Capitulo 20: Los preparativos de la guerra

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                  —La situación nos dice que debemos actuar rápido. —Dijo Gaara.

—Princes Tsunade, ¿Está todo bien? —Preguntó el Tsuchikage. —Está es la perfecta oportunidad para entregar las cosas a un joven. También eres vieja.

Le parecía gracioso que antes había estado con las mismas personas pero con diferentes intenciones.

Lady Tsunade le había ordenado acompañarla a esta reunión con los Kages en la que si se daba la situación revelaría su identidad.

—Habla por ti mismo, anciano. —Habló la rubia.

—Dejemos de un lado el problema con Danzo. —Intervino la Mizukage.—Estoy aliviada de que hayas vuelto a tu puesto de Hokage, Tsunade-sama

—Bien, ya hemos dados los saludos ahora comencemos con el tema. —Habló el intermediario, el saturáis. —Primero hablemos del Kyubi y Hachibi, después hablaremos sobre cualquier información sobre las bases enemigas y estrategia militar.

—Tengo un equipo de reconocimiento para obtener información. Necesitamos transmitir la información entre las aldeas rápidamente.

—¿Y si firmamos una unidad separada con las Fuerza aliada que solo recolecte información? —Preguntó la Mizukage.

—Buena idea, compartir y compartir. —Dijo el anciano.

—Eso es correcto. —Habló el Raikage—Si cada nación se conduce por sus propios intereses, Akatsuki tirará de la alfombra debajo de nosotros.

—¿Entonces donde esconderemos a los Jinchuuriki?

—¿Esconderlos? —Preguntó Tsunade.

—¿Qué pasa?

—¡Naruto y Bee pueden pelear! ¿Por qué esconderlos?

—Yo también pensé eso, pero esos dos creen que el enemigo irá tras ellos en esta guerra. Considerando lo que puede pasar, no podemos perderlos. —Explicó el Tsuchikage. —Fue decidido en la última reunión, pero tu, claro, estabas enferma.

—¡Nuestro enemigo es Madara! Si dejamos en la retaguardia nuestras fuerzas y perdemos la perspectiva de la victoria, no tendremos ninguna oportunidad.

—Antes de que hablemos de estrategia militar, los cinco Kages deben de dar su consentimiento.

—Es lo más adecuado para Naruto, Tsunade-sama. —Le dije a la rubia.

—Está bien. —Aceptó la rubia.

—Bien ahora discutiremos estrategias militares.

—Antes hablaron de compartir información. —Dijo la Hokage. —Tengo fuentes de información directas de Akatsuki, pero solo la compartiré con una condición.

Todos los Kages la miraron sorprendidas de aquel ataque verbal.

—¡Estas jugando con nosotros!

—Como Hokage me preocupaba la seguridad de mi aldea, por lo que inserté un espía en Akatsuki.—Explicó la rubia.

—¡¿Cómo..!? —Gritos ahogado y más preguntas se escucharon para después haber un ambiente tenso en toda la habitación.

Yukiko Aisuki IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora