Capítulo 16

219 10 30
                                    

Tomás

Las semanas se me van pensando y pensando en si debería volver, si debería quedarme... Si debería perseverar o debería rendirme

Nos han estado contratando bastante, hemos juntado más dinero. Por primera vez desde que nos mudamos no tenemos las deudas hasta el cuello. En la escuela, por otro lado... Las cosas no van muy bien. Sabía que estudiar y trabajar no sería fácil, pero en verdad confiaba en que podría hacerlo. Ya no estoy tan seguro

— ¡Tomás! — David me grita en la cara tan fuerte que por poco me rompe el tímpano — Llevo diez minutos intentando que te concentres ¿Es mucho pedir?

— ¿En qué tanto estás pensando Anderson? Si es por la escuela, ya te dije que puedo ayudarte a estudiar para los siguientes exámenes. Deja de preocuparte hombre— Kendal golpea mi hombro

— Me preocupa no poder con todo. Mi hermana me está ayudando y le prometí que me esforzaría, no quiero que piense que está tirando el dinero

— Tampoco te mortifiques. El año recién está iniciando y tendrás muchísimas oportunidades para recuperarte

No puedo dejar de sentirme jodidamente ansioso, confundido, preocupado

— A ti te pasa algo más ¿Nos dirás qué es? — interviene Dave

Me niego a hablar, no me dejarán en paz

— Vamos Tomás ¿Que no somos amigos?

— ¿Prometen que si se los digo van a mantener sus bocas cerradas? Porque lo último que necesito es que alguien más venga a echarle candela al asunto

— De acuerdo

Los miro con sospecha

— Ya, solo escupe por el amor de Dios. Me pones nervioso— reclama David

— Hace unos días me enteré de que Juliet está peor de lo que pensaba

Ambos suspiran

— ¿Y qué esperabas? Está pasando por un momento muy duro. Es estúpido pensar que sería fácil. Además ¿Que no Eric te mantiene al tanto de las cosas por allá?

— Al parecer no me lo ha dicho todo

— ¿Entonces?

— ¿Entonces qué?

— ¿Estás pensando en volver? — cuestiona Kendall

— No es tan simple

— ¿Qué fue lo que te dijeron? Hasta hace unos días estabas decidido a dejarlo estar y ahora de repente parece que no piensas en otra cosa

— Ella cambió, se volvió a encerrar en si misma como en años atrás y les preocupa que termine en un nuevo episodio de depresión. Se culpa de lo que pasó con su abuela y conmigo... No habla con nadie sobre cómo se siente en realidad

— Eso suena horrendo. Odio imaginarla en esa situación

— Es culpa mía

— ¿Y crees que regresar hará que todo se resuelva mágicamente? Necesitarás más que eso, no seas ingenuo

— Apuesto a que distas mucho de ser su persona favorita— concuerda Dave

— Lo sé, pero si no vuelvo ahora todo habrá acabado para siempre. Conoció a alguien, es cuestión de tiempo

— ¿Esa es la urgencia? ¿Estás celoso? No es tu novia, ya no más

— Aún no es tarde para que eso cambie

***************************************

Arrojo el papel arrugado a la papelera, totalmente frustrado. Ahora ni siquiera puedo componer algo decente

Diario de un recuerdoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora