigo. ¿Por qué no lo pensó antes?
Sabe bien que Anthony no lo ve como tal, pues se lo dejó bastante claro; pero ser su amigo le permitiría disfrutar libremente de la agradable personalidad del empresario sin sentir culpa por estar dando alas a sus sentimientos (si así puede llamarlos). ¡Es una genial idea!
Animado por aquella perspectiva, el joven continua atendiendo hasta que anochece y es su hora de irse. Entonces, tras dejar todo en orden para quien lo reemplace en el siguiente turno, se quita su delantal, toma sus cosas y busca a Sam para despedirse, pero de pronto una voz conocida lo llama con prisa, y él se detiene.
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Tres (no) son multitud - Stuckony AU
FanfictionSteve se verá obligado a elegir entre Bucky y Tony... Aunque tal vez no deba elegir en absoluto. ♡♡♡ ⬇ADVERTENCIAS⬇ ?Poliamor. (Bucky X Steve X Tony) ?Contenido sexual explícito. ?Actualizaciones lentas pero seguras. ?Capítulos largos. ?Universo alt...