El golpe resuena en toda la habitación.
Mis quejidos se ven opacados por la música que retumba en toda la casa.- Max, por favor, para. - digo débilmente. Aún sigo drogada.
Al parecer Max había ido por mí al baño, al despertarme me sentí tan mal que vomité... En sus tenis.
- No, eres una imbécil, tuviste que vomitar mis tenis. Esto lo pagarás caro. - dice pegándome una vez más en el estómago. Sus patadas me duelen tanto que me quiero morir. Trato de huir arrastrándome pero de un solo movimiento me tiene debajo suyo. - Tienes que aprender que si haces algo malo te irá mal.
Me golpea una vez más antes de que pierda la consciencia.
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RomanceFuimos trágicos, apasionados, libres... Fuimos un nosotros, ¿cómo terminamos de está manera? ¿por qué? Ahora mi deber era dejar ir y superar, pero el arte de superar, de dejar atrás... es difícil cuando amas con cada médula de tu ser. Y yo lo amaba...