Akane
Kaien: ¡¡Lo siento!! -se disculpó mientras lloraba abrazandome- ¡Soy el peor padre del mundo! -asentí energitcamente- ¡Y encima me lo confirmas! ¡Se supone que deberías decirme que esta bien, no pasa nada!-largó en llanto-¡Lo siento tanto!
Akane: Ya ya, -traté de despegarme de él- Kaien...
Kaien: ¡Dime papá!
Suspiré agotada.
Akane: Pa...pá -este lloró de alegria, esto se estaba volviendo ridículo- ¡Papá!
Al fin se separó y se acomodó sus lentes para hablar.
Kaien: Dejando eso de lado... No entiendo como pasé por encima el hecho de darte un arma anti-vampiros, ¡Todos los vigilantes lo tienen!
Akane: Y yo no tenia idea de eso hasta hoy...
Kaien: Que tonto soy...-sonreí de costado mirando para otro lado tratando de no hacerle sentir peor-.
Akane: ¿Me la darás?
Este me miró serio y asintió.
Kaien: Sigueme. -ordenó para luego salir de su despacho y llevarme a quien sabe donde-.
...
Kaien: Bien... Escoge alguna y esta te dirá si eres apta o no. -me informó mientras me mostraba una inmensa pila de armas-.
Me habia llevado a un espacio escondido en la academia, era una especie de mazmorra o algo.
Unas pocas velas alumbraban el sitio donde nos encontrabamos.
Me llamó la atención una pistola color nerga y con detalles en azul obscuro, al apenas tocarla me dio una descarga eléctrica. Retiré mi mando dolida.
Kaien: Esa no. -rió suave- Sigue intentando.
Decidí mirar antes de volver a tocar algo sin sentido, no queria otra descarga...
Me llamó la atención una y me detuve sobre esta. Dudaba en si agarrarla o no. Mi padre al verme titubear se acercó.
Kaien: Aaah, la Artemis... -Miré confundida a esta- Es la primera Artemis, Yuki tiene una igual, la Artemis Rod, pero esa es como la hermana y se convierte en una guadaña. La original -la señaló- funciona solo con la sangre de la poseedora en este caso. Y al ser la primera, tiene uns increíble fuerza. La de Yuki si aguantan los chupa sangre pueden tocarla. La tuya en cambio no aguantaría ni media segundo tocándola.
Akane: No lo entiendo...
Suspiró y volvió a hablar.
Kaien: La Artemis original es muy poderosa, solo una persona pudo poseerla debido a su fuerza. Esa persona ya murió hace mucho y la conservé como ves. Tiene un poder inmaginable y se dice que al beber la sangre del dueño, protege a este.
Akane: ¿Protege? ¿Cómo? -se encogió de hombros- Suena interesante de todos modos.
La miré y la tomé entre mis manos, está reaccionó dandome uns descarga, pero esta vez fue suave.
Kaien: Debe beber tu sangre para saber si eres digna de su poder.
Observé la vara y vi como una especie de aguja. La toqué y esta empezó a clavarse rápidamente en mi dedo provocando que ahogue un grito.
La vara se extendió y tornó de un color bordó.
Kaien: Felicidades... Portas la Artemis original. Eres la segunda más fuerte entre los cazadores. Eres digna de la Artemis.
Akane: Era de esperarse luego de ser la hija de Kaien Cross. -dije con orgullo subiendo un poco el ego de mi padre. Este me sonrió y se abalanzó a mí, por reflejos me corrí hacuendo que este caiga- Lo siento... Me tomaste por sorpresa.
Kaien: Para ser mi hija a veces eres medio despistada y tonta... Deberías entrenar. No quiero que vuelva a ocurrir lo que pasó hace unas horas.
Negué.
Akane: Sé lo suficiente oara sobrevivir. Sé lo básico, tranquilo. Estaré bien.
La Artemis De un momento a otro se volvió un hilo fino pero consistente.
Frunci el ceño confundida mirándola.
Kaien: Creo que deberas descubrir los secretos que esta tiene. Te sorpenderás. -dijo mirándola-.
Asentí.
Kaien: Tira de esta para abajo. -hice caso y esta se volvió un pequeño dije en forma de barra.- Asi podrás llevarla contigo sin llamar la atención. La de Yuki, la Artemis Rod se vuelve pequeña y la lleva debajo de su falda. Tu puedes usarla como collar -me sonrió y asentí sin dejar de mirarla- Bien. ¡Vamonos! Tengo tanta hambre...
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¡Hola y adiós!
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La Hija de Cross || Vampire Knight Y Tu
FanfictionUna muchacha llega a la Academia Cross diciendo ser la hija de Kaien. Trayendo consigo un gran revuelo sobre la noticia y la clase Diurna tanto como la Nocturna se interesan bastante en la susodicha consiguiendo toda su atención y curiosidad. ...