Capítulo 05

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—De verdad detesto cuando la gente hace eso. ¿Es tan difícil esperar a que la otra persona diga algo como " Ya terminé " o " Ese es mi punto? —preguntó Taehyung con molestia observando al rubio.

—¿Qué más querías decir? —Preguntó el azabache ignorando el comentario.

El castaño suspiró cansado y cerró los ojos. Al abrirlos de nuevo, parecía que su enfado se hubiese ido lejos. La calma reinaba en su tono de voz.

—Decía que Hoseok nunca me habló sobre sentir por ti más que amistad —dijo lentamente —sin embargo, una cosa es lo que él diga y otra lo que yo interprete.

El corazón de Yoongi comenzó a acelerarse. Nunca antes se había sentido tan consciente de sus latidos como en ese momento. Sus manos comenzaron a sudar, por lo que intentó secarlas en sus jeans discretamente.

No quiso seguir pensando en su estado físico. Se concentró nada más en la interesante conversación.

—¿Qué interpretaste? —Preguntó antes de que pudiese pensarlo dos veces.

—Notaste que se come a Yoongi con la mirada, ¿no es así? —dijo el alfa sonriendo burlón.

El castaño pensó un poco antes de hablar observando a la pared detrás de ellos.

—Nunca he sido del todo creyente en las leyendas de los alfas y los omegas, ¿saben? Sin embargo, mi abuela solía contármelas tanto, que me las sé de memoria —volvió su vista al azabache —Una de esas leyendas cuenta que al encontrar a tu pareja destinada, puedes sentirlo. Dice que sufres un cambio mental además de físico, que tienes la certeza de que el lazo que está surgiendo durará eternamente... a mí solo me ha pasado eso con Jungkook —admitió sonriendo felizmente.

—¿Y Hoseok tiene que ver en eso porque...? —Preguntó Jimin.

El omega volteó a verlo y sonrió apenado. Se había dejado llevar pensando en su pareja.

—El punto es que nunca sentí eso con Hoseok, y hasta donde yo sé, él tampoco lo ha sentido conmigo —comentó viendo al azabache —ni conmigo, ni con otra de sus ex parejas —aclaró.

El vacío en el pecho del omega pareció disminuir de intensidad. Como si de repente el agujero negro que devoraba todo a su paso, fuese sellado con cinta adhesiva. Puede que funcionase por un rato, pero sabía que necesitaba más que eso para no sentirse así.

—Eso fue tan cursi, aunque gracias por darme la razón —dijo el alfa.

—Oye, —Taehyung ignoró al rubio y siguió observando a Yoongi —no he preguntado el porqué de todo este cuestionario y no lo haré, pero te diré algo. Si tu motivo va más allá de tener razón y ganarle a tu ex es genial. De lo contrario, sería mejor no seguir buscando. ¿Qué harías si hallas una respuesta que no estás listo para asimilar? ¿Estás dispuesto a buscar la verdad aunque eso signifique que todo entre ustedes pueda cambiar?


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Definitivamente, no volvería a buscar a Taehyung. Ya habían pasado dos días desde la visita a su departamento y aún sus preguntas rondaban en su cabeza.

¿Qué harías si hallas una respuesta que no estás listo para asimilar?

Sinceramente, no lo había pensado. Se había concentrado tanto en que Jimin estaba equivocado que no había pensado en lo contrario. Aunque no podía ser cierto, ¿verdad? Jimin no podía tener razón, ¿cierto?

Su ex debía estar inventando aquello. Quizás el que si tenía razón era Hoseok y no debería haberle dado la posibilidad de ser amigos de nuevo.

Si tan solo le hubiese hecho caso, no estaría pasando por todo aquello.

Suspiró y se observó en el espejo del baño una vez más. Sus ojeras producto del insomnio estaban allí para recordarle que las palabras de Taehyung podían ser tan efectivas como el café.

¿Estás dispuesto a buscar la verdad aunque eso signifique que todo entre ustedes pueda cambiar?

¿Cambiar? No quería que las cosas cambiasen.

A lo largo de los años tantas cosas habían cambiado en su vida y la única constante siempre había sido el alfa. No importaba que tan mal o bien estuviese todo, siempre podía contar con que miraría a un costado y tendría la sonrisa brillante de Hoseok para alentarlo. Su mejor amigo, su más fiel compañero. Él estaría allí en todo momento, nunca le fallaría.

Sin embargo, si pensaba en que el castaño sentía más que amistad por él, todo era diferente.

Había tenido los suficientes noviazgos como para saber que no todo siempre resultaba bien. En muy pocas ocasiones las parejas terminaban de buenos modos. Por alguna razón, se pasaba del amor al odio en muy poco tiempo.

Él no quería eso con Hoseok. No quería que su vínculo se arruinase. Quería poder seguir volteando y viéndolo a su lado. Con algo más que un amigo no tendría eso. Lo más probable era que todo terminaría mal y se distanciarían. Se odiarían y su amistad quedaría atrás.

Ni siquiera se cuestionaba cómo se sentiría con respecto a sus sentimientos, le importaban más las consecuencias negativas que tendría. Era un vínculo tan hermoso como para dejar que se arruinase.

No era un cambio que estaría dispuesto a realizar.

Su teléfono sonó. Lo tomó en sus manos y vio que se trataba del alfa. Tragó saliva sintiendo la boca de repente muy seca.

Se observó en el espejo de nuevo, sin embargo, el reflejo fue diferente esta vez.

Allí podía ver a un Min Yoongi más joven, con muchos años menos. Su cabello azabache más largo y desalineado. Su ropa despreocupadamente arrugada y poco agradable a la vista.

Era el Min Yoongi de años atrás, el de antes de conocer a Hoseok. Lleno de pensamientos egoístas y negativos. Con una mirada tan odiosa como repugnante. Creía haberlo dejado en el pasado, tan atrás como para no volver a recordarlo siquiera.

Entonces entendió lo que su subconsciente intentaba decirle: volvería a ser ese Min Yoongi si seguía dándole vueltas a la teoría de Jimin.

Si seguía investigando, probablemente espantaría al alfa de una forma u otra. No importaba si era confirmando sus sentimientos por él o siendo totalmente contradecido en ello, lograría que se abriera una grieta incapaz de cerrarse. Una grieta que no haría más que crear distancia entre ellos.

Miró de nuevo el teléfono, seguía sonando con el nombre de su mejor amigo en la pantalla. No contestaría. Ahora no. No era el momento.

Apagó el teléfono y lo colocó en su bolsillo.

Las cosas no debían cambiar.

Cuestionando intenciones - Hopega OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora