Estábamos todos en la habitación, holgazaneando.
•Osomatsu: Eeeeh, _____-chan, ¿no nos vas a dar chocolate por San Valentín? -dijo él en un tono vago, tirado en el suelo.
•_____: Tsk, como si me importara.
•Osomatsu: Ah, qué cruel.
•Todomatsu: ¿Por qué no vamos a casa de Totoko-chan, a ver si ella nos da?
•_____: ¿Totoko-chan?
•Choromatsu: Es una amiga nuestra. ¡Es taaaan lindaa! <3
•Los 6: ¡Aaaah! <3
•_____: Hey -me molesté-, ¿tan linda es?
•Karamatsu: Pues sí. Espera, ¿estás celosa, my dear? -me miró con una cara desafiante.
•_____: Y-yo... ¡Por supuesto que no, idiotas! -me crucé de brazos y les dí la espalda.
•Ichimatsu: No te pongas así.
•_____: Podéis ir a casa de "Totoko-chan", me da igual.
•Jyushimatsu: _____-chan... -Osomatsu le puso la mano en el hombro.
•Osomatsu: ¡Déjala! No merece la pena.
Aquellas palabras se me clavaron en el corazón como flechas.
Ellos se fueron así, sin más, dejándome sola. ¿Pero quién era esa Totoko? ¿Y por qué me dejarían por ella?
Decidí seguirlos sin que me vieran, solo por curiosidad. Y no, no estoy mal de la cabeza.
•Osomatsu: ¡Wah, tengo ganas de ver a Totoko-chan!
•Choromatsu: Sí, hacía timpo que no la veíamos.
•Jyushimatsu: ¡TOTOKO-CHAAAN!
Entraron a una casa cuya entrada era una pescadería.
Trepé por algunas cajas que estaban apiladas y me subí al tejado, donde había una ventana que daba al cuarto de una chica. Ella era Totoko.
Los sextillizos se encontraban en esa habitación también.
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¿Qué tienen de bueno seis ninis vírgenes?
Fiksi PenggemarHistoria Osomatsu-san×Reader Aviso: puede contener +18 _____ Nyota es una chica recién despedida de su trabajo. En paro y con deudas en el alquiler, acaba en un bar de oden portátil. Allí conoce a unos sextillizos... un poco raros. ¿Surgirá el afec...
