Capítulo 16: Fría como el hielo

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El lugar que habian elegido sus amigos para cenar era muy hermoso, bastante íntimo, habia poca gente y para Meryl eso era fundamental, mas en New York, donde la mitad de la gente seguro la reconocia y pedia por autografos o fotos.. o algun que otro fotógrafo se llenaba los bolsillos por agarrarla en situaciones de la vida cotidiana.
Ella llegó antes que Don, se enfrascó en una conversación con sus amigas y cuando él apareció lo vio a lo lejos y disimuló. Don se acercó, saludó a todos y cuando llegó a Meryl ella puso su mejilla para recibir un beso. Todos los miraron un segundo creyendo que se besarian la boca por como ella movio la cabeza, pero no... Meryl sonrió y siguió hablando con sus amigas. Un poco le gustaba este juego de pretender.
-Pedimos?- dijo Livie a lo alto. Todos estaban bebiendo vino ya, le llenaron la copa a Don y luego pidieron la cena entre todos.
-Que tal todo entre ustedes?- preguntó Livie a ella por lo bajo
-Como siempre..
-Mejor, no te vas a Londres ya?
-Si, en unos dias
-A ver si tenés suerte y salis con alguien alla..
Meryl solo se rió ante ese comentario, claro que no queria salir con nadie mas que Don.
Cenaron todos tranquilos, entre charla y vinos que iban y venían, algunos pidieron postre entonces Don se levanto y salió a tomar aire con sus amigos, Meryl se puso de pie para ir a fumar afuera y lo hizo a un costado apartada, mientras ellos conversaban y fumaban, excepto Don, que solo tenia miradas para ella.
-Vamos dentro, Don
-Vayan, ahi los alcanzo- les dijo y caminó hacia Meryl.
-Que pasa?
-Nada, estas hermosa
Ella se rió
-Vamos adentro- le dijo Meryl
-Vamos- Don le beso la mejilla y se fue adentro con ella de la mano, se la soltaron cuando atravesaron las mesas para llegar a la suya.
-Que bien se ven juntos- le dijeron casi todos
-Deberian intentarlo- dijo Livie y Meryl la miró casi matándola.
-Si, verdad?- Don dijo y Meryl lo miró seriamente -que? Nos vemos bien juntos- dijo y ella se sentó en su lugar, en silencio y seria.. y Don la siguió con la mirada antes de hacer lo suyo.
-Nadie llega a treinta años de matrimonio sin algun problema de por medio
-Claro que no- dijo Meryl -coincido.. pero nadie llega a treinta años de matrimonio y se enamora de otra mujer- dijo harta de que opinen sobre su relacion con su actual-ex marido
Don la miró sorprendido.. por que hacia ese comentario? Adelante de sus amigos.. ni siquiera era verdad.
Todos se quedaron en un silencio sepulcral, Don se puso de pié sorprendiendo a todos
-Disculpenme... Me voy- dijo lleno de dolor
-No, Don.. quedate
-Dale amigo
Todos le insistían, pero él no iba a quedarse ante esta situacion
-Que disfruten la noche- les dijo y se fue.
El resto de la noche no hubo comentarios, Meryl se quedó pensando que todo estaba bien, pero cuando llego a la casa, Don ni siquiera estaba ahi.
"A donde estas? XxM"
No hubo respuesta. Ella decidió ponerse el pijama y quedarse en el sofá para esperarlo, hasta que el sueño la venció.

Don renegaba para abrir la puerta, tenia unas copas de mas encima y no acertaba con la llave -mierda mierda- murmuraba, Meryl escuchó ruido ylo vio entrar. Se fregó los ojos despertándose por completo, miró su reloj, las 4am. Lo miró a él y vio que caminó un poco tambaleante y cerró la puerta fuertemente.
-Don
El se detuvo en seco y la miró
-Que haces aca?
-Que voy a hacer? Estaba durmiendo...
-No te quiero en mi casa, traidora
-Estas borracho
Ella se acercó pero el no dejo que lo tocase
-Vamos que te doy un poco de agua
-No te preocupes, puedo solo- le dijo. Arrastraba las palabras al hablar, era un poco gracioso ya que el nunca tomaba pero Meryl intentaba no reirse
Caminó hasta la cocina con Meryl siguiendo cada paso detras de él
-A donde estuviste?
-Te importa?
-Claro que me importa, Don..- le dijo acercandose a él, pudo oler el whisky y no sabia si era por el aliento o si salia por sus poros el olor. Le revolvió el estómago -hueles a whisky malo
-Y?
-A donde estuviste? Son las 4 de la madrugada
-No te importa donde estuve.. acaso no soy yo lo peor de esta relación? Dejame en paz- le dijo y dio la vuelta para irse a la habitación
-Entendiste todo mal, Don.. ni siquiera pienso eso... Estaba intentando que no sospechen
-Pues te pasaste.. te felicito, excelente actuación
Don subió despacio y ella fue detras de el, cuidando cada paso que daba.
-Perdoname, Don
-No tengo nada que perdonar, mostraste lo que pensas de mi, sacaste toda la mierda fuera
-No es asi, cariño.. sabes que te amo
-Si ya nadie va a saber de nosotros, ni siquiera nuestros amigos, prefiero estar solo- dictaminó. Sus palabras llegaron a Meryl y la aterraron, no quería perderlo -solo tenias que ser fria.. nada mas- le dijo con pena al entrar en la habitacion.
Ella lo vio sentarse en la cama y caer hacia atras cansando y pasado de alcohol, algo que no era normal en el. Lo ayudó a subir las piernas a la cama y a acomodarse y luego le quitó sus zapatos, el pantalon y la camisa con delicadeza y amor, lo tapó y le besó la frente, este se quejó entre dormido y ella ocupó su lugar en la cama, no le importaba lo que le habia dicho, lo amaba e iba a cuidar de él como siempre, ya al dia siguiente intentaria hablar bien con él.

Contra viento y marea // Una historia Strummer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora