Desde el instante en que lo vi, quedé cautivada. Mi mundo giraba en torno a él, una dependencia irrefutable. Me hirió profundamente, pero de esa herida surgí fortalecida. Él me destrozó, pero al hacerlo me hizo mas fuerte.
Al principio, fue mi cond...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Deje a las chicas en la cafetería, ellas se pondrán al día, mientras voy en busca de Nathan, entiendo su enojo, su ira, pero todos sabemos que la está dirigiendo a la persona equivocada.
Fallon.
Fue una sorpresa saber que ella también está estudiando aquí en esta universidad, de entre todas las otras tuvo que venir a esta, mierda. Sé que este encuentro removió viejas heridas en mi mejor amigo, Fallon y él fueron muy bueno amigo hace un tiempo, ella es la hermana de su ex Feilen. Luego de que Nathan se enterara de la infidelidad de Feilen rompió todo lazos con ellas dos, culpo a Fallon de nunca haberle contado de lo que hacía su hermana a sus espaldas, pero no es como si quisieras romperle el corazón a tu mejor amigo contándole que tú hermana lo engañó, fue una mierda, lo sé, pero puede entender su posición.
Al principio me jodió al igual que todos cuando todo salió a la luz pero después de un tiempo entendí que Fallon no era la culpable aquí y que ese no era su secreto para contar. Nathan no lo vio de esa manera la culpo y lo sigue haciendo por lo que acabo de presenciar no hace poco.
También sabemos del pequeño enamoramiento por parte de Fallon hacia Nathan, siempre fue obvio su interés en él, y aunque tuvo lo oportunidad de tener su momento si decía lo de su hermana no lo hizo, guardo silencio y con ello se condenó a sí misma.
Abro la puerta de nuestro departamento y ahí está él, Nathan no es de las personas que pierden fácil los estribos, pero esto lo ha jodido hasta la médula. Las líneas de su cuerpo aún siguen en tensión, todo su cuerpo sigue en plena ebullición.
— ¡De todas las otras malditas universidades tuvo que venir a esta! ¡Exclusivamente a esta!. ¡La quiero jodidamente lejos de mí! ¡No sé cómo coño lo hará, pero quiero qué se mantenga en su maldito puto lugar!— soy plenamente consciente de su exaltación. Nathan pasa una mano en frustración en su rostro.
—Ya acabaste.— digo, mientras tomo asiento en el mueble. — No es por hacer un punto aquí, hombre, pero sabes que lo que estás pidiendo es extremadamente imposible. Las verás siempre y más ahora que Eisel sabe que ella también está estudiando aquí.
Mis palabras alimentan el fuego en él, pero uno de los dos tiene que ser realista.
— ¡Es una puta broma!— grita.— ¡Me importa un carajo, ella tiene que mantenerse alejada de mi!.— no sé qué me hace decir esto.
— ¿Enserio? ¿Te estás escuchando, Nathan?— mi temperamento empieza a elevarse.— ¡Supéralo de una maldita vez! ¡Fallon no es la culpable aquí, aunque tú quieres que lo sea, ello no hizo nadas más que guardar silencio...! ¡Un secreto que no era suyo para cantar, lo sabes!. Aquí la única culpable es la perra de Feilen es a ella a quién tienes que dirigir tu ira. Pero no, tú no lo haces, te empeñas en albergar odio a una persona completamente inocente, ¿De qué culpas a Fallon en verdad? De no haberte dicho nunca lo que hacía tu novia o de que te has mentido todo este tiempo sobre ella?. Tú y yo sabemos que Feilen te importaba una mierda.— mis nudillos están blanco por lo fuerte en que estoy cerrando mis manos, esto era algo que debí de decirle hace mucho tiempo.
