P.O.V. María
Limpiamos nuestros vasos del desayuno y Pablo me llevó hasta el salón.
- Por cierto... Esa canción que me has cantado en la cocina... No la conozco...-dije confusa recordando las canciones de su único disco
- ¡Ah! Eh... Es nueva, para el próximo disco-dijo sonriente.
- ¿De verdad? ¿Cómo se titula?
- Pues... Dónde está el amor...-me respondió- ¿Quieres escucharla?
- ¡Claro!
Pablo fue rápidamente a su habitación y volvió con una guitarra entre sus manos. Se sentó a mi lado y se colocó bien la guitarra, comenzó a acariciar las cuerdas de su guitarra y una bonita melodía salía de ella.
- No hace falta que me quites la mirada
para que entienda que ya no queda nada...
Aquella luna que antes nos bailaba,
se ha cansado y ahora nos da la espalda...Comenzó a cantarla y yo me acomodaba en el sofá observando como Pablo cerraba los ojos al cantarla, a veces abría los ojos y me miraba sonriente, otras desviaba la mirada sonriendo nada más verme.
- Es preciosa...-dije cuando acabó.
- Me alegro de que te guste... Por ahora tengo está...-me dijo sonriente- Pero quién sabe cuándo y cómo puede llegarme la inspiración.
Pablo comenzó a tocar distintas canciones de su único álbum y pasamos el tiempo mirándonos y regalándonos sonrisas. Cada vez que escuchaba una canción suya me olvidaba del mundo y me olvidaba del dolor que Carla me dejó.
- ¿Y tú, sabes tocar la guitarra?-dijo Pablo ofreciéndome la guitarra para que la cogiera.
- Eh... No, pero me encantaría aprender-le respondí.
- ¿Quieres que te enseñe?
- Si quieres...-respondí sonriente.
Cogí la guitarra y Pablo se acercó mucho más a mí, puso su mano izquierda encima de la mía para enseñarme cada uno de los acordes de una canción y me puse nerviosa al sentirle tan cerca de mí. Sentía su aliento en mi cuello y sus brazos envolvían mi cuerpo.
- Soy una patosa con los instrumentos-dije sonriendo.
- ¡Qué va! Sólo acabas de empezar...-dijo mirándome a los ojos.
Tenía su boca a centímetros de la mía, mordí mi labio inferior y en cuanto vi cómo Pablo intentó besarme desvié la mirada de nuevo a la guitarra.
- Yo... Lo siento, no volveré a intentarlo...-dijo sentándose más lejos de lo que estaba de mí.
Él bajo la mirada y me sentí culpable de haber rechazado su beso pero, tenía miedo.
- Lo siento...
Volví de nuevo la mirada a la guitarra y comencé a tocar los acordes que Pablo me había enseñado.
- Lo haces bastante bien-dijo Pablo acercándose a mí de nuevo.
- Tengo un gran profesor-dije riendo.
Me volví a Pablo y vi como me miraba sonriente.
- Me encanta verte reír...
- Es gracias a ti...
- ¿De verdad? No te creo...-dijo guiñándome el ojo.
- Si no te hubiera conocido ahora mismo no sería tan feliz.
ESTÁS LEYENDO
Nunca Estarás Sola [Pablo Alborán]
Hayran Kurgu- Novela Alboranista - "Cuando amas a alguien, vale la pena luchar por esa persona, sin importar las posibilidades" En esta novela, la protagonista llamada María, conocerá a su ídolo Pablo Alborán y podrá cumplir por fin su sueño. Su vida no es del...