Meryl llevaba viviendo en Connecticut unas semanas, próximamente se iba de viaje para filmar asi que estaba enfocada en su trabajo. Hoy era el cumpleaños de John y ella había solucionado su malentendido con Livie, no arruinaría su amistad de años por otra persona, por Lillian.
Llevaba un vestido a la rodilla negro con los costados blancos, el pelo recogido, estaba mas delgada y se notaba. Intentaba divertirse con sus amigos, despues de todo no iba a pasarlo mal, aunque sabia que Don vendria en cualquier momento y no queria verse derrotada frente a él, lo que no esperaba era que apareciera con Lillian como si fueran una pareja oficial.
Livie y ella tomaron unas copas y charlaron mientras Meryl miraba hacia donde estaba Don, vió a Lillian rodeándole el cuello con su mano para besarlo, Don no hacia nada y seguia hablando con sus amigos. Sentía asco de ver la escena, no lo hubiera imaginado ni en una película asi.
La noche transcurria con total normalidad pero Meryl no dejaba de beber, una copa tras otra.
-¿No estas bebiendo demasiado ya, Mer?
-Nunca es demasiado- le dijo casi arrastrando las palabras.
-Livie!- la voz de Lillian retumbó en sus oidos como si del maullido de un gato se tratara. Meryl puso cara de asco y la miro con cara de pocos amigos.
-Hola Lillian.. como estas?- le pregunto Livie.
-Feliz..
-El viaje bien?-Uff... Que aburrimiento esta fiesta, no? -dijo Meryl ya harta de escuchar la conversación y fue a pedirle al dj que cambie la música, se acercó a Livie con dos copas y le dio una a su amiga.
-Te importaria dejarnos hablar, Meryl?- le dijo Lillian.
-Disculpa? Tu te metiste en medio de la conversación que tenía con MI amiga
-Por dios, Livie.. hasta cuando la vas a aguantar?- le dijo Lillian con desprecio.
Livie odiaba la situacion. Estar en medio de ambas la ponia incómoda.
-Aguantar que, Lillian?- le preguntó -Meryl es mi amiga.
-Deja, Livie.. habla tranquila...- le dijo y se dio media vuelta. Paso a buscar otra copa y siguio bebiendo, se fue afuera para encender un cigarrillo mientras bebia sorbos de vino. Llevaba incontables copas. Se sentó en un banco que habia en el medio del jardin y Don apareció alli, pensaba que estaba alucinando.
-Hey
-¿Que queres?
-Saber como estas...
Meryl lanzó una carcajada y dio una pitada a su cigarrillo cuando se calmó
-Estoy alucinando, no?
-Lo que estas es ebria, Mez...deberias dejar de tomar
Meryl en un acto de rebeldia terminó el resto de vino de su copa y se puso de pie tambaleante, apagó el cigarrillo y lo miró a los ojos.
-Como aguantas todo el dia la voz Lillian? Bendita paciencia
-Que?
-No la soporto
-Ya, Mez... Vamos.. te acompaño..- le dijo agarrando su mano -ya tuviste demasiado alcohol por hoy
-Me puedo ir sola... Dejame!
-Te vas a caer
Ella lo miró con ira y se apoyó en una columna
-Cumpleaños infeliz, imbécil -dijo ya demasiado ebria mientras levantaba su copa vacía. Don se la quitó de las manos y la sacó del lugar rápidamente, no podia verla asi, ni podia soportar que tenga este estado.
-No es mi cumpleaños
-Da igual - le dijo moviendo los hombros -saca tus sucias manos de arriba mio, Donald..
-Mez... Ni siquiera podes caminar
Ella se tropezó y él la agarró rápidamente
-Shhhh.. Mez nada... Anda con la zorra de Lillian y dejame terminar mi noche en paz
-Deci lo que quieras, te voy a acompañar igual
Meryl tuvo unas ganas imperiosas de vomitar y se tapó la boca
-Mierda... -murmuro
-Respira hondo
Ella obedeció e instantaneamente desaparecieron sus ganas de vomitar.
Caminaban despacio, Meryl estaba colgada de él a pesar de sus palabras, Don la ayudó a subir al coche, cerro la puerta y meryl ya se habia recostado para cuando el chofer emprendió camino a su casa. Estaba demasiado ebria como para seguir con su número.
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Contra viento y marea // Una historia Strummer
RomanceLa actriz Meryl Streep y el escultor Donald Gummer llevan 30 años casados, tienen hijos, un amor que parece irrompible y una vida construida en pareja. Pero... ¿Qué pasará cuando su última hija deje el nido y se encuentren solos después de tanto tie...