C U A R T O D E H O T E L | Aitor Cardoné (Club de Cuervos)

D I E Z

Después de que llegamos al depa Hugo Sánchez nos mandó un mensaje diciéndonos que Isabel había dado la orden de que todos reportáramos al club hasta las 11:00 am, por lo cual Myrna y yo tuvimos suficiente tiempo para dormir y desayunar.

-¿Quieres hablar, wey?—me dijo, picoteando su plato de fruta.

-¿Tú quieres hablar?—contra pregunté, cortando un pedazo de hot cake y metiéndomelo a la boca.

-Pues de lo mío no hay mucho que hablar, pero...

-Wey, sabes que sí—le rebatí.

-Pues no wey, le dije la verdad a Potro y él no me creyó. Si quiere creer que ando de puta con Axel pues que crea lo que quiera, que le den, no me importa.

-Myrna...

-Bueno, ya chinga—dejó su tenedor sobre el plato—sí me importa pero no me voy a ir a arrastrar con él cuando yo no fui la que la cagó. Y si no confía en mi no hay mucho qué hacer, tal vez esto ni siquiera debió de comenzar—se cruzó de brazos, recargándose contra el respaldo de su silla y me miró—¿y tú qué?

-¿Yo qué de qué?

-Pues sí wey, cómo te sientes con lo de Aitor—en ese momento las escenas de la noche anterior vinieron a mi de golpe y un escalofrío me recorrió entera.

-Quisiera ya no pensar en eso...

-¿Te caló?—quiso saber.

-... sí—escupí—no debería haberlo hecho pero sí.

-Lo amas, wey.

-Sí—repetí.

-Pero Zo...

-Sí wey, estoy hecha un mierdero también por Zombie. No sé qué pensar, no sé qué hacer. Sólo sé que ayer me dolió mucho lo que vi, ¿de acuerdo? Imaginar a Aitor con alguien más... wey, no.

-¿Entonces qué vas a hacer?

-Por lo pronto recoger esto—señalé los platos—e irnos al club. Tenemos que sacar unas últimas tomas para Cuervos TV previas al partido de vuelta.

Acabamos de comer en chinga y nos dirigimos a las oficinas del equipo.

(...)

-¡Venga manga de pelotudos! ¡Zombie, poné un centro bueno, carajo!—Potro cercano a nosotras les gritaba a los chicos bastante alterado. Se notaba que no había pasado buena noche.

-Oye, oye—Rafa lo paró en seco—creo que deberías bajarle un poquto a tu intensidad, cabrón—le palmeó el pecho—ve a los vestidores a darte un baño, ya casi terminamos con el entreno.

-Pero Rafa...

-Vete, por favor—Potro asintió y se acercó a nosotras.

-Myr...

-Tani, iré a hacer unas tomas de Axel y de Zombie al otro lado del campo—me anunció aunque eso iba más para Potro y se fue del lado contrario, alejándose de ambos.

-¡Carajo Myr, necesito hablar con vos!—le gritó pero mi amiga no reparó en ello y continuó caminando.

-A ver Potro, bájale un chingo. Myr está muy enojada.

-¡Yo también estoy enojado, la concha de la puta madre!

-Lo sé, y sé que no debería de meterme pero según lo que me dijo ayer ella no tuvo la culpa de lo que pasó con Axel.

-Pero mirála ahora, está yendo donde ese pelotudo de mierda...

-Para darte en la madre porque es bien cabrona. Pero Potro, mi amiga te quiere, y te quiere bien—me miró, entre esperanzado y confundido—no quiso hablar mucho del tema pero estuvo llorando un buen rato en la noche antes de dormirse. Le importas, carajo. Fuiste el primer hombre en su vida y...