"Comprometidos". [ChenMin]

Más cercanos.

Jongdae tiró de mí por los pasillos, justo como yo había hecho con mis mejores amigos. Para algunos sería algo normal, para otros sorprendente porque no me esté quejando, además del rumor. Hoy sí portaba su perforación en el labio inferior, se veía tan real que aún me pregunto cómo es que hizo para ocultarla ese día; quizá sus padres no estaban enterados. Nos llevó hacia un aula vacía.

-¿Y bien? -me crucé de brazos- Que sea rápido.

Apartó una silla para subirse a la mesa y apoyar sus pies en éstas. También recargó el codo en su rodilla y el mentón en su mano derecha, mirándome. Aparté mi vista de él, sintiéndome nervioso.

-Ayer hablé con mi madre -suspiró-, es irritante algunas veces... Bueno, quiere que nos volvamos, eh, más cercanos.

Sinceramente esperaba más de Minjung, se veía de esas madres que se empeñaban en conseguirle pareja a sus hijos y, cuando les veía con un acompañante, se insinuaba. Quizá esperaba a que Jongdae me tratara como si fuesemos novios, suerte que no es así. Mucha suerte.

-Pues sería difícil. Contando que eres un bravucón de primera, te empeñas en molestarme y fastidias todo el día. ¿Cómo es que tus padres no saben que eres así? -de repente, sentía enojo. Obligan a que me lleve bien con alguien que no me agrada- Debiste ser expulsado.

Jongdae se puso de pie, acercándose. Cada paso que él daba, yo lo retrocedía. Su expresión seria que portaba mayoría de veces -excepto cuando me molestaba, ahí sonreía- hacía que mis piernas temblaran, porque tenía miedo de que algún día llegara a golpear mi rostro. Continuamos de esa manera hasta que mi espalda chocó con la pared. Jongdae posó sus manos a los costados de mi cabeza. A pesar de ganarme con unos centímetros, sentía que era muy pequeño enfrente de él.

-No soy bravucón, otra cosa es que tú seas tan débil -apreté mis puños-. Creo que mamá está dando una razón para que me conozcas, ¿no? Seguramente pensarías que es una broma si te digo que tengo una de las mejores calificaciones.

Tuvo razón. Dejé escapar una pequeña risa, tenía que estar jugando.

-Minseok, me dejaré de divertir contigo si aceptas el trato.

-¿"Divertir"? -exclamé. A mí no me parecía divertido todo esto, sin embargo, lo segundo me intrigaba- ¿Cuál trato?

-Aparentar lo que quieren. Mamá en realidad dijo algo como: "Se lindo con tu prometido, hijo. Dale abrazos y besitos".

Mordí el interior de mi mejilla, evitando reír ante la imitación pésima de Minjung. Luego se fue bajando poco a poco, entendí su palabras. De verdad había pedido eso, que fuéramos como ese tipo de cercanía. Como si de verdad fuesemos novios o, en este caso, estuviéramos comprometidos.

Pensándolo bien, eso significaría que dejaría de arrebatarme las cosas, dejarme en vergüenza conmigo mismo y burlarse. Sobre todo éste ultimo, sería demasiado bueno dejar de ver esa sonrisa tan... suya.

-Pero... ¿sería sólo enfrente de ellos?

-Sabes que sí. A pesar de los rumores, nadie sabe en realidad qué cosa une a las agencias -miré el suelo. Chen puso un dedo en mi barbilla intentando que lo mirara, pero me negaba-. Minseok, nadie sabe nada, ¿verdad?

-B-bueno -jugué con mis dedos-, puede que se lo haya contado a Kyungsoo y Ba-baekhyun, solo puede. Ellos prometieron no decir nada.

Dejó escapar un bufido, aunque cuando lo miré no parecía enojado, sino todo lo contrario. Se pasó una mano por el cabello. Sentí algo dentro de mí removerse. Era comprensible, después de todo, no hube terminado mi almuerzo.