💚Candy Candy, Tal Vez... Algun dia...💚

Capitulo 37

Ella se había quedado dormida en su hombro, reconociendo el Aroma de el, ese Aroma a Sandalo, que desprendia de su camisa y que inundaba su piel. Se sentía cómoda en sus brazos, soñando con aquel encuentro que había tenido lugar en Londres, en donde por primera vez su corazón había latido diferente por ese muchacho que se encontraba frente a ella... Sus ojos resplandecian detrás de esos lentes oscuros, y sus cabellos, eran más oscuros, ya que debía camuflarse... Fue corriendo a sus brazos, el le sonreía...
Albert:- Estás muy linda Candy...-Los ojos de Albert brillaban, como dos piedras preciosas...-
Candy:- Tu también Albert... -El se sorprendió y comenzó a reír, ella de abrazo más a él "Estás aquí, en Londres..." -Albert...-Mirandolo como si fuera en ensoñación...-
Albert:- Ven a visitarme... -Mirandola dulcemente-
Candy- Albert...-(pensando) "Sus ojos, mí Príncipe... Anthony...Mí Príncipe... El Broche... Mi Príncipe... No te alejes de mí, Príncipe...
Albert la volvió en si para avisarle que habían llegado a Londres... Ella abrió un ojo, y ahí estaba el con esa sonrisa más que inmaculada...
Candy:- Aún no he despertado...-Mirando esos ojos que la observaban muy de cerca-
Albert:- Candy...-Dandole un beso en la frente- Te has quedado dormida...
Candy:- Me has despertado de un bonito sueño, aunque...-Mirandolo de reojo- El sueño era hermoso porque estabas tú...
Albert:- -Sonriendo y sonrojandose- Vaya...-tomandose la cabeza- Y que soñabas Amor?
Candy:- Nuestro encuentro en Londres...-Suspirando-
Albert:- Ah, si! -Sonriendo- Recuerdo esa fría noche... Te acompañe a comprarle unos remedios para Terry...
Candy:- Fue maravilloso Verte, sabes... -Sonrojandose- Sentir tu calor... Eras a decir verdad muy joven...
Albert:- Ah sí que te gustó verme...-Abrazandola más fuerte- Me fue difícil dejarte ir...
Candy:- Ya estabas enamorado de mí?-Mirandolo Confundida-
Albert:- Siempre te he amado, Candy... En mayor o menor medida... En ese momento debía cuidarte, la muerte de Anthony había sido muy reciente, y supuse que te haría verme bien verme...-Mirandola con dulzura- Yo he viajado en el Mauritania contigo, Candy...
Candy:- Que dices!-Sorprendida- Tu has viajado conmigo y con George... Como es que...-Albert sonrió de costado, y cerró los ojos, recostandose en el asiento-
Albert:- Encerrado en mí camarote... Una vez me acerque a la puerta de tu Camarote... Pero que iba a hacer entonces? -Mirandola confundido- Que te iba a decir? Estaba en primera clase, Candy... Como una persona sin pocos recursos iba a estar en esa parte del Barco...
Candy:- Y cuando fui...-Albert la interrumpio-
Albert:- George me avisó que tú, Alister y Archie iban tras mis pasos... Entonces me oculte... No puedo creer que hayan sido tan persuasivos...-Sonriendo-
Candy:- Te paso lo mismo que a mí, al verme?-Acurrucandose más al lado del rubio-
Albert:-Mmmm... Veamos... Qué te ha pasado a ti?-Mirandola de reojo- Yo no he mentido con lo que te había dicho, estabas hermosa... Ya no eras más la niña que lloraba por mí Sobrino. Había un brillo especial en tus ojos...-Suspirando- Me supongo que el conocer a Terry...
Candy:- El encontrarte... El sentirme en casa cada vez que corría a tus brazos... Qué otra persona me hacía sentir esa paz...-Los ojos de Candy resplandian como aquella vez-
Albert:- Te Amo Candy...-Besando sus cabellos y sintiendo su aroma a rosas- Ya estamos pronto a llegar a la Residencia...-Cerrando los ojos- Comienza una nueva vida para nosotros amor...
Candy:- Si, lo será...-Sonrojandose-
Los Rubios habían llegado a la Residencia de Candy, las Rosas de Anthony estaban en flor, esa maravillosa Estirpe que él había creado y le había puesto el nombre de su Pequeña Dama, brillaban de un blanco inmaculado...
Candy:- Llegamos...-Sonriendo y sintiendo el aroma de sus Rosas-
Albert:- Creo que deberé sacarle las hierbas malas... Aunque se han mantenido bien...-Sonriendole, Candy lo observó y sintió un deja vu...(pensando) "Anthony" negó con la cabeza,Albert se percató de ello- Que sucedió?
Candy:- Nada, Albert...-Suspirando- Dime, sabes de jardinería?-Mirandolo confundido-
Albert:- A decir verdad, Rose me ha enseñado... Aunque claramente no he nacido para cultivar Rosas...-Sonriendo- Anthony y Rose, tenían un Espíritu puro y gentil...
Candy:- Tu también, Albert... Tú también eres así, gentil y puro...-Acercandose a él, Abrazandolo- He estado mucho tiempo lejos de ti...
Albert:- No sea pecaminosa futura Señora Andley....-Dandole un beso en los labios- Sabes, quiero llevar Narcisos y no me olvides a Avon, que dices?
Candy:- Narcisos....-Pensando en ese joven Castaño, ahora Duque de Grandchester-
Albert:- Si...No me olvides, eran los favoritos de mí Hermana Rose, ademas de las Rosas, amaba su flor Azul... Le hacía recordar los ojos de nuestro linaje... Y los Narcisos... Mi Padre los amaba... Además llevaremos las Rosas de mí Sobrino... Te gustaría?
Candy:- Claro Amor...-Aferrandose a su pecho- Entremos cielo...Te prepararé un rico Te de Rosas...
Los Rubios entraron a esa acojedora residencia que George le había conseguido para Candy...
Sus pertenencias ya estaban en la residencia y el Joven Chófer de los Andley ya se había marchado...
Candy estaba en la cocina, preparando el te, cuando Albert se acerco a ella y la abrazo por detrás... Besando el cuello de esa mujer... Abrazando su cintura ceñida...
Albert:- Por fin solos...-Susurrandole al oido, se perdió en los rizos de la rubia, Candy dejo las tazas y cerró los ojos, sintiendo la respiracion de Albert- Deseo Amarte en estos momentos, Amor...-desabrochandole los botones de su vestido, vio los hombros descubiertos de ella y los beso suavemente- Amo tu piel... -Candy solo tragaba saliva, Ese hombre era el único de generar ese deseo descenfrenado hacia el, su primer y único hombre... El vestido de Candy estaba en el suelo, Albert la rodeó con sus brazos fuertes, la giró hacia el...Le sonrió con una mueca picara, e hizo el amague de besarla en los labios, pero la beso en la mejilla... Candy tomó su rostro y lo miro... El, la agarró entre sus brazos y la sento en la mesada de los cocina- Porque me ves así, Amor...-Sonriendo picaramente- No me podré contener si me sigues mirando así...
Candy:- No quiero que te contengas...-desabrochandole los botones de su camisa, tocando la piel de ese hombre que amaba, se deshizo de su camisa y comenzó a acariciar suavemente con sus manos los pectorales bien trabajados de Albert, el la contemplaba con amor, se acercó más a ella y le dio un beso apasionado, ella  se abrazo a el, tomándole sus cabellos dorados. Amaba a ese hombre, amaba lo que el le hacía sentir, cuanto había deseado tenerlo solo para ella. Cuando había deseado sentirse amada, y El era el indicado para ello, por su suavidad y su pasión. Estuvieron un buen rato besándose y explorandose, sin temor a ser descubiertos. Estaban en sus brazos. El cesó ese abrazo apasionado y le dio un último beso... Ella quedó deseosa de más...
Albert:- Ven conmigo...-La levantó y la bajo en el suelo, le tomo la mano y fueron hacia el cuarto de baño, rápidamente con una mano, comenzó a llenar la bañera. Mientras el iba desnudando de a poco su cuerpo, despojandola de toda su ropa... La ayudo a subirse a la tina, y el se deshizo de sus ropas de abajo y entro con ella a la bañera. Quería amarla en ese sitio, deseaba sentir su piel mojada haciendo fricción con la de ella... Agarro una estola y comenzó a acariciarla, ella suspiró... Se deshizo de la esponja y de abalanzó encima de ella... -Eres la joya más importante que tengo Candy...-Besandola apasionadamente, Candy lo atrajo bien hacia ella, y lo sintió. Se aferró a su espalda y el comenzó a moverse despacio. Quería sentirla, su piel era su veneno más dulce. Ella gemía de placer ante el toque de ese Adonis que la estaba poseyendo. Se entregó por completo a el, sin pensar, solo sintiendo a ese hombre apasionado que la hacia suspirar, amaba que le hiciera el amor con esa pasión, beso el cuello de Ella, la observó. Ella estaba sonrojada del éxtasis de tenerlo en sus dominios. No quería que parara, se sujeto fuertemente de los hombros de esa escultura Griega... La fricción del agua tibia, el cuerpo de el encima de ella, sus besos y su pasión la hizo desencadenar en un éxtasis, que con un gemido fuerte,  el la tomo fuertemente de su cadera y comenzó a moverse rápidamente hasta sentir que su cuerpo explotaba, ella se aferró más a él, y sintieron sus nectares entrelazandose como tiempo atrás habían sentido en Escocia. El cayó sobre ella y le sonrió...
Albert:- Me vuelves loco, Amor... No me cansaré de Amarte en la Vida...-Besandola, ella lo observaba con los ojos cristalinos-
Candy:- Jamás imaginé amarte y desearte tanto...-Besandole los labios, que los tenía rojos de haberla besado con pasion-
Albert:- Te adoro Candy...-Besandola, ella abrió su boca y sintió nuevamente su lengua, eso hizo despertar nuevamente los sentidos de el- Señora Andley, me puedo acostumbrar a su osadía...-Guiñandole el ojo-
Candy:- Muero de hambre...-Sonriendo- Quieres que te prepare el té de Rosas?
Albert:- Lo prepararemos juntos...-levantandose y ayudando a Candy, a salir de la bañera. El agarró una toalla y la coloco tapando su parte varonil, su cuerpo aún mojado, sus cabellos mojados. Candy lo observaba, era perfecto. Y pensaba que las mujeres ante esa visión se volverían locas de Amor y lujuria por ese hombre que tenía enfrente. Francamente Willians Albert Andley era el soltero más piropeado por las mujeres de alta alcurnia. Su carácter desinteresado, sus bellos ojos Azules y sus cabellos rubios, robaba más de un suspiro...
Albert:- Te has quedado muda...-Mirandola detenidamente-
Candy:- Estaba viendo lo hermoso que eres...-Acercandose a él y girandolo al espejo, ella lo abrazó detrás de él, y su cabeza apareció al costado- Acaso no lo ves...-Albert se vio en el espejo y le regaló una hermosa sonrisa a su Amor-
Albert:- La belleza es sujestiva Candy...-Ahora dándose vuelta y mirandola- No me dejo llevar por ello... Yo te Amo, no por tu hermosura física, aunque debo confesar que eres una hermosa mujer, una hechicera de ojos verdes que me ha encantado. Pero lo que más amo de ti, es tu corazón. Una y mil veces te elegiría, muy por encima de cualquier Dama de la Aristocracia...-Abranzola, sobre la mejilla de Candy rodó una lagrima, el se dio cuenta y la solto- Vamos Candy...-Sonriendole- No llores... Quiero verte Feliz, no hay motivos para ello...
Candy:- Sabes que lloro de felicidad. Porque tú estás a mí lado...-Sonriendole y poniéndose en puntas de pie, besándole los labios- Te prepare el Té querido...
Candy se vistió rápidamente y se acercó una vez más a la cocina. El pronto estaba allí al lado de ella, con su camisa desabrochada y sus pantalones de entre casa. La ayudo con el Te, y ambos se sentaron en la sala.
Albert:- Candy... -Tomando la taza de Te- está exquisito tu te de Rosas...-Guiñandole el ojo- Es uno de mis favoritos amor...
Candy:- Si lo sé... -Sonriendole dulcemente-
Albert:- Candy.... Me gustaría que buscaramos una fecha para nuestra unión...-Sus ojos felinos resonaban-
Candy:- Albert...-Atonita-
Albert:- No quiero pasar más tiempo sin ser completamente tuyo, Candy... -Mirandola dulcemente-
Candy:- Tragando Saliva- Pensé que esperaríamos un tiempo...-Cuando se acercó la taza de té, el olor de el, la hizo bajarlo, sentía nauceas, lo bajo nuevamente al plato-
Albert:- Estás bien, Candy?-Mirandola confundido-
Candy:- Si, estoy algo cansada...-tomandose la cabeza- 
Albert la miro detenidamente, como esa linda Mujer había cambiado tsn repentinamente...
Albert:- Ve a recostarte, Candy...-Sonriendole dulcemente- Yo levantaré las tazas...
Candy se levantó, pero no logro mantenerse en pie y cayó desmayada, Albert la sujetó antes de que cayera...
Albert:- Podrá ser...-Mirando a Candy, la tomo en sus brazos y la llevo a su cama, la recostó y se sentó al lado de ella, el la llamaba... Hasta que ella abrió los ojos...
Candy:- Que sucedió? En donde estoy? -Abriendo y cerrando los ojos-
Albert:- Te has desmayado, Candy...Como te sientes ahora?-Preocupado- Quiere que vaya por un médico?
Candy:- Estoy bien, Amor... Es solo el viaje... Déjame descansar...-Acomodandose bien en la cama y se quedó profundamente dormida-
Albert se sonrió, esa mujer era realmente encantadora. Fue a la sala y se sentó a terminar su te. Y a leer un libro que encontro. El libro era de Romeo y Julieta... A Candy le gustaba, las historias de ese Majestuoso Dramaturgo. Y rápidamente comenzó a escribirle a George.

Querido George

Supongo que Archie y tu, ya están en Chicago. Debo encomendarte una misión importante. Necesito equipar la Casona de Avon con la Primera edición encuadernada en Cuero de Todas las Novelas de Shakespeare. Es un regalo que quiero hacerle a Candy... Sé que ella Admira a este Dramaturgo, porque Terry le ha pasado esa admiración. Pero quiero complacerla con todo. También necesitaría que me acerquen flores de Narcisos y No me Olvides para nuestro Jardín. Recuerdas las No me Olvides que una vez le regalaste a Rose? Ella quedó encantada... Hazme saber por favor, cuando ya está lista para habitarla.

Willians Albert Andley.

Albert se levantó y observo a Candy que seguía durmiendo profundamente. Salió a entregar el telegrama y fue a comprar rápidamente la cena que le iba a hacer a su Amor. Vio en una Florería, un hermoso bouquet de Flores y pensó en ella... Se lo compró. Caminando hacia la residencia, se paró de pronto ante una Catedral. Entró con el bouquet y sus bolsas de madera. Un joven sacerdote vio al muchacho Rubio entrar y fue a su encuentro.
Padre Mathews:- Joven... Qué puedo hacer por Usted...-Asintiendo-
Albert:- Buenas Tardes, Padre...-Asintiendo- Quiero unirme en Matrimonio, y quisiera saber porque es la primera vez que pasó por esto...-Sonriendo- Como debo anotarme...
Padre Mathews:- Entiendo...-Viendo el nerviosismo del Joven Rubio- Buscaremos un día, venga por aqui...
El Padre Mathews hizo entrar al joven Rubio a su oficina. Y ambos tomaron asiento.
Padre Mathews:- Dígame su nombre, y el nombre de su Futura Esposa.
Albert:- Soy Willians Albert Andley....-El Padre levantó la vista y lo observó, dejo de escribir- Sucede algo?-Mirandolo confundido-
Padre Mathews:- Señor Andley, no estaría más cómodo en la Abadía? Digo, un hombre tan poderoso como usted...-Albert lo interrumpio-
Albert:- Padre...-Suspirando- Quiero que sea en un lugar abierto, usted podrá desposarnos? No necesito una abadía, para declararle mí amor ante Dios a mí futura Esposa... Sé que mí nombre es poderoso. Pero no de guíe por ello... Soy solo un hombre que ama enloquecidamente a una Mujer...
Padre Mathews:- Entiendo... -Asintiendo- Fue nada más una recomendación. Y dígame, Joven. Dónde sería la ceremonia?
Albert:- En Avon... -Mirandolo detenidamente-
Padre Mathews:- De Acuerdo... Se acerca la primavera. En un par de semanas. Le gustaría...-Albert asintió de inmediato-
Albert:- Es la Estación Ideal...-Suspirando y cerrando los ojos, en esa estación la conocí, se decía para si mismo, esa carita llena de pecas, y esos ojos hechiceros...-
Padre Mathews:- Perfecto, Señor Andley. Necesitaría que su Futura esposa y Usted vengan dentro de dos días a hablar conmigo. Así organizamos bien su Boda...
Albert apretó fuertemente la mano del Joven Sacerdote. Se sentía pleno... Fue rápidamente hacia la residencia... Su bella Princesa aún estaba dormida...
Se dedicó a hacerle una riquísima cena y dejó el Bouquet en la mesita de Luz de Candy. Disfrutaba de esa vida... Recordaba ese pequeño departamento, en donde fue Feliz con ella... Esa sensación lo invadió y no pudo dejar de sonreír... Se sentía pleno en esa vida que tanto añoro... Al lado de ella... La mujer de sus sueños...

Continuará...