Anne decide vivir en Londres para estudiar medicina, se muda a Baker Street junto con Sherlock Holmes, ambos resolverán crímenes juntos, llegando a ser más que amigos.
Anne No pude dormir, estaba demasiado nerviosa, me levanté al baño, me dolía un poco el estómago. Mary también estaba despierta. -¿Todo bien? -Mañana me casó, estoy muy, muy nerviosa, y tengo un poco de náuseas. -Deben ser los nervios. -Si, los nervios.
Me fui a dormir, desperté ya que mi mamá me trajo desayuno a la cama. Después de comer fui al baño a vomitar. -Hija, ¿Te encuentras bien? -Si, si, sólo son los nervios. Me duché, fui a la habitación, la señora Hudson, mi mamá y Mary corrían cómo locas.
Me senté en la silla y me empezaron a peinar. -Disculpenme, vuelvo enseguida - fui otra vez al baño. Me lave la boca y regresé, me puse el vestido, me maquillaron. -¡El carruaje ya está aquí! - dijo la señora Hudson. Subí, mi mamá me pasó el ramo de rosas blancas.
El carruaje avanzó, los caballos eran blancos. Estaba demasiado nerviosa. Mis hermanas me acompañaban. -¿Te encuentras bien? -Si, son los nervios, eso es todo. Al llegar, me puse a esperar a mi papá.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Cuando mi papá llegó me ofreció su brazo. Caminamos por el enorme jardín, la música empezó a sonar. Vi a Sherlock en el altar, John estaba a su lado, cuando Sherlock me vio, comenzó a llorar de felicidad.
-Estarás bien - dijo mi papá. -Estoy nerviosa. -Tranquila. Me acerque al altar, Sherlock me ofreció su mano, la tome. -Queridos hermanos, estamos aquí presentes para ver la unión de Sherlock Holmes y Anne Pine en sagrado matrimonio.
Llegó el momento de decir los votos, yo comencé. -Sherlock, eres la persona más importante en mi vida, pienso en ti desdé que me levanto hasta que me acuesto, mi vida sin ti no tendría sentido, así que, gracias por aparecer en ella. Me convertí en una persona totalmente diferente gracias a ti, y por eso te amó.
Llegó su turno. -Antes de conocerte, tenía un plan, una forma en la que iba a ser. Pero entonces tú... llegaste a mí vida, cambiaste todo. Yo estaba en la oscuridad. Pero con tu amabilidad, tu generosidad, compasión, inteligencia.
Sonreí, me sentía en las nubes. -Tu coraje y confianza me trajiste a la luz. Las personas pasan toda su vida buscando eso y nunca lo encuentran. Nosotros lo conseguimos. Somos afortunados. No importa lo que pase, quiero que sepas lo agradecido que estoy porque al final de todo puedo decir que se cómo es amar a alguien verdaderamente.
Hasta el juez estaba llorando. -Los anillos - Rosamund los traía, caminaba cada vez mejor. Sherlock me puso el anillo. -Prometo amarte y serte fiel por toda la eternidad. Llegó mi turno. -Prometo amarte y serte fiel por toda la eternidad. -Puede besar a la novia - nos besamos tiernamente.
Llegó la hora de la fiesta, nos sentamos en una mesa larga. -¿Alguna vez pensaste en que estaríamos juntos? - preguntó despacio. -Lo pensé dos veces. Te elegí ambas - nos besamos. Probé el trago, no me gusto el sabor. -¿Todo bien? -No me gusto este trago,y lo peor es que yo lo elegí.
Llegó la hora de bailar. Baile primero con mi papá. -Sabía que este día llegaría, tarde o temprano llegaría. -Papí. -Ya sé, ya sé. Ya se lo que estás pensando: ¿Otra vez me va a bombardear con discursos? -No pienso en eso, pienso en que estoy feliz.
Después baile con Sherlock. -Estoy feliz, prácticamente estoy en las nubes - dije mientras rozábamos nuestras narices. -Se que seremos muy felices los tres. -¿Cómo que los tres? -Digo, los dos.
Lo miré divertida. -Sherlock... -Estás embarazada, lo deduje mientras ibas al baño durante el banquete, te disgustó la champaña, siendo que nunca rechazas un trago. -¡Hey! Soy buena gustando tragos. -Además Mary me dijo que vomitaste mientras te preparabas.
Mary se nos acercó junto con John, ambos me miraban felices. -¿Ustedes ya lo saben? -Si - dijo John. -Sherlock, ¿Alguien más lo sabe? -No - dijo Sherlock. -Quiero que sea una sorpresa.
-Será mejor que vayamos a comer, o levantaremos sospechas - dijo Sherlock -Además, tienes que comer por dos. -Shhh - dije nerviosa. Después de la comida, me fui a poner algo más cómodo. Bajé junto a Sherlock, todos aplaudieron.
Nos subimos a la limusina, camino al hotel. -¿Lista señora Holmes? -Lista señor Holmes.
