El Reto de Plagg.

San Valentín bajo la luna.

Nathalie siguió a su jefe hasta su oficina, y cerró la puerta tras ella.

-Señor, podría decirme la razón real por la que no permitió que Adrien presentara a Marinette como su novia?- preguntó, ya que la excusa dada, era muy pobre, ya que dudaba que las Tsurugi fueran tan indiscretas como para poner en evidencia a Adrien ante la prensa, su temperamento, de ambas era discreto y reservado.

-No me pareció buena idea, aparte Adrien es muy joven aun, puede cambiar de idea con respecto a sus emociones...-

-Usted cree eso o lo espera?- continuo la asistente.

- a qué se debe éste interrogatorio?- exclamo el Agreste mayor un poco molesto.

- Usted espera que Adrien haga pareja con Kagami no? eso ayudaría en los negocios? en su imagen?- continuo mirándolo severamente a los ojos.

- a pesar de que eso sería lo último que Emmily quisiera?... u olvidó como sus padres trataron de disuadirla de estar con usted? acaso cree que hacer pasar a su hijo por lo mismo que pasó a ella la haría feliz?-

Nathalie estaba molesta, pese a todo el respeto, admiración y cariño, no podía tolerar que su jefe tratara de usar a su hijo para fines tan egoístas, conociendo lo muy enamorado que se mostraba hacia la joven Dupain Cheng. Mientras hablaba sujetaba firmemente el trozo de chocolate que Adrien le había dado con esa sonrisa tan considerada, eso le dio el impulso para anteceder por él, el chico que vio crecer y del que no pudo evitar encariñarse casi como una segunda madre, quizá una muy distante afectuosamente, pero siempre pendiente de él.

Gabriel Agreste guardo silencio meditando cada palabra. Y se dio la vuelta para mirar por la ventana, no podía sostener la mirada de Nathalie, no en ese momento.

- Tú estas a cargo de la agenda de Adrien, verifica que tenga pequeños espacios de tiempo, 45 minutos o una hora semanal para entrenar en casa de las Tsurugi- habló al final.

Nathalie no pudo disimular un leve bufido de frustración, que hizo que el Agreste mayor mirara de reojo a su asistente y viera su expresión de total desacuerdo, para luego respirar profundo y asentir.

- Como usted diga, ahora, permiso- y sin querer mirarlo más se alejó pisando fuerte sin poder evitar expresar así su enojo, cerrando la puerta tras ella.
Respiró pesado, pero un brillo en sus ojos relajo su expresión, al fin de cuentas ella manejaba la agenda.

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Adrien y Marinette alimemtaban a sus kwamis.
Marinette estaba silenciosa, aun meditando las palabras de Kagami.

- Mari, qué ocurre?- preguntó Adrien al final.
- nada...no te preocupes, solo ha sido un día agotador con tantas emociones- y le sonrió para calmarlo.

Él le sonrió de vuelta y le besó la frente.

En un rincón de la habitación, Plagg y Tikki comían sentados en una repisa.
-Tikki, qué ocurre con tu chica? Se ve incómoda. ..- preguntó Plagg, que últimamente prestaba más atención a su entorno pensando en aprovechar los resultados de su reto a su portador, y queria mantenerlas.
Entre sus patitas descansaba medio crossan de queso, regalo de Marinette.

- mmmm no tuvo un buen momento con Kagami...ella la intimida ..y no es primera vez que lo hace- contestó Tikki saboreado una galleta rellena de Nutella que Adrien le había regalado.

- Kagami es mala con nuestra princesa?!- preguntó el Kwami preocupado.

- no creo que sea mala...sólo no es muy dulce?...- dijo Tikki.

- Explicate Tikki- instió el kwami negro.

- Bueno, en la pista de hielo fue la primera vez, le dijo al oido que ella caía porque dudaba, y ella nunca dudaba. ..y se alejó llevando a Adrien de la mano...- recordó Tikki.