Cuestionando intenciones - Hopega Omegaverse

Capítulo 07

—¿Qué quieres decir con que has terminado con Jisoo? —preguntó sorprendido.

Y ahí estaba Min Yoongi, preguntándole sobre su vida amorosa a su mejor amigo, al cual había ignorado por dos semanas completas. ¿La razón? Sencilla: las palabras de Taehyung.

Aunque puede que cierto sueño ayudase a espantarlo.

Era tanta su conmoción que hizo todo lo posible por alejarse de Hoseok. Mintió sobre sus horarios de trabajo y lo cansado que estaba. El castaño no buscó muchos más detalles, esperaba que le hubiese creído. Se sintió mal de rechazar cada oportunidad que tenía para verlo, pero se dijo a sí mismo que era por el bien de ambos. No quería que su amistad fuese modificada por las locas teorías de Jimin.

Al alfa rubio también lo ignoró, pero de una forma mucho menos sutil. Todo lo que estaba pasando era su culpa. Él y su tonta teoría habían hecho de Min Yoongi un desastre. No pasaba un día sin que viniese a su mente la idea de que Hoseok buscaba más que amistad con él. Concentrarse en su trabajo era difícil con la imagen mental de su adorable y amable mejor amigo volviéndose un depredador y caliente alfa.

Bueno, no es que no supiese cual era su naturaleza. Sabía el comportamiento que debería tener un alfa en la intimidad, pero Hoseok... Demonios, no podía pensar en su mejor amigo de esa forma.

—¿Te sorprende? —preguntó el castaño sonriendo —Pues si no me hubieses ignorado por dos semanas, sabrías que últimamente lo nuestro no estaba funcionando —finalizó mirando a su mano jugar con un sobrecito de azúcar.

Estaban en la cafetería de siempre, un lugar público. Lo cual significaba que ahora más que nunca debía mostrarse calmado y relajado por mucho que no lo estuviese. Debía ser serio y convincente.

—Ya te dije que el trabajo me tenía ocupado —dijo con molestia fingida —somos amigos, no podría ignorarte.

No supo interpretar la sonrisa del castaño. No sabía si le había creído o fingía hacerlo.

—El punto es... —dijo retomando el tema anterior — ... que ya no salgo con ella. Alégrate.

El corazón del omega dio un vuelco. Su pulso se elevó.

—¿Qué? —intentó no tartamudear.

Su mirada debió ser bastante sorprendida, ya que Hoseok lo observó confundido.

—Me decías constantemente que no parecía una chica adecuada para mí —explicó dudando.

¿Eso le había dicho? ¿Cuándo?

Yoongi buscó en su mente y recordó más de una vez pronunciar aquello. Aunque si lo pensaba bien, no sabía el motivo. No tenía nada contra la omega.

Quizás solo se tratase de envidia al no tener pareja en ese momento.

—De igual manera, era una chica muy bonita —cambió de tema —Es una pena que hayan terminado.

Internamente el azabache moría por preguntar la razón del rompimiento. Necesitaba saber la situación con lujo de detalles. No sabía porqué, pero era urgente.

¿Cómo preguntar el motivo sin parecer extraño? ¿Cómo preguntar sin confundirse más aún?

Estuvo unos minutos pensando en ello, hasta que su mejor amigo volvió a hablar.

—De verdad que me estás pareciendo muy raro últimamente, Yoongi —dijo mirándolo con una sonrisa.

Recordó el tono que utilizó en su sueño al decir su nombre y se contuvo para no estremecerse. No era el momento.

—¿Raro? Solo me tiene agobiado el trabajo, ya te dije.

Intentó sonar casual y sereno, como normalmente era, mientras miraba a un lado. Sin embargo, estaba seguro de que Hoseok no le creía.

Le pareció extraño que no contestase. Fijó sus ojos de vuelta en él y lo encontró analizándolo con la mirada. Sus orbes tan concentrados y quietos como cuando intentaba descifrar sus mentiras.

—Sé que mientes, de eso no hay duda —afirmó —La pregunta es ¿Por qué?

Quiso negarlo, pero supuso que no serviría de nada. Sus años de amistad respaldaban cuanto lo conocía.

—Solo déjalo y ya —dijo tratando de restarle importancia.

El silencio reinó por unos minutos.

—¿Es por Jimin?

El omega no pudo evitar mirarlo preocupado y sorprendido a los ojos al escucharlo nombrar al rubio. Ese desgraciado era el causante de todo. Él y su estúpida teoría. ¿Acaso también se la había contado a Hoseok?

Los ojos del alfa eran fríos como témpanos de hielo. No recordaba si lo había observado así alguna vez.

—Lo sabía —en su voz era notorio el desagrado —Sabía que el hecho de que le dieras una oportunidad para ser tu amigo no era bueno. ¿Qué te hizo?

Sí, definitivamente al castaño no le caía bien Jimin. Eso era algo que ya sabía, pero ¿era por el motivo que decía el rubio?

Entonces las palabras de Taehyung volvieron a su cabeza. El sueño pasó por su mente en forma de flashbacks. Si antes estaba inquieto, ahora no tenía adjetivo para describir cómo se sentía.

¿Qué debía hacer? ¿Qué debía creer? ¿Qué debía contestar?

Observó una vez más la mirada fría del alfa y se lamió los labios. La intensidad en sus ojos era comparable a la de su sueño. Demonios, tenía que dejar de recordarlo.

—No me hizo nada —su voz salió más baja de lo que pensó —Solo nos hemos estado viendo algunas veces.

Lo contó como si fuese casual, como si en esas veces que se encontró con el otro alfa, no hubiesen estado debatiendo el significado de la mejor amistad que había tenido en su vida. De verdad que Jimin había sido tan desgraciado en decirle aquello.

Los ojos del castaño no se inmutaron.

—¿Qué te hizo? —repitió y su ceño se frunció —¿Acaso se propasó contigo? —dijo con los dientes apretados.

El enfado en el alfa parecía ir creciendo con cada segundo. Debía pararlo, si seguía malinterpretando las cosas podían ponerse feas.

—No, no —se apresuró a aclarar —Jimin no lo hizo, no lo haría jamás.

Hoseok pareció disminuir su enojo, pero no del todo. Su expresión era más serena, pero no menos seria.

Lo observó en silencio unos segundos. Aquella mirada juzgadora que le daba cuando actuaba de manera incorrecta.

—¿Aún sientes algo por él?

No se oyó tan enfadado como antes, incluso se notaba más calmado. Sin embargo, Yoongi se alteró. Su pulso se volvió elevado de nuevo. Sentía su corazón latir en su garganta.

Tenía en claro que sus sentimientos por Jimin eran cosa del pasado, eso no era lo que lo ponía nervioso. El hecho de que el castaño mostrase interés en ello, eso era lo que lo alteraba.

¿Estaba preguntando desde la perspectiva de mejor amigo o...?

¡Estúpido Jimin y su teoría! No estaba bien dudar de las intenciones del alfa.

Observó a su mejor amigo.

—Yo... —quería decirle la verdad, quería decirle que ya no sentía nada por Jimin, pero —No lo sé.

A pesar de tener sus sentimientos por el rubio en claro, algo le pidió que no lo dijese. Quería mostrarse indeciso frente a Hoseok, quizás buscando una señal de que la teoría de Jimin era falsa o verdadera.

El rostro del castaño se mostró dubitativo por unos segundos para luego sonreír. Esa sonrisa pequeña y simpática que mostraba a pesar de estar en desacuerdo con alguien.

—Creo que necesitas pensar en ello.

Su voz tan cálida como siempre que lo aconsejaba.

—Sí, tienes razón —confirmó pensando en lo tonto que había sido al fingir estar confundido.