Lucero (Lucero Saga 1)

Capítulo 16: "Propuesta"

"Pero tú no me amas de la forma que yo te amo.

Porque si me amaras, no harías las cosas que haces.

Tú mataste mi corazón solo para saber si crecía,

por encima de tu ira y tus mentiras"
You don't love me, The Kooks

Jo colocó dos piedras negras más sobre su escritorio donde ya había cinco. Se puso el pijama y se acostó exhausta en la cama, quedándose dormida al instante.

El último lunes de clases amaneció con un sol radiante, las chicas estaban charlando en el aula e interrogando a Charo sobre la salida del día anterior. Ben estaba con el pie esguinzado sobre una silla con Sean, Ethan y Matt alrededor hablando del mismo tema que las chicas. Ed y Leo hablaban en otra punta con Cedric, parecía fastidiado se dijo Emma al mirarlo de reojo. Se sonrió, al menos eso denotaba que Jo se estaba desquitando un poco. Justo en ese instante, miró hacia la entrada y ella ingresó al aula; tenía aspecto de cansancio, llevaba la camisa de mangas cortas desacomodada y los cordones de los zapatos náuticos desanudados.

-       Hola... – dijo Jo dejando caer su morral en la mesa.

-       ¡Guau! ¿Qué te pasó? – exclamó Scatty en voz alta haciendo que todo el aula se girara a verla.

-       Mmm..... tengo sueño – dijo desplomándose en la silla.

-       No te ves bien... – dijo Emma sentándose al lado.

-       Eso mismo dijo el espejo.

-       Al menos el humor sigue ahí – burló Charo – Ayer no estabas tan cansada después de la pelea.

-       ¿Scatty, por qué no intentas curarla? – sugirió Amy – Tal vez eso le dé energías.

Scatty colocó una mano en su cabeza y cerró los ojos. Como de costumbre, los hilos de humo verde comenzaron a danzar alrededor de Jo.

-       ¿Y bien? – preguntó Scatty retirando su mano y dejándose caer en su silla al cabo de unos minutos.

-       Creo que voy a dormir un rato – dijo Jo recostándose sobre la mesa.

-       Me parece que tu poder no da energía – dijo Charo.

-       ¡Ey! – le gritó Emma a Jo – ¡Levántate!

Camile, que acababa de entrar, la observó y se acercó a ella sigilosamente. Todos se acomodaron en sus asientos.

-       Te lo advertí – susurró Emma.

-       ¡Moretti! – gritó Camile en el oído de Jo – ¿Quiere dar la clase de hoy? ¿O tal vez adelantar el examen final?

Jo hizo señas con una mano y murmuró nuevamente algo inentendible.

-       ¡Josephine! – protestó la profesora.

-       Jo la vas a hacer enojar – susurró Amy por detrás.

Jo levantó la cabeza y miró a la profesora.

-       Mire, estoy muerta de cansancio, ¿sí? No se puede todo, matar monstruos y estudiar no son tareas compatibles, no se puede – dijo con voz que parecía la de un borracho – Haga de cuenta que no vine excepto cuando vaya a la planilla de asistencia porque no tengo espacio para más ausencias.

Camile la estudió con la mirada.

-       Al menos levanta la vista y haz de cuenta que me escuchas, pero ni se te ocurra dormir en mi clase.