Capítulo 18: "La sonrisa más bonita del mundo"

590 49 17
                                    


Elani.

Por meses creí que estaba en un error por amar el hermano de mi antiguo novio. Creí que lo que había pasado entre nosotros y la forma en la que concebí a un bebé era mala, y me sentía despreciable.

Mi madre siempre ha dicho que tengo un corazón noble porque perdono a los que les hacen daño pero nobleza no es permitir que me lastimen una y otra vez, eso es estupidez, es estar ciega, nunca debí permitir que Sami me lastimara, que me engañara con mi mejor amiga y que obligara a su hermano a terminarme. Sentía mucho coraje y rabia, sin embargo, pronto aquella semana que estuve con su hermano en San Diego fue mágica. Aún, meses después no podía comprenderlo. Realmente me enamoré de ese chico sin saber quién era. Sorprendentemente a él no le guardaba ningún rencor, y fue extraño porque al saber que existía alguien más aparte de Sami, me alegró el alma. En cuanto lo supe, desee con todas mis fuerzas estar con él, buscarlo y decirle que lo amaba, para mí no era ningún extraño, a su lado me sentía como una niña pequeña en el día, y en la noche como una mujer completa e ilusionada.

Así estaba, ilusionada por saber de él y que el supiera de mí, quería reencontrarnos como en las películas, así de romántico e inesperado.

Por un lado estaba dolida, por otro estaba emocionada, entonces, estaba decidida a buscarlo, sin embargo, investigue primer en internet, él era un hombre famoso, demasiado famoso, era un artista del momento, y lo peor era que tenía novia. me desilusione tanto como una chiquilla de secundaria que ve a un artista con su otra novia artista y se le baja el autoestima. Decidí no pensar ya en él, pero de pronto, cada noche, me encontraba llorando por él y pensando en el pequeño que llevaba en mi vientre.

Todo cambió, cuando llegó de la nada a mí. Sinceramente nunca había sido tan feliz, y no me importaba nada, quería que estuviéramos juntos y haría lo que fuera para que así sea. Cuando el acepto que me amaba, sentí que ya no me hacía falta nada más para vivir. No obstante, cuando Sami lo aparto de mí, sentí algo parecido a cuando le arrebataban un cachorro a una hembra; miedo.

-Te dije, Rami-le reclama a su hermano-Te dije que no la tocaras-lo aleja intimidándolo. En seguida me puse en medio de ellos.

-Vete, Sami-reclame-No tienes nada que hacer aquí.

-Eres mi prometida.

-Ya no lo soy más, entiéndelo.

-Pero, amor...

-Te perdone, Sami, pero ya no permitiré que me lastimes de nuevo. Amo a Rami, es el padre de mis hijos y queremos estar juntos.

-¿Tus hijos? ¿Serán gemelos?-murmulla soltando algunas lágrimas.

-Sí-conteste. Sami dio un paso atrás y se tranquilizó, pero cuando parecía que iba a marcharse, volvió a abalanzarse contra Rami y lo golpeó en la cara, haciéndolo caer al suelo. Grité por ayuda, en seguida, mi padre apareció en la habitación y se lo llevó a arrastras mientras gritaba tonterías.

Con cuidado levante a Rami y lo recosté sobre la cama. Su labio se hincho y comenzó a sangrar, tomé el botiquín del baño y lo limpie. Él no se quejó en ningún momento, solo me miraba fijamente.

-No llores-me dijo y acaricio mi mejilla.

-Odio como pasaron las cosas.

-Lo sé, yo también lo odio, nunca debí aceptar hacerme pasar por mi hermano para romper contigo, ¿Pero de que otra forma te hubieras enamorado de mí?

-Siendo tú mismo, eso fuiste cuando estuviste conmigo. Te amé tanto desde que te vi por primera vez.

-Pero pensabas que era Sami.

Corazón de niña 《Rami Malek》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora