CAPÍTULO 12

618 28 3
                                    

POV April
Aunque tenga los ojos cerrados la luz consigue sosegarme, abro los ojos por fin y lo que veo me deja un poco parada. Blake está despierto, rodeándome con los brazos como si fuera un oso de peluche.
-Buenos días, acosador.-Le digo con una sonrisa mientras me quito las legañas.
-Buenos días, matona.-Dice lanzándome una sonrisa pícara.-¿Qué tal has dormido?.
-Pues he dormido fenomenal, si no fuera por como me aplastaste, parecía que intentaban matarme.¿Y tú?
-Yo bien, si no fueran por tus hermosos ronquidos, me daban ganas de asfixiarte con la almohada para que te callases de una puta vez.-Dice sonriendome y besándome la frente.-Qué te apetece desayunar?
-Pues...Tengo ganas de comerme unos panqueques.-Digo con voz chillona e infantil.
-Vale, pues hagamos unos panqueques.
-Quieres cambiarte primero de ropa, te presto?
-Si por favor.-digo mientras que el va al armario y saca una camiseta blanca gigante, que más bien parece un vestido y unos boxers. Me los pongo delante suyo, y se que no puede parar de mirarme
-Pues...vamos hacernos los panqueques.-dice levantándose a su vez cogiendome por los hombros como si no tuviera piernas.
-Blake, tengo piernas.-Digo yo quejándome encima de su hombro.
-También tienes cerebro pero no lo usas, cariño.-Dice en tono bromista, empiezo a cogerle de los pelos en broma. Cuando estamos en la cocina me sube a la encimera. Blake comienza a sacar los ingredientes de los armarios, leche, huevos y harina, cuando vi la última cosa pensé en gastarle una broma. Cojo la harina y se la hecho por todo el cuerpo, él se queda quieto procesandolo todo, unos segundos después empieza a perseguirme por toda la cocina hasta que me atrapa, me echa la harina encima y añade dos huevos y leche. Joder, ahora mismo parezco una masa de panqueques andante, entonces intentó quitarle los huevos pero se resiste, nos tropezamos y nos caemos, yo encima de él. Miro por undécima vez sus ojos color oro y el hace lo mismo pero con más intensidad, quiero besar esos labios carnosos que me matan poco a poco, no pienso más y me lanzo, él sigue. Este beso es diferente, no es lento y romántico sino es rápido, con deseo y excitación, mucha excitación, le dejo paso para que su lengua se adentre, se siente tan jodidamente bien, nos levantamos y nuestro besos aumentan de velocidad, sus manos bajan de mi cintura a mi culo, me lo empieza a manosear descaradamente pero no me importa, nada me importa más ahora mismo. Salto y rodeo mis pies a su cintura, me coje y se dirige hacía su habitación hasta que escuchamos un ruido, nos giramos y enseguida me baja, veo a una mujer rubia con ojos verdes, esbelta, parece que tenga veinticinco años pero seguramente será su madre.
-¿Mamá...No venías el lunes que viene?.-Dice rojo y nervioso. Está muy mono así, aunque no sea el caso.
-Sí, pero me han dejado irme antes, ya que he acabado el trabajo antes de tiempo.-Dice mirándome con una sonrisa.-¡Hola!, me llamo Margaret, pero puedes llamarme Margie, soy la madre de Blake. -Cuando voy hacia allá para darle dos besos por educación me doy cuenta de lo horrorosa que estoy ahora mismo, parezco una momia de lo blanca que estoy por la harina. Maldito Blake.
-Hola, Me llamo April encantada de conocerla...-No me dió tiempo de contestar ya que Blake me coje a rastras hacia la habitación, mientras diciendo.-Mamá, April y yo nos vamos a duchar, estamos hechos unas porquerías. -¿Como que a duchar?¿Los dos...juntos?. Pasamos por su habitación yendo a su baño, cuando entramos cierra la puerta con pestillo. ¿Qué coño está pasando aquí?.
-Te quitas la ropa o qué..?.-Dice lo más normal del mundo.
-No pienso ducharme contigo que lo sepas.-Digo yo mirándole seriamente, pero cuando hace pucheros me derrite el corazón y le doy una sonrisa.
-¿Porqué, April,? un chico tiene sus necesidades, y mis necesidades son verte desnuda con ese hermoso cuerpo, no tienes porqué avergonzarte.-Dice mientras empieza a besarme el cuello, del cuello al óvulo de la oreja, cosa que me encanta, entonces dice susurrando.
-Sé que me deseas, y yo te deseo con locura, quiero que ya seas mía, solo mía.-Dice mientras me da pequeños mordiscos en el cuello acercándose aún más a mi boca. Joder...Yo lo deseo, y mucho, pero no sé si voy demasiado rápido. La mente se me nubla cuando empieza a bajar los besos y entonces me quita la camiseta, el problema es que no tengo el sujetador puesto, se me queda mirando embobado, al ver que no le digo nada y solamente lo miro con deseo continúa desnudandome, me baja los pantalones y por último las bragas, menos mal que me depile mi zona sino pasaría mucha vergüenza. Se me queda mirando por unos largos segundos, se muerde el labio, me mira y comienza a deslizar sus manos sobre mis caderas, baja un poquito más hasta llegar a mi intimidad, comienza a rozarla y yo hago un gemido entrecortado.
-Te gusta así, bebé?.-Me pregunta con una voz ronca al igual que sexi. Joder, este chico me está matando lentamente.
-Mírame.-Me ordena, cosa que yo hago caso, me estoy perdiendo en esos hermosos ojos, comienza hacer círculos lentos, demasiado lento.
-¿Quieres...que...te lo haga?.-Dice mirándome, una mirada llena de deseo, tiene tantas ganas como yo.
-Sí...por favor.-Digo yo gimoteando. Va penetrando lento y suave,¡POR DIOS! Quiero más.
-Más..rápido...por...favor.-Digo yo medio rogándole. Empieza a hacerlo más rápido, joder...hacía tiempo que no se sentía tan bien, cierro los ojos del placer que me está dando.
-Muñeca, mírame, quiero ver como te corres encima.-Dice mordiendo mi labio inferior. Abro los ojos entonces lo veo, miro hacía abajo y puedo ver el enorme bulto que tiene bajo sus bóxers. Aumenta la velocidad un poco, veo su mano penetrandome y me está dando mucho placer, estoy a punto de correrme, hasta tal punto que lo hago.
-¿Cuando podré meterme algo que no sean mis dedos?.-Dice mirando a los ojos con sus pupilas dilatadas. No le hice caso a su comentario, sin previo aviso empecé a besarle, después por el cuello, le hice un chupetón para así marcar mi territorio. Es una manía que tengo, hago chupetones para decir a las putas que intenten algo, que yo tengo algo con él. Mis manos bajan hasta sus caderas, le bajó los boxers. Joder...La tiene más grande de lo que me imaginaba, es más grande que la de Dan, jódete.
-¿Qué...haces?.-Dice mirándome con mucha excitación.
-Devolverte el favor.-Digo con la voz más sexi que me sale, y me muerdo el labio, esta es la primera vez que hago una paja, ya que con Dan no llegué a ese extremo, espero hacerlo bien. Le cojo el pene suavemente, y empiezo a subir y bajar la mano lentamente, unos segundo después aumentó la velocidad, miro la cara de Blake para ver si lo estoy haciendo bien, tiene los ojos cerrados y se está humedeciendo el labio superior, es tan jodidamente sexi. Hace un gruñido, se ha corrido en mi mano. Me mira y sonríe.
-Te dejo ducharte en paz...de nada.-Dice mientras me sonríe de oreja a oreja después cierra la puerta. Me lavo las manos con jabón y después me meto a la ducha, cuando acaba sigo sin tener ropa, me tapo con la toalla y salgo, Blake está sentado en la punta de la mesa con el cabello húmedo, seguramente se habrá duchado en el otro baño. Alza la vista cuando ve que estoy ahí mirándolo como una tonta.
-No tengo ropa.-Digo yo con un tono inocente.
-Espera, que le cojo ropa a mi madre, creo que teneis la misma talla.-Dice mientras va dirección a la habitación de su madre. Cuando llega me da unas bragas y un sujetador de encaje a juego y un vestido rojo que me llega por encima de mis rodillas.
-¿Enserio?, no había otra cosa, no se, más simple.-Digo yo sin despegar la vista al vestido.
-Sí había, pero como vamos a ir al cine.-Dice mirando el vestido al igual que yo.
-¿Al cine?.-Digo yo perdida.
-Sí, ten y vístete ya, que llegaremos tarde.-Dice mientras me da la ropa y la pongo en la cama.
-Vale...-Digo con una voz de niña. Me quito la toalla, me pongo las bragas, bueno...la tanga y después el sujetador, cojo el vestido en la cama, estoy a punto de girarme pero Blake me coje y me aprieta contra él de espaldas.
-No pretendas desnudarte delante de mí sin hacer antes nada.-Dice mientras mete la mano debajo de mi tanga. Suelto un gemido ante el tacto.
-Ya hemos hecho algo antes en el baño.-Digo yo con un tono sexi y juguetón.
-Y una mierda, te desnudaste delante mio para provocarme, y lo has conseguido bebé.-Dice girando y tirándome a la cama, comienza a besarme y quitandome el sujetador, me empieza a chupar una y la otra la está manoseando, para y me baja las bragas.
-April, necesito estar dentro de tí, tengo un dolor inmenso de la erección que tengo.-Dice medio bromeando medio suplicando.
-Yo también...-Dicho esto, coje un condón de su mesita y se la pone. Él está encima mío.
-Joder, eres la persona más maravillosa que he encontrado en el mundo.-Dice besándome la frente. Nos empezamos a besar, su lengua jugueteando con la mía. Pone mis piernas alrededor de sus caderas y se acerca más a mí, desprevenida me la mete despacio, ahogó un gemido, y él también, él continúa yendo poco a poco más rápido, se siente tan bien. Lo cojo y me pongo encima, la penetración es mucho más profunda en esta posición, así que comienzo a subir y a bajar cuidadosamente mientras le estoy cogiendo fuerte del pelo, nuestros gemidos están en sintonía, como si se tratase de una canción. Mi canción favorita. Me coje de las caderas empujando contra él para así sentir más, cada estocada es más fuerte y agresiva, como si nos fuese la vida en ello. Le arañó los pectorales del placer que me está causando, ante eso sus respuestas son gemidos.
-Ahora me toca a mí, gatita-dice mientras él se pone encima mío, me pone el pie izquierdo encima de su hombro y se acerca a mí, su miembro empieza a tocar mi entrepierna, excitándose aún más, pero sin llegar a meterla, hago un puchero de fastidio.
-Gatita mala, dime qué quieres que te haga y te lo haré-dice susurrando al oído mientras me chupa el óvulo.
-Tú ya sabes muy bien lo que quiero, así que no me provoques...-dijo con una sonrisa en la cara al decir esa palabra.
-Quiero oírte decir que quieres que te la meta hasta el fondo, hasta tal punto que no puedas caminar en una jodida semana.
-Quiero que me lo hagas.
-Tus deseos son órdenes, encanto.-dicho esto me la mete otra vez, pero esta vez de golpe, suelto un grito y le cojo más fuerte del pelo, él gime ante el hecho.
-Joder..., estás tan estrecha, me encanta...Estoy apunto de venirme amor.
-Yo también, un poco más fuerte...por favor.-al pronunciarlo me da una estocada que duele al mismo tiempo que me vuelve loca, hace una segunda estocada y en esa nos corremos. Me da un beso en la frente y se echa a mi lado.
-Que sepas que eres la persona más maravillosa que he conocido en mi vida.
-Y tú eres la única persona que me ha dado mi mejor orgasmo-le guiño el ojo y le cojo mechones del cabello haciéndolos remolinos-¿No íbamos a ir al cine?
-Cierto-Nos vestimos y cogimos su coche en dirección al cine

NOTA DE LAS AUTORAS
Hola CRAZIERS!
Sentimos haber tardado tanto en colgar los capítulos per como recompensa os hemos colgado dos. ¿Que os parece? ¿Os gusta la relación salseante entre April y Blake? ¿O preferís una sencilla como la de Millie y Harvey?
Nos vemos en el próximo capítulo!!💕

Nosotras contra EllosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora