Narra Elize
Hoy era el día, por fin nos íbamos a adueñar de la piedra filosofal. El día era nublado y hacía bastante frío, pero no para nosotras. Un gran estruendo se escuchó y todas salieron para ver qué sucedía.
Un grupo de dragones comenzaron a aterrizar en la escuela, todas las alumnas comenzaron a chillar mientras que las profesoras salían para ver que pasaba, al verlo se quedaron pálidas. Nosotras sonreímos y nos acercamos a mi padre para acatar sus órdenes.
Lotte: ¡Chicas! No os acerquéis, es peligroso. -nos gritó preocupada y asustada, pobre ingenua.
Siryah: ¿Por qué deberíamos tener cuidado, si somos igual que ellos? -sonrió con malicia.
Las cuatro regresamos a nuestras formas de dragón haciendo que Lotte y todos empezaran a chillar. En los ojos de Lotte y las demás chicas vi terror, sonreí y lancé una llamarada que empezó a incendiar parte de la escuela.
Muchas alumnas y profesoras intentaron apagar el fuego con su magia, esa era una buena distracción. Gracias a un libro y a las profesoras, que las habíamos espiado, conseguimos saber cómo anular el hechizo.
Hacía falta un sacrificio para que todo el hechizo recayera sobre esa persona, hasta acabar con ella. Akko comenzó a volar sobre la escuela mientras escupía fuego sobre todo el lugar, las demás comenzaron a hacer lo mismo o simplemente hacer caer al suelo a las brujas con nuestras serpenteantes colas.
Constance iba a atacar a Akko con uno de sus robots, se me ocurrió una gran idea. Levanté el vuelo y ataqué a la bruja por detrás, la cogí con mis garras mientras volaba cada vez más alto. Miré la torre donde estaba la piedra, y tuve una gran idea.
La pequeña bruja se retorcía entre mis garras pero no la soltaba, sobre volé todo el campo que ahora estaba lleno de guerras y cuando estuve al lado de la torre miré a la bruja, ella me miró con terror y sentí la mirada de sus amigas en mí.
Elize: Hasta nunca, bruja...-hablé con mi voz, ahora grave y distorsionada.
Lancé a Constanze contra con torre para que se rompiera el hechizo, aunque eso significara la muerte de la bruja.
Amanda: ¡Constanze, no! -gritó todo lo que pudo, lágrimas salieron de sus ojos.
Cuando el cuerpo de la pequeña tocó la torre, empezó a electrocutarse hasta caer desde la torre. Esta se agrietó un poco, junto con Akko cogí la piedra filosofal y todos nuestros camaradas empezaron a vitorear de la alegría.
El grupo de amigas comenzaron a llorar mientras Amanda abrazaba el cuerpo inerte de Constanze. Ion anunció que nos marchásemos y así lo hicimos, dejamos a las brujas con la escuela en llamas y el cuerpo inerte de su amiga.
Narra Akko
Por fin habíamos recuperado lo que era nuestro por derecho, dentro de mí comencé a sentir un pequeño dolor cerca del corazón, ignoré eso y comencé a festejar con mis amigos. Nada más llegar los guardias se llevaron la piedra a un lugar seguro mientras nos quedábamos a la espera de las noticias por parte de los reyes.
Yasuka: ¡Lo hemos conseguido! Por fin hemos conseguido lo que nos pertenecía.
Siryah: Si, estoy muy contenta. -ambas se abrazaron festejando.
Elize: Oye Akko. -me llamó con timidez. -Sé que no es el momento pero...¿Mañana aceptarías una cita conmigo?
Sabía que Elizabeth tenía sentimientos por mí pero siempre los ignoré, ahora que todo había acabado creo que no perdía nada con aceptar.
Akko: De acuerdo, yo te recogeré.
Elize: Genial. -me abrazó con alegría.
Uno de los guardias nos dejaron pasar a la sala del trono, aún estábamos transformadas en dragones ya que ahora no teníamos porqué seguir en forma humana, dado que todo había acabado.
Ion: Habéis logrado el objetivo, felicidades. Ahora cumpliremos nuestra promesa.
Iona: A partir de pasado mañana comenzaréis las prácticas con los guardias reales, si pasáis las pruebas seréis oficialmente guardias reales.
Siryah: Nos alegramos mucho.
Junto con las chicas nos despedimos de Elize ya que ella se iba a quedar con sus padres hablando un poco más. Me despedí de mis amigas y volé hacia mi casa, mi madre me abrazó como nunca al igual que mi padre.
Él seguía algo molesto por haberme ido pero sé que estaba feliz de volverme a ver. Cuando estaba en mi habitación, miré una foto que tenía junto con ella, sonreí y suspiré ahora que todo había acabado.
Cerré los ojos parar dormirme hasta que mi madre me llamase a la comida. Estaba teniendo un buen sueño hasta que comencé a soñar con las brujas, luego soñé que estaba como en una cueva, sentía que alguien me llamaba.
*Sueño*
???: Akko....-llamó una suave voz, la cuál no escuchaba desde hace años.
Akko: Her...¿Hermana? -pregunté mirando a todo los sitios, en busca de su voz.
???: Ellas no son las culpables, Akko.
Se escuchaba cerca pero a la vez lejos, de pronto, sentí como si alguien me cogiera por los hombros.
???: Tienes que buscar la verdad, ellos te la están ocultando...¡Busca la verdad, Akko!
*Fin sueño*
Desperté sobresaltada, miré a mi alrededor pero no había nadie. Observé la foto donde estábamos mi hermana y yo abrazadas, se había caído y con cuidado la levanté. El cristal se había todo y la foto se cayó al suelo, al cogerla vi que había unas coordenadas escritas detrás de la foto.
¿Será que mi hermana me lo dejó, para que buscase la verdad?
Me haces mucha falta, Rose...
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Secretos (Diakko)
Fiksi Penggemar¿Qué pasaría si los dragones tuvieran un motivo para odiar a las brujas? ¿Y si ese odio los llevara a crear una guerra contra Luna Nova? Los dragones están hartos de que las brujas se beneficien de la magia que ellas llaman suya, pese a que la piedr...