Dylan Stewart, un joven de 15 años, se enfrenta a su primer año en un instituto nuevo. Acostumbrado a una vida controlada y estable, su mundo cambia cuando conoce a Luke Flynn, el otro chico nuevo del instituto, con una cara bonita y una personalida...
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Recuerdo con gran certeza aquel fatídico día en el cual no paré de sentir todo tipo de emociones que me hicieron creer que aquello que estaba viviendo era un sueño.
Todo comenzó por la mañana, me levanté algo enfermo, me dolía levemente la cabeza así que me tomé pastilla para curarme y aliviar el dolor, y me senté en la mesa a desayunar.
Acabado el desayuno, me fui a mi habitación caminando como si fuera un zombi desfigurado. Mi dolor de pierna me impedía caminar correctamente y eso provocaba que me quisiera tumbar cada minuto, aunque bueno no voy a negar que soy bastante vago y por eso me quería sentar cada dos por tres.
Cuando llegué a mi habitación, mientras hacia mi cama y lanzaba mis cojines fuera del colchón para poder colocar las sábanas más cómodamente observé en la televisión de mi cuarto, por desgracia de baja calidad al menos hasta que me compren una nueva por navidad, un informativo de última hora sobre una aurora boreal que iba a verse en toda el área de Crosswell, y pensé que tal vez sería buena idea ir a ver aquel increíble fenómeno todos juntos, así que avisé a Matt, a Percy y a Sofia.
Tras avisarles y finalmente confirmar que podrían venir planifiqué lo que estaría divertido hacer y dónde quedar para tener todo meticulosamente preparado para nuestro día. <<Una manta térmica lo bastante grande como para cubrir una moto de gran tamaño, comida para picotear por si nos entraba hambre, un termo con chocolate caliente para acompañar a la comida y unos vasos de plástico para repartir el chocolate>> repetía mentalmente para mi mismo mientras colocaba todo en una bolsa.
Después de preparar todo y avisar a mi madre de mi salida, cogí dinero para el viaje, las llaves de casa y partí hacia el centro comercial de Somerville Lodge, en el cual habíamos quedado. Nada más cerrar la puerta de la casa sentí los copos de nieve acariciar mi rostro y el viento gélido intentando llegar hasta mis huesos poco a poco.
Completamente helado regresé a dentro y cogí una bufanda que también había en uno de mis armarios con ropa de invierno, me la coloqué alrededor del cuello y exhalando como podía calor de mi cuerpo, tembloroso comencé a andar lo más rápido que pude hacia el centro comercial. Decidí ir andando para, a pesar del frío, apreciar el paisaje nevado que se mostraba ante mis ojos y bueno... También fui andando para ahorrar algo de dinero porque siendo sinceros estaba un poco escaso de dinero.
Al llegar al centro comercial, aproximadamente después de media hora andando congelado, pude ver desde lejos a Sofia con Matt esperando a mi llegada.
—Oh, ya estáis aquí— dije sorprendido mostrando una helada sonrisa.
—Eso te pasa por ser un tardón Dylan— contestó frunciendo el ceño entre risas Sofia.
Mientras Sofia estaba distraída le di un beso en la mejilla a Matt. Instantáneamente se puso rojo y sonriente— ¿Que tal todo? —pregunté mientras agarraba su mano.
— Bien jeje —contestó Matt mientras agarraba mi mano más fuerte aun. De repente me dio un beso en los labios sin previo aviso y yo agradecido por ese gesto lo besé también. Me sorprendió bastante que me besara delante de Sofia, es bastante tímido con el tema aun, al igual que yo.
Mientras tanto Sofia estaba distraída mirando a un campo de fútbol cercano y no se enteró del beso lo cual agradó a Matt, pero algún día estaremos preparados para poder dar el paso y besarnos en público y para contárselo a nuestros amigos.
—¿Qué tal todo Matt?— le pregunté de nuevo en voz alta para que Sofia no sospechase de la conversación anterior.
—Bien ¿Y tú?— contestó mientras frotaba cariñosamente sus manos con las mías.
—Yo también estoy bien— dije sonrojado y riéndome porque Sofia no se enterase de nada.
—Bueno pues ya estamos todos ¿Entramos a dar una vuelta por el centro comercial o nos vamos directamente?— preguntó Sofia mientras volvía a prestarnos atención.
—Pero... ¿Y Percy?— pregunté extrañado.
—Está dentro. Me parece que tenía que ir al baño. Ya sabes como es este chico— contestó Sofia algo sonrojada.
—Bueno pues vamos dentro y esperamos a que salga, y luego ya vemos que hacer— dije contestando a la pregunta de que hacer.
Entramos dentro y todo estaba como siempre, iluminado, limpio y con muchas personas disfrutando con amigos. Desde la entrada de un Starbucks observamos que Percy se acercaba hacia nosotros.
—¡Ey! - exclamó Percy— Ya has llegado Dylan ¿Bueno que...? ¿Nos vamos...?— preguntó Percy mientras retomaba el aliento tras haber corrido todo un tramo desde el baño hasta nosotros.
—Vayámonos ya, así vamos preparándolo todo— dije contestando a Percy.
—¿Nos vamos entonces?— preguntó Percy a Matt y a Sofia.
—Por mi vale— dijo Sofia.
—Por mí también— contestó Matt.
Acabada esa conversación, nos dirigimos directamente a la parada del autobús para que nos llevará al Río Nevern ya que, normalmente, suele estar abandonado. Al entrar en el vehículo cada uno pagó su tiquet y nos dispusimos a sentarnos. Nuestro objetivo era sentarnos todos juntos, pero la disposición del vehículo nos lo impedía, por que los asientos estaban dispuestos de dos en dos, así que se sentaron Percy y Sofia en la séptima fila del autobús mientras que Matt y yo nos sentamos detrás de ellos.
*FIN DEL CAPÍTULO*
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Hasta aquí el capítulo de hoy ¿Qué pasará a continuación? Lo averiguaremos en el siguiente capítulo. Espero que os este gustando la historia. Si te gusta o no este capitulo o la historia por favor vota o comentarlo, esos mensajes me sirven para saber en que mejorar o no. Hasta la próxima lectores, gracias por apoyar y hacer la historia posible y gracias por seguirme y darme una oportunidad, un saludo.
