OBJETIVO | Kookmin |

Capítulo 2

Sus labios presionando los ajenos en una caricia cálida, el movimiento de su boca se intensificó al percibir la correspondencia, una sonrisa se formó sobre sus labios para abrir  la boca y meter su lengua en la cavidad del menor, ambos músculos rebosantes de saliva se frotaron en un beso salvaje, el sonido húmedo y sus respiraciones era sumamente sensual. El contacto fue roto cuando aquellos dientes se clavaron en su labio inferior, Park se alejó ante el dolor y rápidamente tocó el área afectada esperando no estar sangrando.

— ... Qué diablos!? — Vocifero riendo con aquella actitud de superioridad, una sonrisa sádica de apoderó de sus facciones al no recibir respuesta. Para él era obvio el deseo que Jeon tenía por el, ese beso era lujurioso y torpe como si hubiera estado realmente ansioso por ello. — Estás hambriento como un perro que vuelve a... — No alcanzó a terminar la frase cuando Jeon le interrumpió.

— Yo no quería volver. — Respondió mirando al Omega con desinterés, Park era la clase de persona que disfrutaba al herir al resto pero no estaba dispuesto a jugar ese juego. — La paga es buena y solo debo soportar a un Omega de mierda como tú por un rato... Espero que esto termine pronto. — Dijo lo último haciendo un gesto con su mano derecha, un obvio tiro en la cabeza lo que definitivamente molesto al rubio.

— No sería un buen trabajo si eso llega a pasar, si muero será tu responsabilidad y no recibirás tu maldito dinero! — Aclaro agarrando la barbilla ajena en un movimiento violento que obligó al Alfa a mirar directo a los ojos de Jimin. — Se un buen perro guardián o te meteré el arma por el culo, Capisci? —

— Nunca cambias... — Pronunció entre dientes soltándose del agarre y mirando en otra dirección obviamente cabreado.

— Mantén la boca cerrada! — Ordenó recogiendo unos papeles del escrito, Jeon le observó y entonces le siguió de cerca, Jimin abrió la puerta para salir al corredor y le dirigió la palabra nuevamente. — Este lugar es nuevo para ti, solo debes saber que este es el piso para la administración, el personal es mínimo y arriba está mi piso, no suelo visitar más en este edificio, el recorrido es siempre de aquí al hotel en el centro pero después del incidente las visitas allí serán mínimas. — Aclaro para presionar el botón del elevador, ese en particular era solo de su uso así que subieron de inmediato, Jungkook entró detrás y se quedó en el frente.

El perfume contrario inundó el pequeño espacio y se sintió por completo cubierto de aquel aroma agradable, Park Jimin tenía una esencia encantadora que mezclada con aquel perfume no hacía más que volverse una verdadera obra maestra, quizá había sido demasiado tiempo lejos de los Omega que olvidó lo agradable que era. El sonido característico del elevador al llegar a su destino le indico que debía dejar de pensar en estupideces así que cuando las puertas se abrieron avanzó para darle un poco de espacio a su nuevo protegido. El lugar era sin duda elegante pero a la vez bastante simple, el color que predominaba era el gris, las estanterías de la cocina de concepto abierto eran negras al igual que la isla en el centro, Jeon se burló para sus adentros ante aquello, Jimin no era exactamente un buen cocinero pero de todas formas su cocina estaba realmente bien equipada, definitivamente una perdida de dinero.

— Según el contrato debo darte donde dormir y comida... — Habló Park quitándose el saco para dejarlo tirado en el sofá, aflojó su corbata y se dirigió nuevamente al castaño. — Estoy cansado y Hoseok dijo que eras bueno en todo. — Dijo para caminar a la cocina y coger un delantal negro con pequeñas líneas verticales de color blanco, aquello terminó en manos del Alfa que no dijo nada y simplemente se acercó a la cocina para encender la estufa. Él no era una niñera o algo por el estilo, su único trabajo era asegurarse de que Park no muriera así que simplemente se dedicó a hervir agua mientras Jimin tomaba asiento en el sofá dándole la espalda.