CAP 6. "la frase"

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Narra Jungkook.

Había despertado con una gran resaca y peor aun con un gran dolor de cabeza, cuando mire el despertador eran 10 a.m y no entendía porque mi madre me despertó a gritos, si hoy era domingo. Apenas logre levantarme de la cama, me dirigí a la sala para pedirle dormir un rato más.

- Madre...¿qué sucede?. -

- Me llamaron del colegio. -

- Les dijiste que es domingo ¿o qué?. -

- ¿O qué? Mira quieren que vayas a ayudar como auxiliar...ya que estás en penitencia. - Oh rayos, la vieja de la directora le conto.

- Fue una confusión, madre le hubieras dicho que estaba enfermo. -

- Aja, por no decirme que estuvistes en penitencia vas a ir, quieras o no. -

- Pero...-

- Pero nada y vete a cambiar, yo te llevaré para dejarte en la escuela y no te escapes. - Sabía que era inútil discutir con mi madre ella siempre tenía la razón, así que con toda la pereza del mundo subi a mi cuarto y me aliste. Mi madre tal como dijo me llevo a la escuela, me hubiera dado vergüenza si era un día de semana así que no hice alboroto para ir con mi auto, aparte de seguro sería el único idiota que va un domingo a la escuela, aunque ahora que recuerdo aquella chica, Yeri, también estaba en penitencia a lo que ella si estaría. La verdad de tanto pensar la cabeza me dolia más así que solo me recosté hasta llegar.

- Apenas termines te tomas algún autobús. - Baje del auto y mi madre me dijo aquello y quede completamente sorprendido.

- ¿Qué? ¿Un autobús?. -

- Si y no hagas alboroto porque yo tengo mucho más para quejarme. - Mi madre cerro la puerta del auto y rápidamente se retiro de allí.

- Ufff....porque me pasa esto a mi. - Me hable a mi mismo.

- Hola, Jeon. Venga por aquí tengo sus tareas. - Voltee a ver quien me hablaba y allí estaba la directora.

- Claro. - Sonreí lo mejor que pude y seguí los pasos de aquella anciana insoportable. Apenas entre a la secundaria vi a Yeri quitando los adornos del establecimiento, me pregunte como es que estaba tan fresca un domingo para hacer eso. Cuando la directora me dio una lista de tareas espere a que se vaya y me sente un rato a descansar, la verdad es que me sentía muy mareado. Sentado allí sobre una de las sillas desordenadas, observe que Yeri ni había notado mi presencia o no mostro interesarle que yo la estuviera viendo, hasta que la vi tomar una pequeña escalera ya que no llegaba a quitar un adorno de la pared y era claro, si era demasiado pequeña. Tome fuerzas y me acerque a ella para ver si necesitaba ayuda, pero antes de llegar note que resbaló y rápidamente fui a sostenerla.

- Gr...gra...gracias.. - Yeri y yo cruzamos nuestras miradas que estaban separadas por pocos centímetros, ya que yo la sostenía sobre mis brazos y ella rodeaba mi cuello con uno de sus brazos.

- Estuvo cerca, ¿estas bien?. -

- Si, si, gracias. - Yeri rápidamente bajo de mis brazos y cuando la suelto casi caigo del mareo que tuve. - Jeon ¿estás bien?. - Escuche la voz de la pequeña Yeri.

- Si, solo que ayer bebí mucho, no esperaba hoy despertar temprano. - Yeri extiende la palma de su mano, tocando mi frente y luego tomo mi brazo rodeando con sus dedos mi muñeca.

- No tienes fiebre, así que si es resaca. - La vi irse y tomar un pequeño bolso y sacar algo de allí. - Ve a un lugar donde no te vean los directivos y toma estás pastillas, te ayudarán a bajar el alcohol que traes. -

- Gracias. - Acepte aquellas pastillas y luego me ofrecio una botella de agua que también agradecí y fui a buscar algún lugar donde beberla. Opte por ir a la biblioteca ya que allí no iba nadie casi nunca y menos un domingo, apenas ingrese al cuarto, saque aquel fraco con las pastillas y lo pose sobre el primer estante que vi junto con la botella de agua. Saque dos pastillas del frasco y luego las tragué al beber un poco de agua, sabía que no me haría efecto rápido así que espere unos minutos y de apoco el dolor de cabeza se iba desvaneciendo, al menos ahora podía quedarme parado sin marearme. Estando en aquel lugar tan callado, que aunque nadie sabía era uno de mis favoritos, no te en la puerta principal que estaba cerrada una frase. Me pregunte quién la habría escrito y cómo me pareció que la persona que la escribía debería ser alguien que este pasando mal de amor, ya que no cualquiera escribiría en la puerta de la biblioteca y menos una frase de william shakespeare. Tome uno de los lapices que estaban cerca de allí y respondí aquella frase.

between phrases;♡ ( jungri ).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora