Día 3

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Sabía que después de eso nada volverá a ser como antes.

Estamos en clase de dibujo. Siempre se me ha dificultado, no soy tan buena en eso cómo me gustaría, pero hoy en especial estoy dibujando fatal, no tiene ni pies ni cabeza lo que estoy dibujando.
Siento la respiración de alguien en mi cuello volteó inmediatamente. Eres tú.

- Dibujas fatal - dices con sinceridad.

- No hace falta que me lo recuerdes - contesto frustrada - odio tanto esto.

- A ver - me quitas el lápiz - mira se hace así - y comienzas a trazar un hermoso paisaje en mi hoja. Empiezas con un lago para después hacer montañas y un bosque, agregas tantos detalles que termina siendo un paisaje casi real. Se te da tan fácil que lo terminas en cuestión de minutos.

- Listo. Dáselo a la maestra, será nuestro secreto.

Eras tan talentoso, único en tu especie. Eso sólo hizo que me gustaras aún más.

190Donde viven las historias. Descúbrelo ahora