Años De Casados

Narra Fernanda...23

Los funerales son tristes y melancólicos, además de que te hacen ver en donde vamos a terminar algún día, mi padre no tenia mas familia aparte de mi madre y de mi, pero en el entierro habían muchas personas que se acercaban a dar las condolencias.

El sol estaba en su auge, tan brillante que el calor abrumaba, la familia de mi esposo está aquí a excepción de la señora Zaira, mi madre esta calmada pero en su rostro se refleja el dolor, Lizbeth esta sentada a mi lado y una tia de mi madre esta a su lado, es el único familiar de mi madre.

El sacerdote termina la ceremonia y se disponen a bajar el féretro, mi madre se desvanece una vez más, se apoya en mi tia, me levanto y agarro un rosa blanca y le doy la despedida a mi padre, una hora después no hay casi nadie solo estoy yo y un par mas de personas entre ellos Lizbeth y Saimón.

- siento mucho tu pérdida- se acerca Lizbeth con Saimón a su lado, me abraza fuerte- todo va a estar bien- susurra y se separa.

- va a ser difícil no verlo- le digo con tristeza- y Alonso como esta él?- Saimón sonríe.

- él esta bien- asegura- le haces falta- me alienta, asiento y no soy capaz de decir nada mas.

- amiga- llama Lizbeth- nos tenemos que ir, surgió un improvistos- hace una mueca de desagrado- si no fuera importante no me iría- toma mis manos con las suyas- sabes que cuentas conmigo- asiento- te quiero un montón.

- y yo a ti- nos abrazamos.

Los días se van tan rápido como llegan, mi madre vive conmigo ahora, ella aún esta muy triste a pesar de saber disimularlo bien, no pensé que me tomaría tanto tiempo resolver todo para volver con mi esposo, me a sido imposible y más con lo de mi padre, término los últimos documentos, salgo pero me detengo en seco al ver la escena frente a mí, hay dos policías arrestando a mi amiga.

- porque arresta a mi amiga?- le preguntó al oficial, miro a Andra y me dedica una mirada culpable.

- y usted es......?- el oficial pregunta.

- Fernanda Montimer La dueña de la empresa- respondo tajante.

- señora Montimer lamentamos que tenga que presenciar tal escena, pero aqui la señorita Saavedra esta siendo procesada por los cargos de estafa y malversación de fondos- miro a la que dice ser mi amiga, está solo baja la cabeza en señal de derrota.

- era ella la que me estaba robando?- el oficial asiente.

- ella y Antoni Montes- la rabia me invade- pero el señor Montes ya fue apresado.

- como pudiste?- le preguntó indignada.

- lo siento- es lo único que dice y ni siquiera levanta la vista, es tanta la vergüenza que siente que no me dedica ni una sola mirada, los veo desaparecer entre las puertas del ascensor.

El tiempo no se detiene, han pasado tres mes exactos desde todo lo acontecido, la muerte de mi padre, el arresto de Antoni y Andra, el juicio en su contra y los problemas que tiene mi esposo por hackear todo, Saimón obtuvo que lo dejen en paz, el no puede defenderse así que el juez dictaminó que apenas Alonso despierte debe hacerse presente en la policía para rendir declaratoria.

En cuanto llego a la clínica donde esta mi esposo, una emoción me embarga, me tomo demasiado tiempo volver con él, pero ahora voy a poder estar con él y estar al pendiente de todo lo relacionado con mi empresa.

Al entrar el olor a desinfectante inunda mi nariz me voy en busca de la habitación de Alonso en cuanto la encuentro abro despacio para asegurarme que aun sea esa y lo confirmó al verlo ahí, entró la soledad de la habitación es abrumadora y aburrida.

Lo observo, el cabello lo tiene mas largo, la piel mas pálida y notables ojeras debajo de sus ojos, esta muy delgado y sus facciones se ven mas frágiles de como las recuerdo, agarro su mano entre las mías, le doy un leve beso en el dorso de esta, me acerco y depósito un beso en su boca solo es un rose pequeño, me siento en la camilla a observarlo, me hizo tanta falta estos meses para todo y en casa no fue fácil, todo me lo recordaba a él, sonrió acariciando su rostro.

- Hola amor- susurro, mi voz se siente áspera, siento un nudo en la garganta al verlo así- ya vine, soy yo Fernanda- las ganas de llorar me embargan, los ojos de Alonso se abren sorpresiva mente y puedo apreciar el azúl cielo después de tanto tiempo, es tanta la emoción que me embarga que lo que hago es salir en busca de un médico para que lo vea, el despertó ya lo hizo por fin.

Al entrar al cuarto ya sus ojos están cerrados, el medico lo revisa en cuanto termina se gira en mi dirección.

- que pasa?- preguntó temerosa- el despertó, yo lo vi sus ojos se abrieron- las lágrimas empiezan a caer por mis mejillas.

- señora calmese, es algo completamente normal las personas en su estado hacen eso es un reflejó pero eso no significa que han despertado, algunas veces han llegado a mover alguna extremidad- me explica- la señora que estaba anteriormente con el paciente le paso muchas veces, por ello tuvo que irse- la confusión tuvo que ser obvia en mi rostro, el médico añadió- era lo mejor para ella, sus nervios estaban apunto de colapsar- me mira y fija su vista en Alonso- a todas estas- vuelve su vista mi- que relación tiene con el paciente?

- soy la esposa- la cara de sorpresa del doctor fue épica.

- es raro, tome el caso hace dos meses pero jamás la habia visto- la desconfianza en su voz es evidente- sera mejor que me acompañe a mi nadie me notificó de su llegada- hace un gesto hacia la puerta, lo miro con indignación pero lo sigo.

Al salir de la habitación me encuentro con una muy cambiada Loren, lleva el pelo corto hasta los hombros, una perforación en el labio inferior y un maquillaje algo oscuro y ni hablar de su ropa, en cuanto me ve corre en mi dirección y me abraza.

- hola como estas?, Que bueno que viniste, pero dime como está tu madre? Vino contigo?, lamento no volver a ir después de el sepelio del señor Aarón pero mamá se complicó y ya no pude dejarla sola tuvo que volver a Canadá por su salud mental y pues yo vengo de vez en cuándo a ver a mi hermano y por el cambio, bueno me gusta y a Alina también- se encoge de hombros al final, apenas si soy capaz de asimilar todo lo que me dijo, ni siquiera pude saludar la como se debe.

- estoy bien y wuau todo eso paso?- ella asiente y sonríe por ver mi cara de confusión.

- vamos te daré mas detalles- me toma de la mano olvido por completo al medico que requería de mi- adivina quien va a ser tía?- la miro extrañada miro su vientre y me resulta absurdo ya que ella dijo tia bueno puedo ser yo tia de su bebé- no soy yo y me refiero a mi hermano, Saimón va a ser papá- comenta con emoción...

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Hola una capítulo más..

Sigan voy a recompensar los con otro...... ×–––>