La primera vez siempre se recuerda, es significativa, queda inmortalizada en tu memoria.
Ya no tenía tantas primeras veces para dar pero sabía que quería entregarte una en particular...Tus labios sobre los míos, tus manos sobre mi cuerpo.
Se notaba tu experiencia, sabías qué puntos tocar y en qué momento.
Poco a poco la excitación crecía, y con ello, prenda por prenda fueron despojados de nuestros cuerpos.Fuiste delicado, fuiste perfecto.
Estoy nerviosa ansiosa y un poco asustada.
- Eres per-fec-ta - dices mientras esparces besos por todo mi cuerpo.
Recorriste con tus dedos mi cuerpo, hasta llegar a mi zona íntima. Acariciaste muy suavemente mi clítoris, un pequeño gemido salió de mí. Eso pareció motivarte, por que no paraste hasta que llegue a la cima.
- ¿Estas segura de esto? - preguntaste mientras te ponías el condón.
- Segurísima - dije con entusiasmo - tú eres al único que podría entregarle mi virginidad.
Acariciaste mi mejilla con ternura para después besarme.Justo cuando nuestros cuerpos se van a unir me miras a los ojos, y tu mirada me dice de todo. Me promete que me cuidaras pase lo que pase, que siempre estarás a mi lado. Y aunque no lo dijiste, cuando me penetraste tu mirada reveló que me querías
, tanto o incluso más de lo que yo te quería.
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RomanceFuimos trágicos, apasionados, libres... Fuimos un nosotros, ¿cómo terminamos de está manera? ¿por qué? Ahora mi deber era dejar ir y superar, pero el arte de superar, de dejar atrás... es difícil cuando amas con cada médula de tu ser. Y yo lo amaba...