¿Qué tienen de bueno seis ninis vírgenes?

24.-(+18)¿Realmente eres tú?

Narra ______

Era por la tarde. El sol emitía un calor muy agradable, y me comenzaba a entrar sueño.

Yo estaba en la habitación de los sextillizos, tirada en el suelo sin nada que hacer. En ese momento llegó Karamatsu.

Le observé. Estaba colocando un futón en el suelo.

•_____: ¿Qué haces, Karamatsu?

•Karamatsu: Ah, my flower, voy a tomar una siesta. ¿Quieres dormir conmigo?

En ese momento me sonrojé y me estremecí. ¿Con él? ¿Dormiría con él? Me daba un poco de vergüenza, pero, al fin y al cabo, éramos amigos, no significaba nada extraño, ¿no?

•_____: ¿C-contigo...? —respondí aún sonrojada.

•Karamatsu: Sí, ¿por qué no? Bueno, solo si tú quieres.

•_____: E-está bien —accedí sonriendo. Tenía sueño, y una siesta me vendría bien para descansar.

Karamatsu se quitó la sudadera y se quedó en camiseta interior. Eso provocó que me sonrojara más, y él hizo un gesto para que me metiera en el futón con él.

Me acurruqué entre las sábanas y cerré los ojos.

Podía sentir la respiración de Karamatsu en mi piel, y él se acurrucó. Mi pulso se aceleró, pero solo traté de dormir.

Concilié el sueño antes de lo que esperaba.

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Me desperté completamente descansada.

Abrí los ojos lentamente y miré a mi alrededor. Karamatsu no estaba.

•_____: Se habrá despertado ya —pensé.

Intenté moverme y salir del futón, pero, extrañamente, no podía. Algo me impedía moverme.

Me retorcí un poco más y las sábanas se apartaron un poco, dejando a la vista parte de mi torso. Entonces me di cuenta, estaba atada de manos y pies.

Me extrañé y me puse nerviosa. ¿Quién habría hecho eso y por qué?

A los pocos segundos escuché un gran grito de dolor que provenía de fuera de la habitación.

•XXX: ¡GHAAAAAAAAAAH!

•XXX: ¡HAHAHAHAHAH!

Me asusté aún más, pero al poco tiempo apareció alguien que abría la puerta. Entró Karamatsu.

Tenía la misma expresión de siempre. Todo normal... Salvo por la sangre que había salpicada en su rostro y en su sudadera.

Me quedé sin palabras por un instante.

•_____: ¡Karamatsu! ¿¡Q-qué está pasando!? —pregunté asustada.

•Karamatsu: Oh, _____-chan, mi querida _____-chan —dijo en un tono sereno mientras se acercaba lentamente a mí-. No te asustes.

•_____: ¿¡Qué fue ese grito!? ¿¡P-por qué estás manchado de sangre!?

•Karamatsu: Oh, eso, bueno -hizo una pausa-, maté a los demás.

Karamatsu lo dijo como si fuera lo más normal del mundo, algo que me sorprendió severamente e hizo que mi miedo aumentara.

•_____: L-los has matado...