Capítulo 7.- Hilo rojo del destino

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Disclaimer: Los personajes de The rise of the guardians (El origen de los guardianes) pertenece rigurosamente a Dreamworks. Película basada en la serie de libros de William Joyce, 'The Guardians of Childhood' (Los Guardianes de la Infancia). Este fic lo hice sólo y únicamente como diversión.

Personajes: Bunnymund, Jack Frost, Toothiana, North, Sandman.

Aclaraciones y Advertencia: Este fic contiene YAOI, humor, Lemon, fantasía y lo que se me vaya ocurriendo, kesesesese.

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El origen de los guardianes: Las crónicas de la muerte

Un hilo rojo, invisible, conecta a aquellos, que están destinados a encontrarse, a pesar del tiempo, del lugar a pesar de las circunstancias; el hilo puede tensarse o enredarse, pero nunca llegará a romperse.

Capítulo 7.- Hilo rojo del destino

Bunny contempló el palacio de corazones con cierta reticencia. Había pasado poco más de una semana desde el incidente en el que termino convertido en humano y cuatro días desde que se dio cuenta de sus sentimientos por Jack —aunque no lo aceptaba —; algo que seguramente era una de las bromas de Cupido.

Aster estaba convencido de que el Dios del amor era responsable de su repentino "interés" por Jack, pues de otra manejara jamás se habría fijado en él (o eso pensaba).

—¡Eros! —la potente voz de Aster resonó por todo el lugar pero no obtuvo respuesta, el palacio parecía estar vacio, volvió a llamar pero nadie respondió. Seguramente Cupido se encontraba flechando parejas en algún lugar del mundo; era de los pocos entre los guardianes y espíritus que carecía de algún tipo de ayudante.

Bunnymund estaba por marcharse cuando vio entrar a un apuesto pelirrojo con alas de plumas negras, frunció el ceño y arremetió contra de él, golpeándolo fuertemente en la cara, ocasionando que callera al suelo por la fuerza del impacto.

—¡¿Qué demonios te pasa?! —dijo el agredido levantándose para confrontar a su agresor. Aster se sobresaltó al darse cuenta que no era a quien había ido a buscar.

—¿Anteros? —el aludido lo miró como si el conejo fuese alguna clase de loco.

—Claro que soy yo, idiota —dijo enojado; tenía un hilo de sangre saliendo por la comisura de la boca y la mejilla lastimada comenzaba a anchársele. —¿Estás seguro que no eres una mula disfrazada de conejo? —Aster lo miró ofendido pero no replicó pues había sido su culpa después de todo.

—Lo siento compañero, no era a ti a quien pretendía golpear —Anteros dio un suspiro imaginándose a quien iba dirigida la agresión.

—Por como gritabas, supongo que mi hermano te hizo algo —dijo cruzándose de brazos —. Eros no está aquí, fue llamado por el señor Destino y no tengo idea cuando va a regresar.

Bunny suspiró resignado, meditó si debía irse y regresar en unos días, esperando tener suerte de encontrar a Cupido o contarle a Anteros su problema, después de todo, ambos hermanos eran los guardianes del amor, aunque uno fuera el del amor correspondido y él otro del no correspondido.

—Es raro verte por aquí después del pequeño "incidente" que Eros causó entre la Arman y tú —Aster gruñó por lo bajo al recordar la broma que Cupido les había hecho al lanzarles una flecha de amor pasajero, sobre decir que después de eso, ni conejo ni la comadreja se llevaban bien.

—Creo que lo ha vuelto a hacer —Anteros levantó una ceja interrogante —. Cupido nuevamente volvió a hacerme una de sus bromas pesadas —suspiró —... está vez con Jack.

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