𝙸 𝚗𝚎𝚎𝚍 𝚞.

14.- Where R U.

Cuenta regresiva : 1/6

ANGI

Entonces te das cuenta que esta historia no tiene tumbo cuando dejas que el tiempo decida cada situación a proceder y alcanzar, cada vez que piensas, respiras o analizas, pones sobre todas esas cosas a una persona y ¿quien es ella?, la pequeña y dulce Any, que debió meterse en algún lugar de la casa, ¿dónde estás?

Últimamente las cosas van mejor, llevamos un par de semanas juntas y a pensar de que aún es un poco cohibida con algunas cosas. Todo marcha perfectamente.

— ¿Debería asesinarte?.— Bueno, eso me sorprendió.

— ¿Por qué deberías?

— Haz déjalo sucia la cocina.

— ¿Enserio?

— Si enserio, Angi. Deja de ser una sucia y limpia la cocina.

— Bien, como la reina diga.— Me levante del sofá y fui a la cocina a comenzar a limpiar.— Deberías agradecerme.

— ¿Por qué?, por limpiar tu desastre. Ni lo pienses, es tu obligación.

— Auh, se más delicada, tengo corazón.

— Y yo tengo asco de ver la cocina, así que silencio y sigue limpiando.— Se fue con dirección a la habitación, me gustaba verla así.

— Esta noche no caminas.

— ¡¿Qué dijiste?!.— Grita desde la habitación.

— ¡Que deberíamos ir por comida!

— ¡Quiero sushi!

— ¡Lo que quieras, bebé!

Termine de alistar la cocina y corrí a la habitación para ponerme unos pantalones y tomar las llaves del automóvil. Cinco minutos después estaba en la puerta principal esperando a Any.

— ¡Tengo hambre!

— ¡Ya voy!

— ¡Any, solo vamos por comida!

— Merezco estar bonita hasta en eso.— Salió por fin del pasillo.

— Siempre te ves bonita.— Deje un beso en sus labios.— Vamos.

— Vamos.— Palmee su rico trasero antes de salir.— ¡oye!

— Lo lamentó, pero me gusta demasiado.

— Como sea. Vamos.

(. . .)

Habíamos pedido el sushi estaban por entregarlo pero debí olvidar mi cartera en casa.

— No traje efectivo.

— Descuida, yo lo traigo. Espera aquí.

Y salió corriendo con dirección al auto nuevamente. Demoro 15 minutos aproximadamente y volvió con sus mejillas sonrojadas, así como sofocada y algo acalorada. Curioso.

— ¿Todo bien?

— Me he topado con un amigo solamente.

— Entiendo.

Pagamos y volvimos al auto, conduje en silencio, me había molestado eso. No tenia por que hacerlo pero lo había hecho. Mi bebé no debe hablar con "amigos" a solas. Tontos celos.
Llegamos a casa y baje del auto sin tomar más que la comida y subir a la cocina.

— ¿todo bien?.— Se escucha preocupada.

— Claro. Entra, tengo hambre, bebé.

— Bien.

La cena pasó tranquila, sin muchos ruidos, al terminar Any recogió los utensilios utilizados y los lavo, dejando impecable la cocina y comedor, después fue a la habitación, pero no tardo mucho en volver.

— ¿Puedes prestarme las llaves del auto?

— ¿Para?

— Deje mi bolso dentro.

— Esta bien.— Tomó las llaves y se las doy.— Cuidado.

— Sip.

Salió de casa azotando la puerta, me removí en mi lugar y decidí salir para seguirla, soy una loca, pero solo quiero saber que hace.
La vi con su cabeza metida por la ventana del auto, ¿por qué no simplemente abriste la puerta y ya?
Me acerqué a ella y le di un gran apretón a su trasero, masajeándolo después.

— No sabes lo mucho que me encanta tu culo.

— Deja de ser tan vulgar.

— Sabes que te encanta.

— Sí, pero aquí no.— Se sonrojo.

— Bueno, entonces...— Me acerque a su oído y deje un beso.— entremos y te muestro lo bien que te gustará seguir haciéndolo.

— Eres una sucia.

— ¡La ultima que llegue es la pasiva!.— Salí corriendo.

— ¡Eso es injusto!

Te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo.