"Cada vez que intento huir y esconderme
siento que estas persiguiéndome.
Soy adicta a los juegos que juegas.
Me haces sentir tan lamentable."
Not That Beautiful, Papa Roach
Emma arrancó el auto robado de forma tan brusca que salió derrapando. Ben estaba en el asiento del acompañante con las manos ensangrentadas sobre su regazo con una mirada impasible. Scatty iba en el asiento trasero con la cara apoyada sobre la palma de la mano, mirando por la ventanilla, con Leo intentando hacer algo para calmar a todos. Cedric estaba sujeto a su asiento detrás de Emma y le indicaba desesperadamente el camino hacia el hospital.
- Debería haber manejado yo – le recriminaba.
- ¡Cállate de una vez, Cedric! – gritaba Emma y con cada palabra que él pronunciaba aceleraba más el auto.
La sala de espera estaba vacía. En un rincón estaba la mesa de la recepción donde una chica rubia muy joven se encontraba prácticamente escondida detrás del mostrador, mientras hablaba por teléfono y se limaba las uñas. Amy estaba sentada frente a un vidrio lateral que dividía la sala de espera de la recepción. Se observó las manos y se percató de que limarse las uñas era un asunto sumamente insignificante, aún cuando las suyas necesitaban un retoque. Estaba pálida y su ropa de combate había desaparecido cuando subió a la ambulancia. Tenía el celular en la mano y lo observaba cada dos por tres esperando un mensaje o una llamada. Cuando llegaron al lugar los médicos se amontonaron sobre Jo y ella no tuvo más remedio que quedarse afuera y dejarlos entrar en la sala de operaciones. Le había avisado a Ed y a Leo donde había sido llevada. Ahora solo le quedaba esperar, sola, angustiada y nerviosa.
- Amy – escuchó la voz de Leo llamándola antes de verlo – ¿Cómo estás?
Ella levantó la vista y se topó con unos preocupados ojos verdes, sintió ganas de romper en llanto pero se mantuvo imperturbable.
- ¿Cómo está? – preguntó Cedric desesperado.
- Están en eso...Tenía el brazo quebrado en dos partes – dijo con voz un poco seca y desganada – hicieron unas radiografías, creo que una tomografía...
- ¿Qué explicación les has dado? – interrumpió Scatty.
- No he dicho nada, aún no pude hablar con nadie – susurró Amy preocupada mientras el resto tomaba asiento – Tenemos que esperar... ¿Deberíamos llamar a Cecile y a Daniel?
- ¿Estás loca? – exclamó Emma – Van a morirse de un infarto si les contamos lo que pasó.
- Esto no debería ser así... – suspiró Scatty.
- ¿Qué le diremos a los médicos cuando vengan? – soltó Emma.
Leo se levantó y se alejó de allí para llamar por celular a Sean y contarles las novedades. Cedric y Ben estaban en dos sillas en lados opuestos del salón. Cedric estaba con los brazos cruzados y la cabeza reclinada sobre el respaldo y mirando hacia el techo. Ben tenía las manos entrelazadas y apoyadas sobre sus rodillas. Se había limpiado la sangre de las manos al entrar y había desaparecido sin dejar rastro, como si nunca hubiera existido. Scatty le había buscado una camisa del padre de Emma, que aún quedaban en su casa, siempre atenta a cuidar del resto. De todos menos de Jo, a quien no había podido ayudar.
- Tal vez sea bueno explicarle todo a un doctor... – sugirió – Es bueno que tengamos alguien de confianza para... estos casos.
- ¿Crees que vamos a necesitarlo? – preguntó tímidamente Amy.
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Lucero (Lucero Saga 1)
Novela Juvenil¿Qué harías si todo lo que creías que era difícil en tu vida de adolescente pasara a convertirse en una guerra entre el bien y el mal? Cuando tus amigos se encuentran en peligro ¿darías todo por salvarlos? Lucero es el primer libro de una saga de c...