Autodestrucción inminente

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Los androides elficos eran una fusión entre cuerpos orgánicos y tecnológicos, en pocas palabras un Cyborg mágico.

Gox me transmitió esa información justo a tiempo. En ocasiones él tenía unos repentinos estados de  trance al entrar en contacto con la tecnología elfica avanzada, justo hasta esa vez fue capaz de decir que eran cuando le mandé un mensaje mental de alerta.

Teniendo en cuenta eso, sabía que podía drenar la magia de la máquina y dejarle solo la parte de metal. Pero algo más me preocupaba: es la magia más fuerte que la tecnología?

En la fosa del olvido básicamente no tenía nada más que mi cuerpo y mente, la magia era nula y en ese oscuro abismo solo funcionaba la tecnología. En ese entonces me dí cuenta de lo vulnerable que era sin mis poderes.

Las runas estaban casi activas, pero tardarían en afectarme.

Volaba casi al ras del suelo esquivando el láser del androide. El plasma me rozo una mano y casi me arrancó un dedo, aún si tenía mis escudos activos la parte no mágica me afectaba.

Recordaba que en mi vida pasada había leído del plasma. Era el cuarto estado de la materia, gas tan caliente que era el mismo material que constituía a las estrellas, el láser era de plasma quién sabe, sentía que si.

Detuve la hemorragia de mi mano con varias runas que Gox me enseñó: obstrucción, flujo y reposo. El dolor era muchísimo, pero me aguante las lágrimas preparando el báculo de poder.

Con el terror y la incertidumbre tenía sólo una opción: destruir todo desde dentro y salir con Yimu y con Gox, con suerte la destrucción de la torre también destruiría a la máquina asesina.

"En serio, en que pensaban estos elfos locos?!"

La esfera o gema verde estaba guardada en mi morral improvisado, solo Yimu sabía cómo canalizar la energía de adentro, en momentos así, no me pondría a tratar de usarla como amplificador sino como fuente de poder.

Lentamente drene la magia encapsulada, era magia intensa que jamás había sentido. Mi mente y cuerpo se sentían más ligeros, como si el mundo al rededor se hiciera cada vez más lento y menos denso.

El Cyborg me apunto y fui capaz de ver cómo se formaba la chispa que disparaba el cañón cientos de veces más lento.

"Que es esto?!"

Con un ligero paso al frente me agache y le di una patada desde abajo reforzando mis pies con emanación repulsora.

Sentí que todo había sido tan rápido que al ver el láser destruido disparando hasta lo más alto de la torre comprendi el gran poder que había conseguido temporalmente.

Quería seguir extrayendo más del orbe, pero no podía arriesgarme a las consecuencias desconocidas.

Una de las patas se encajo en el suelo y todo el cuerpo mecánico giro con las otras patas como cuchillas danzantes.

Me empuje con mis pies hacia atrás y le apunte con el báculo justo por debajo para destruir el suelo.

La araña mecánica se detuvo y saltó a la pared, quedando suspendida con un brazo destrozado y sus ojos horribles mirándome.

Suspendi el báculo con mi emanación y le dispare agujas usándolo como amplificador.

Yimu! Cuánto falta?!

Falta poco, Gox está por terminar!

Maldita sea! Destruiré el lugar con esta cosa! Que se apure!

Los disparos alejaron al androide, sin embargo ya no tenía más reservas de poder. Ahora tenía que drenar a la máquina.

Active el sello que le transmití con mi pie y comencé a drenar su magia, otro torrente arcano fluyó en mi interior y esta vez la emanación fue más poderosa.

La Dama Blanca es un varónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora