[ADVERTENCIA: DEBIDO A QUE ME PASÉ CON EL DRAMA NO ACONSEJO SEGUIR LEYENDO. NO ME RESPONSABILIZO POR SU LLANTO XD]
...Tres años más tarde
Arthit, salió del cuarto de baño embravecido azotando su puerta. Sus manos cubrieron su rostro iracundo y, en un ataque de furia, pateó la silla frente a él, aventándola lejos. Aquello no podía ser cierto. Se revolvió el cabello molesto y sus ojos enrojecieron de la rabia. Tenía que ser una puta broma.
Kongpob, alertado por el estruendo que se oyó desde el jardín, entró en escena apresurado. Creyó que su esposo se había hecho daño.
—P'... ¿Estás bien? —dijo, observando el desastre en su comedor. Arthit se giró hacia él poseído y colocó bruscamente sobre su mano un palillo blanco, de material plástico. —¿Qué es esto? —preguntó el menor, analizado el objeto con desconfianza.
—¡¿Pues qué va a ser?! ¡Una puta prueba de embarazo, es lo que es!—
—Oh, lo siento p'. —se disculpó él, cuando la duda fue resuelta. Aunque rápidamente una nueva incógnita se formó en su cabeza. —¿Pero por qué me das una prueba de embarazo? ¿Piensas hacértela?—
—No idiota, ya me la hice. —dijo, perdiendo la paciencia.
—Oh... ¿Y qué salió?—
—¿Por qué no me dices tú mismo? —vociferó él con evidente veneno. El menor, sin embargo, no le prestó especial atención a su entonación, sino hubiera sabido automáticamente la respuesta.
El menor giró el objeto en cuestión un par de veces, examinándolo exhaustivamente y luego levantó lentamente su vista hacia Arthit, un poco asustado por su ignorancia y el notorio malestar de su esposo.
—P' lo siento, de verdad no estoy familiarizado con estas cosas. —se disculpó él otra vez, un poco avergonzado y completamente aterrado de que Arthit decidiera partir la prueba sobre su cabeza.
—Dio positiva. —Arthit gruñó, sin separar sus dientes.
—¿De verdad? ¡Felicidades p'! —se emocionó el menor, abalanzándose sobre él para abrazarlo con fuerza pero un instante antes de alcanzarlo retrocedió: el rostro de Arthit no enseñaba emoción alguna –al menos no una emoción positiva–. —O no tantas felicidades...—se retractó. Al parecer el deseo de más hijos no era mutuo.
—¡¿Cómo pudo haber pasado, Kong?! ¡Nos cuidamos mucho!—
—No lo sé p'. —respondió nervioso el menor. —¿Cómo supiste que podías estar embarazado?—
—Porque comencé a sentirme mareado y con náuseas. Cómo pasó con Yue. —dijo él, alejándose.
Arthit, caminó derrotado hasta el sofá y se echó sobre él dramáticamente, cubriendo su rostro con ambas manos. Estaba a punto de largarse a llorar, aquella era una noticia espantosa para él. No quería, definitivamente, volver a transitar por todas las complicaciones que atravesó con su primer hijo, aquello sería demoledor para él.
Kong, aunque se sentía un poco disgustado por su reacción, se puso en sus zapatos un momento y pudo entenderlo. Había sido una experiencia especialmente traumática para Arthit, por eso, en vez de ricriminárselo, rodeó el sofá y se sentó a su lado. Luego, lo acercó a su pecho con suavidad.
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Malditas Hormonas
FanfictionArthit está más sensible que nunca, no ha sabido que lo tiene tan angustiado desde hace tiempo y decide ir al médico donde le revelan una terrible verdad. Kong siempre ha sido el novio perfecto pero ésta no era una posibilidad que esperaba y se...