Katsu -BNHA. [Iida Tenya]

☆5

Iida Tenya intentaba con todo su ser seguir en pie, practicando y preparándose para el Festival Deportivo, pero entre una de las corridas que estaba manteniendo a gran velocidad ve a una rubia ceniza muy conocida para él.

—¿Ziva?

La rubia ceniza solo inclina su rostro para seguir acurrucando su mentón sobre la punta de sus rodillas, las cuales se mantenían rozando sus pechos siendo abrazadas por sus brazos, abrazándose a sí misma.

—Si...

Añade con la mirada cansada, pero sobre todo con cuidado lo miraba.

—¿Por qué viniste? No ves que estoy entrenando.

Iida Tenya tenía su corazón dolido por su marchar repentino, tres días desde su pelea, tres días sin saber de ella y sin verla asistir a las clases de la academia.

—Vengo a explicarle mis motivos por las que explote de manera verbal, se me fue de largo la lengua contigo, tenya...

La rubia saca de su costado una bolsita con dangos y le pasa uno. Mientras otro se lo come ella. El contrario mirándolo serio, inhala y exhala lentamente para luego sentarse en el pasto, a un metro de ella, no quería caer en la debilidad que portaba por ella.

—Dime.

—Mis sentimientos colapsaron cuando me vi obligada a confesarte mis inseguridades, sabes que suelo ser temperamental. Pero no pude tragarme la tensión. Las cosas no están saliendo como deseo Tenya, la empresa exige que dentro de los próximos meses regrese a Rusia, está el proyecto y los villanos que ahora me tienen en la mira. Me voy, sucede el ataque, confié en que estuvieras con bien, fuiste excepcional, nunca dudé de ti. Pero estar lejos y no poder apoyarte fue lo que más me dolió, sentí que... ni siquiera fuese capaz de cumplir con ser buena novia... Yo... s-solo quería poder siempre estar allí para ti sin importar que pasara. Pero no... Todo se me resbala de las manos.

Al culminar las explicaciones, el tartamudeo y pausas amortiguadas de dolor eran causadas por el llanto de impotencia, preocupación y culpa. No fue capaz de mantenerle la mirada, cuando empezó a llorar la rubia ceniza se ocultó en sus rodillas y cabello.

Después de todo, seguía siendo la pequeña chica que aun necesitaba la protección de sus seres queridos, no era invencible tan solo aparentaba serlo para poder proteger a su familia. El peliazul de lentes, se había quedado estático en los primeros segundos ante tal confesión no sabía ni que decir. Era común que su rubia siempre ocultara sus preocupaciones e impotencias, pero no creyó que fueran porque se sintiera impotente al poder estar con él. La empresa poco a poco le carcomía la felicidad que siempre la relajaba, y sabía que cuando ocurriera ella debería partir, mientras que él... Seguir con su futuro, era doloroso.

—L-lo lamento...mucho...realmente no quise...nunca quise gritarte, enojarme o irme y dañarte.

Los sollozos continuaban, pero cuando levantó la mirada tembló, verla triste, culpable y arrepentida era lo más correcto, pero ambos estaban sufriendo por una tonta inseguridad de pareja. Por lo que no dudó en ir a abrazarla, y sentir como su cuerpo vibraba ante la sensación de que su pequeña explosiva lo abraza como si perdiese la vida por ello.

—shh... Tranquila... Eres buena para mí, y de buen corazón, nunca lo dudes cielo mío...

Fue lo único de sus labios fueron capaces de decir a su contraria, mientras que con su mano derecha acaricia suavemente la melena rubia de la chica que tanto amaba.

Sin embargo, cuando su novia se había recuperado fue demasiado el tiempo que habían estado lejos, por lo que lo animó a seguir entrenando con un incentivo bastante arriesgado para los que los vieran, ya que parecían niños. Ya que Ziva le había quitado el celular a Tenya y estaba en vez de correr solo había acertado a crear una escultura de un correcaminos de masa blanca. Por lo que estaban casi a la misma velocidad. También era gracioso ver que una chica estuviera cabalgando a un correcaminos blanco y que esta riera mirando un celular, mientras que Iida Tenya lo perseguía a la chica a toda velocidad.

Tenya estaba nervioso de que viera las fotos que le había sacado una vez mientras ella dormía, sabía que su contraria no se olvidaría de ellos si los viera, y no perdería la oportunidad de gastarle bromas. Por lo que se animaba a tener mejor velocidad hasta atraparla.

Siendo así que ambos fueron pasando el tiempo de la tarde noche, llegando a la casa agotados y con mucha hambre. Siendo recibidos de manera calurosa por la madre del chico con una buena cena, acompañados.

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Hola! Espero que les guste el capítulo, y bueno, lamento mi ausencia pero ya estoy por comenzar las parciales, si sobrevivo les traeré dos maratones que deseen de los fics que son nuevos.

Gracias por leer, y bueno si les gustó alguna parte en específico me gustaría saber cuál ~

Nos leemos pronto,
¡salud y mucha lokura!