Diario de un recuerdo

Capítulo 8

Juliet

Lo que pasa cuando me dejo llevar por mis emociones es que pierdo el rumbo de mis acciones, y es en momentos como este, cuando siento que voy a morir con tan solo hacer un mínimo movimiento, que las consecuencias negativas me hacen desear retroceder el tiempo y declinar desde el primer trago

Anoche Juliet tuvo un mal momento, y nadie la entiende mejor que yo, llevamos teniendo un mal momento juntas y por separado todo el verano. El que Mateo regresara de alguna forma fue como volver un año atrás, a cuando todo estaba bien... Vivir de recuerdos está acabando conmigo

Así que cuando sacó la primera botella y empezó a revivir todo lo de Peter y a lanzar maldiciones al destino y a si misma, la acompañé, y la imité... Solo que en silencio. Pero luego vinieron más y más shots hasta que caímos rendidas

Ahora siento que estaría mejor muerta que soportando la infernal sensación que viene después

— Creo que voy a vomitar mi alma— se queja en lo que yo tomo agua como si de repente no quedara ni una gota en todo el planeta

— En ese caso yo ya no tengo alma— me desplomo en la cama que estoy ocupando tapándome hasta la cabeza con la manta. El sonido de la puerta chocando con la pared nos hace gruñir a ambas

— ¿Pero qué les pasó? Las dejé sanas y sobrias anoche

Es Dani

— ¿Creíste que en mi enorme maleta solo traía ropa? — balbucea Jules

— ¿Por qué no me llamaron?

— No pensamos que quisieras unirte. Pero créeme cuando te digo que fue una pésima idea— mascullo

— Puedo darme cuenta de ello, pero incluso estando como están me sentiría menos miserable

Suena ¿Deprimida? Con más lentitud de la esperada me siento en la cama con ella a mi lado, Jules se nos une apenas unos segundos después

— ¿Qué tienes?

— No es nada, voy a estar bien

— La última vez que me dijiste eso ocultabas que estabas enamorada de mi hermano y en un arranque de celos en pleno baile lo golpeaste, así que por favor no me digas que vas a estar bien

— De acuerdo, no estoy bien. Tengo que contarles algo

— Adelante... Pero habla rápido porque en cualquier momento voy a morir y no me quiero ir sin saber el chisme— Juliet recuesta su cabeza en mi hombro

— Me gusta Eric— ambas abrimos un poco la boca

Ni en mis más locos sueños llegué a pensar que sintiera algo más por Eric. Hemos sido amigos toda la vida, nunca mencionó que le pareciera siquiera lindo

— ¿Desde cuándo? — preguntamos al tiempo

— Desde hace unos meses... Comenzamos a acercarnos y pude conocerlo más. Es decir, hace muchos años que lo conozco pero no me había dado la oportunidad de conocerlo bien y una vez que lo hice... Me di cuenta de muchas cosas que me gustan de él

— ¿Se lo has dicho?

— No. Él ha sido muy claro al decir que sigue enamorado de Madeline y si le digo lo que siento se va a alejar. No quiero perderlo

¿Dejavú?

— Es comprensible que tengas miedo de su rechazo Dani, pero callarlo tampoco es una buena opción... Te lo digo por experiencia

— Antes de venir discutí con mamá porque no le gusta que comparta tanto tiempo con él y en medio de mi desespero le dije que me gusta y que no iba a permitir que me alejara de él como lo hizo con Gabriel