La Hija de Cross || Vampire Knight Y Tu

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Perton

Maldición. Si queria acercarme a la castaña debia pasar por todo ese enjambre de vampiros que la estaba protegiendo.

¿Por que me lo hacen tan difícil?

Inhale y luego exhale tranquilizandome.
No iba a retirarme esta vez, tengo aliados, tengo vampiros de mi lado sedientos y desesperados pero sobre todo ansiosos por porbsr de esa exquisita y escaza sangre que viene encima del cuerpo y apellido del increible Cross. La hija de Cross era un objetivo y que posea ese liquido corriendo por sus venas era un pecado irresistible.

Pero claro que ellos no la iban a probar. Una vez que la tengan en sus manos, quien sea menla debers entregar y luego yo "les daré". Ja, incrédulos...

Ruka: No tenemos que hacer esto, ¿O si? ¿Quieren perder?

Miré a la dueña de la pregunta que se encontraba sentada en la rama de un árbol.

Sonreí de costado.

Kaname: Hermanos Touch. Largo y no van a morir hoy...No vuelvan a acercarse a Akane.

Reí irónico.

Perton: ¿Qué? ¿Que clase de mierda es esta? ¿Me ven como alguien debil? Oh, nonono...Eso sí me hizo enojar.

Tim: ¡Ahora!

Los vampiros empezaron a gritar mostrando sus colmillos y garras, habia conseguido algunos de Clase E. Mi más grande orgullo.

Mientras que los normales solo mostraron sus colmillos y corrieron junto con los otros directo a atacarlos.

La clase nocturna avanzó impidiendo el paso de alguno hacia la castaña, tch.

Esos empezaron a pelear y oh, que maravilla cuanta sangre caia y volaba por todos lados...¡Espléndido!

Mi hermano fue dircto con Zero y yo con el pura sangre.

Kaname: No hagas esto...

Sus ojos brillaban tan intensamente y su mirada era tan fria que me daban ganas de arrancarle esos ojos.

Perton: Oh...Pero, quiero. Y la quiero a ella. Será todo un honor quitarselas de la mano.

Su mirada se enfureció y perforó un árbol justo a mi lado.

Perton: Impresionante...Veamos que más tienes y luego será mi turno, Kuran...

Sonreí divertido.

Akane

Convertí la artemis en una lanza y se la lancé a uno directo en el ojo, luego la retiré manchando mi ropa, ugh que asco.

La tomé y cambié su forma a un pequeño hilo pero fuerte, casi ni se ve.

Aido: ¡Akane cuidado!

Me giré y uno vino directo a mí pero Aido le clavó su mano en el corazón, quitandoselo.

Aido: Alejate de ella, bastardo. No vuelvas a tocar lo mío.

Este cayó a mi costado y yo le agradecí con un gesto, el rubio me guiño un ojo y volvió a pelear.

Shiki: Haz que no te maten, me pondria muy triste, ¿Si?

Una pequela sonrisita se escapó de mis labios al escucharle decir eso mientras peleaba, debia estar concentrado ahi y sin embargo...

Clavé mi artemis para atrás. Habia escuchado las pisadas.

Me giré y evidentemente habia dado en el blanco.

Su cara de sorpresa lo dejaba en evidencia.

Akane: Siempre la tuve -cambié su forma a una lanza de nuevo haciendo el doble de daño y este se quejó-. Solo que no era visible a tus ojos.

La quité sin cuidado alguno.

Zero: Aprendes bien.

Reí por la forma arrogante en que lo dijo.

Akane: ¿Necesitas ayuda?

Zero: no. Tu cuida tu estúpido trasero y no mueras, esto no tendría sentido si ya no estas aquí.

Zero... ay cosita, espera. ¡Me dijo que tengo un estúpido trasero!

Ruka: ¡No te distraigas!

Me giré y vi a una yendo directo a mi con demasiada desesperación.
Me posicione y cambié la forma a una gran guadaña.

Pinche mi dedo haciendo que esta abosrva mi sangre tornando ese color bordó obscuro.

Akane: Ven, aqui te espero...

•••
¡Hola y adiós!